Los reguladores estadounidenses están un paso más cerca de oficializar la actividad inversora a través del crowdfunding tras más de un año de espera.
Las nuevas normas se incorporan dentro de la denominada ley JOBS, ley de apoyo a startups y llevan en los fogones un año y medio. Como señala The Washington Post elites políticas federales han criticado públicamente el retraso del órgano regulador.
Finalmente se espera que se oficialice hoy, cuando el SEC autorice públicamente la venta de valores a través de portales regulados de crowdfunding.
El paquete de normas busca relajar las barreras a las que pequeñas empresas se enfrentan para crecer y al mismo tiempo proteger a inversores de fraude. Las operaciones de financiación colectiva deberán regularse a través de intermediarios regulados o a través de portales registrados. Se desconoce el número de sites que se considerarán oficiales y la forma en que se regulará esto, señala Reuters.
Se limitará por ley la cantidad de dinero que podrá invertirse. Así, quienes tengan ingresos inferiores o de 100.000 dólares anuales podrán contribuir con el 5% del capital como máximo. Las empresas que recauden más de 500.000 dólares deberán ofrecer informes auditados.
La regulación cuenta con el apoyo de las dos fuerzas políticas estadounidenses.
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