Las agencias de crédito, titiriteros invisibles de las finanzas mundiales, tienen una nueva sombra: Dagong.
La agencia calificadora de riesgo china busca disputarle a las estadounidenses Moody, Standard and Poor (S&P)y Fitch su hegemonía a la hora de dictaminar qué gobiernos y empresas son dignos de crédito.En su último informe Dagong no dudó en bajarle la calificación a Estados Unidos, mejorar la de varios países latinoamericanos y endurecerse con los países periféricos de la eurozona.
Mientras que para Moody o Standard and Poor EE.UU. tiene una calificación de deuda de máxima garantía y riesgo mínimo que le facilita financiarse en los mercados a bajas tasas de interés, Dagong redujo la calificación de AA a A debido a la expansión monetaria decidida por la Reserva Federal estadounidense.
El director de la agencia Guan Jianzhong señaló a BBC Mundo que la capacidad de generar crecimiento económico es central en su calificación.
"Para nosotros lo fundamental es la capacidad de generar riqueza de un país en un momento dado. Esto es diferente a la evaluación de las agencias occidentales que se basa en la capacidad de un país de financiar su deuda", señaló a BBC Mundo Guan Jianzhong.
Los gobiernos - la llamada deuda soberana - son los principales clientes del mercado de capitales, absorviendo un 62% de los préstamos, por valor de unos US$8 billones.
Y las agencias son clave. De su calificación dependerá el interés que paguen los gobiernos.
La guerra de las agencias
La creciente presencia en el escenario crediticio internacional de Dagong se da en el marco de una fuerte tensión entre la eurozona y las tres agencias crediticias estadounidenses.En las últimas semanas esta tensión ha explotado con las intervenciones de las agencias poco antes que países de la eurozona salieran a los mercados de capital a pedir financiamiento.
Este marzo, el primer ministro de Luxemburgo y jefe de ministros de economía de la eurozona, Jean Claude Juncker, criticó la rebaja de la calificación crediticia que Moody aplicó a la deuda soberana de España horas antes de que el Banco de España diera a conocer sus necesidades de financiamiento.
En un sentido similar se pronunció el ministro de Finanzas de Grecia, George Papaconstantinou, quien acusó a las agencias crediticias de "falta de transparencia" por reducir la calificación de deuda griega a B1 (inversión altamente especulativa, es decir, sin garantía de pago).
Nadie olvida que las agencias crediticias otorgaron la calificación de triple A - una especie de garantía de riesgo 0 de cesación de pagos - a cientos de miles de millones de dólares de títulos de hipotecas subprime que terminaron siendo los activos tóxicos (deudas incobrables) que dispararon el estallido financiero de 2008.
Agregándose a la ola de críticas, el director de Dagong señaló a BBC Mundo que las agencias tienen una agenda ideológica.
"Las agencias estadounidenses están muy politizadas y siguen una visión muy ideológica que no se ajusta a criterios científicos", señaló Guan Jianzhong.
Por su parte, Jean-Claude Juncker, se mostró a favor de la creación de una agencia de medición de riesgos europea.
Disparen sobre Dagong
A pesar de que Dagong es una compañía privada, los críticos la acusan de ser un instrumento político del gobierno chino."La percepción generalizada en el mercado es que hay un riesgo de que la agencia china esté actuando políticamente más que suministrando un análisis político", indicó a Bloomberg Ian Lyngen un estrategia de Bonos de CRT Capital Group LLC.
Este criterio político podría percibirse en la decisión de otorgar a China la máxima calificación crediticia, a diferencia de las agencias estadounidenses.
Por otro lado Dagong no dudó este mes en bajar la nota crediticia a Portugal, país al que China prometió apoyo económico a fines del año pasado.
En todo caso, el criterio usado por Dagong se ajusta mejor a los países en desarrollo - convertidos hoy en un motor económico global - que a los desarrollados, agobiados por su gigantesca deuda y déficit fiscal.
Según Dagong, América Latina seguirá creciendo gracias a la demanda y la inversión, liderados por Brasil que se beneficiará por la organización de los juegos olímpicos en 2012 y el mundial de fútbol en 2014.
Esto no quiere decir que la región esté exenta de problemas, como señaló a BBC Mundo el director de Dagong.
"La presencia de dinero caliente, la misma dinámica del crecimiento y el impacto de los precios de los productos primarios son amenazas a este crecimiento", señaló.
BBC Mundo