Apple planea una versión internacional de su iPhone para el próximo año que funcionará con redes 3G además de con el sistema CDMA2000 utilizado fundamentalmente en Estados Unidos.
Informaciones publicadas sugieren que el nuevo terminal podría utilizar un chipset híbrido de Qualcomm y que en un principio se vendería en Estados Unidos a través de Verizon, durante el verano del próximo año.
El nuevo terminal se convertiría en el primer smartphone con capacidad de ser un teléfono que verdaderamente traspase fronteras al poder funcionar en diferentes redes.
Además, el próximo iPhone sería más pequeño que el actual, con una pantalla de 2,8 pulgadas frente a las 3,5 pulgadas de los modelos actuales.
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