Silenciosa y sin una potencia abrumadora, igual que su motor. Así es la revolución que encabeza el Toyota Prius y que ha empezado a cuajar tras más de una década . El 2009 ha sido su año. Este modelo se ha coronado como el más vendido en Japón, convirtiéndose en el primer automóvil de este tipo en liderar las ventas de un gran mercado, con más de 200.000 unidades. Todo, pese a la reticencia mostrada por gran parte de la industria cuando en 1997 se convirtió en el primer híbrido fabricado en masa.
Pero hoy no sólo ha logrado desbancar a los miniutilitarios que han dominado el mercado nipón sin oposición durante años. Desde hace casi una década es el coche que todas las estrellas de Hollywood y muchos políticos estadounidenses lucen orgullosos.
Los expertos creen que su consolidación este año encamina el mercado global hacia los vehículos híbridos, más limpios y eficientes que los tradicionales. Combinan un motor de explosión de gasolina y uno eléctrico. Por eso gastan mucho menos combustible y pueden resultar hasta un 50 por ciento menos contaminantes, especialmente en ciudad, con marchas cortas.
Gran parte del creciente éxito de los híbridos viene sustentado por los gobiernos, que se están inclinando por políticas de emisiones cada vez más severas y planes de estímulo para favorecer la compra. Es el caso de Japón, donde las ayudas promovidas por las dos últimas administraciones permiten ahorrar hasta un 10% entre descuentos y recortes de impuestos.
"Está claro que la gente busca ahora coches más limpios y que gasten menos. Pero el éxito del Prius en Japón habría sido imposible sin el plan de apoyo del Gobierno", opina Yoshiaki Kawano, analista de la consultora multinacional CSM en Tokio. "Esto es sólo el principio de esta nueva era en la que se impondrán los automóviles más limpios. Y hoy en día el híbrido se ha posicionado como el modelo que marcará el camino al menos durante los próximos cinco o seis años".
La inestabilidad del precio del crudo, la alternativa aún lejana de los coches de hidrógeno - por problemas de coste y seguridad - o el precio de fabricación de los eléctricos - además del excesivo tiempo de carga requerido o la falta de instalaciones para repostar - están entre los factores que permiten mostrar al híbrido como la clara alternativa a medio plazo.Por si quedan dudas, no hay más que ver cómo se ha desarrollado estos días el Salón de Detroit. La crisis y la mayor preocupación por el cambio climático han convertido a híbridos y eléctricos en estrellas.
Entre los primeros se han presentado modelos que se comercializarán este año -el Compact Coupé de Volkswagen o los CR-Z y Fit de Honda, aumentando la competencia y favoreciendo al comprador con precios más asequibles. Éste, por su parte, cuenta en el mercado europeo, japonés y americano con una opción que rivaliza con el Prius: el Insight de Honda - quinto más vendido en Japón en 2009 -, un híbrido que consume menos gasolina que el modelo de Toyota, 3 litros frente a 3,8 a los cien kilómetros.
Sin embargo, pese a que el modelo de Honda compite desde 1999 con el de Toyota, éste no ha dejado de ser líder. Es muy reseñable en Estados Unidos, donde el Prius tiene su mayor mercado, más de la mitad de sus ventas, y copa el 60 por ciento del segmento. El fenómeno se debe en parte a la imagen de "vehículo para gente conciente", que Toyota ha perfilado. "¡Miley, ése no es tu Prius!", le gritó la pasada semana un periodista a la cantante y actriz Miley Cyrus, que se confundió de coche en un estacionamiento de Los Ángeles.
Los expertos señalan, en cualquier caso, que no todo va a ser un camino de rosas para los coches híbridos. En primer lugar, existen discrepancias sobre su impacto ambiental, especialmente en lo que se refiere a la toxicidad de las baterías de níquel e hidruro metálico que requieren los motores eléctricos. Tanto Toyota como Honda aseguran gestionar celosamente su reciclado.
Otros vaticinan posibles problemas de abastecimiento de las tierras raras que utilizan estos coches para sus componentes. Por ejemplo, el Prius emplea un kilo de neodimio y 15 kilos de lantano para el motor y la batería.
Todo porque China, el mayor productor mundial de estos materiales, está limitando las exportaciones ante la subida global de la demanda. "Además. China tiene la última palabra sobre el futuro de los híbridos", explica Kawano. "Al igual que otras naciones en desarrollo como India o Brasil van a apostar ahora por vehículos más pequeños y económicos. Pero está claro que luego optarán por vehículos más eficientes, ya sean híbridos o puramente eléctricos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario