EcoATM debuta estos días en un centro comercial de Nebraska. Es un “cajero automático” para reciclar viejos teléfonos móviles que es capaz de determinar el modelo y marca del terminal que se introduce, su estado físico y calcular el precio que tendría en el mercado de segunda mano. A continuación imprime para el usuario un cupón de descuento, una tarjeta regalo o realiza una donación por el importe del dispositivo.
La inspección se realiza a través de diversas cámaras que detectan arañazos, grietas o teclas en mal estado y el usuario que no esté conforme con el precio siempre puede recuperar el producto. En caso de que su valor sea nulo o esté muy deteriorado, la máquina ofrece la posibilidad de desecharlo en un depósito especial para reciclaje.
EcoATM no es la primera empresa que ofrece el reciclaje o la compra de productos de segunda mano, pero sí la única que ha creado un sistema automático de evaluación del estado del producto. La idea de su fundador es cambiar el ciclo natural de desechado de productos de electrónica, que normalmente se quedan en un cajón o una caja hasta que su valor es cero. Con estos cajeros se incentiva el reciclaje cuando el producto aún puede tener un valor en el mercado de segunda mano sin que el usuario tenga que recurrir a otros medios de venta o subasta que normalmente requieren dedicar tiempo y esfuerzo.
En principio los cajeros pueden reciclar todo tipo de productos —desde GPS hasta MP3-, aunque la primera versión, que apenas lleva una semana en funcionamiento, se limita a teléfonos. Está previsto que en la segunda mitad de 2010 se instalen nuevas máquinas en varios estados de EE.UU. Por ahora esta unidad ha conseguido que en su primer día en funcionamiento se reciclen 23 teléfonos y ha repartido casi 70 euros como compensación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario