A pesar del enorme interés generado por el smartwatch de Samsung, el Galaxy Gear, al final su recepción por parte de los usuarios y la crítica no ha sido la esperada. Sus limitaciones e incompatibilidad con muchos smartphones han sido un gran lastre difícil de llevar, pero ahora descubrimos que puede “hackearse” para usarlo como un dispositivo Android normal y completo.
El Galaxy Gear contaba con su propio interfaz y aplicaciones, pero activando la opción de USB debug podemos instalar todo tipo de aplicaciones a través del ordenador y ADB.
Recordemos que el Galaxy Gear de Samsung dispone de un procesador de 800 MHz, 512 MB de RAM, 4GB de memoria interna, cámara y Android 4.2.2, por lo que es capaz de ejecutar sin problemas muchas apliaciones. Eso sí, que su interfaz sea el más adecuado para su diminuta pantalla ya es otra cosa.
En el vídeo podéis ver como funcionan varias de estas aplicaciones en el dispositivo de Samsung, incluyendo reproductores de música, juegos como Candy Crush y hasta aplicaciones de interfaz de inicio, que te permitirá usarlo prácticamente como cualquier smartphone o tablet.
Eso sí, además de la limitada potencia, existe un gran pero, que es su falta de conectividad online, ya que su tethering Bluetooth sólo funciona con sus propias aplicaciones, por lo que no podremos navegar por internet ni enviar mensajes. Además, sin estar rooteado no podemos instalar las aplicaciones de Google como Maps, Play Store o Hangouts.
Quizás cuando se rootee se podrá no sólo liberar estas funciones que absurdamente Samsung ha bloqueado, sino también instalarle una ROM que pueda aprovecharlo al máximo.
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