"Este es un gran momento para nosotros. Podemos decir que Internet ya habla árabe". Con este entusiasmo comunicaba el ministro de Comunicaciones egipcio, Tarek Kamel, la aparición del primer dominio en lengua árabe que abrirá el ciberespacio a decenas de millones de personas que hasta ahora no podían navegar por no conocer el alfabeto latino.
El anuncio lo realizó el ministro en el cuarto encuentro del Foro de Gobernanza de Internet de Naciones Unidas, que se celebra estos días en la localidad-resort de Sharm el Sheik, situada en el Mar Rojo, bajo el título 'Creando oportunidades para todos'.
El lanzamiento de la primera página cuya dirección podrá teclearse enteramente en árabe responde a la decisión, adoptada el mes pasado por la Corporación de Internet para Números y Nombres Asignados, el regulador ICANN, de permitir que la Red dé acceso a páginas web tecleadas en cualquier alfabeto que no sea latino, como el árabe, el chino, el coreano, el japonés, el ruso y un largo etcétera.
Egipto se convierte así en el primer país en lanzar una web en árabe, cuyo dominio se pronunciará '.masr' (Egipto, en dicha lengua).
Hasta ahora, todos los dominios de Internet (la terminación de toda dirección web que aparece tras el punto, como es el caso de .es, .com o .org) sólo podían figurar en caracteres latinos, lo que impedía a millones de habitantes del planeta que no saben leer este alfabeto acceder al ciberespacio.
El Cairo, con un número estimado de internautas de 15 millones de personas, ha sido el primer país de Oriente Próximo en preparar un dominio genuinamente árabe.
Es muy posible que esta tendencia se extienda rápidamente, ya que según los cálculos de uno de los fundadores de Yahoo!, Jerry Yang, participante en el encuentro del Mar Rojo, se estima que sólo un 1% de Internet está en árabe pese a la existencia de 300 millones de árabe parlantes en el mundo.
Eso, sin embargo, no facilitará la difusión de la libre información 'online' en Oriente Próximo. Egipto ejerce, como una inmensa mayoría de los países de la región, una fuerte censura sobre los contenidos de la red de redes y persigue a muchos blogueros y disidentes políticos que critican las políticas oficiales desde el ciberespacio, como demuestran las múltiples denuncias de ONG como Human Rights Watch.
Eso ha llevado a Reporteros Sin Fronteras a incluir
No hay comentarios:
Publicar un comentario