Al mediodía de este lunes en la estación de trenes de Shinbashi en Tokio, un grupo de pasajeros esperaba en silencio frente a una pantalla de televisión.
La noticia mostraba la espesa columna de humo saliendo de la planta nuclear de Fukushima, ubicada en el norte de la capital.Había ocurrido otra explosión -la segunda en tres días- y por ello, expertos discutían los riesgos que la planta ahora representa para aquellos que habitan en las zonas aledañas.
En la plaza cercana a la estación, vendedores de periódicos ofrecían ediciones especiales de diarios vespertinos que estaban compuestos sólo por una hoja y un gran título: "Explosión en el reactor número 3".
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En la edición podían apreciarse fotos aún más dramáticas del humo y las llamas provenientes de la planta nuclear.
Empleados de las oficinas de la zona tomaban las hojas y leían, ansiosos por conocer alguna nueva información acerca de la crisis que enfrenta el país.
Preocupaciones de salud
Un economista explicó a la BBC que su oficina se encontraba cerrada, que los servidores de datos estaban caídos y que se encuentra muy preocupado por su familia y por su hijo pequeño.Dijo además que no confiaba en la seguridad que muestran las autoridades al afirmar que las fugas radioactivas de la planta no suponen un riesgo significativo para la salud.
"No sería la primera vez que ocultan algo", señaló.
Uno de sus compañeros de trabajo -de nacionalidad estadounidense- dijo que un colega suyo había huido de Japón junto a su familia porque se sentía inseguro.
Sin embargo, la mayoría de sus compañeros de trabajo permanecen en Japón.
"Algunos no tienen otra opción. El dinero no les alcanza para recoger todo y mudarse fuera del país de un día para otro", explicó.
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Al límite
En los comercios ya se puede observar la escasez debido a que el suministro ha estado suspendido desde el terremoto.Muchas de las estanterías están vacías, no sólo por el desabastecimiento sino también por la cantidad de gente que ha hecho compras nerviosas.
Las gasolina cada vez es más difícil de conseguir y en algunos lugares de la ciudad también han ocurrido cortes de electricidad, que son planificados por el gobierno para ahorrar energía.
Esto, tal y como se ha advertido, no sólo durará días, sino semanas.
BBC Mundo
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