Es raro que pase un día sin que aparezca alguna noticia relacionada con los prodigiosos y versátiles avances de la impresión de objetos en 3D. Una de las ramas de la Ciencia donde se le está sacando un gran partido y donde representa un gran beneficio es en la Medicina. Hoy te mostramos una vértebra confeccionada mediante esta tecnología que ha permitido sustituir la de un niño afectado de cáncer.
La medicina y en concreto el sector dental conocerán un espectacular crecimiento del negocio de la impresión 3D de piezas y prótesis pasando de los actuales 141 millones de dólares a casi 900 millones en el año 2025 tan sólo en Estados Unidos de América. Uno de los últimos ejemplos de la versatilidad de esta tecnología nos llega desde China, donde el hospital universitario de Pekín ha consenso con éxito reemplazar una vértebra cancerosa del vuelo de un niño de 12 años.
El paciente sufrió una dolorosa rigidez en el cuello la mañana siguiente de haber cabeceado un balón durante un partido de fútbol. Un mes después todo su cuerpo comenzó a quedar inmovilizado llevando a los médicos a efectuar una biopsia tras la que diagnosticaron la presencia de un tumor maligno en la segunda vértebra del cuello.
E una operación de más de cinco horas de duración se ha sustituido su vértebra por otra obtenida mediante inpresión en 3D, manteniendo intactos los nervios, las arterias y la espina dorsal, separándolos del tejido afectado por el cáncer y fijando la nueva vértebra entre la primera y la tercera mediante unos tornillos de titanio. Los facultativos ha manifestado que con la vértebra impresa tridimensionalmente se consigue una sustancial mejora sobre los métodos que se empleaban hasta ahora, redundando también en un menor tiempo de convalecencia.
En duda la gran ventaja reside en la completa personalización de la prótesis que se implanta, virtualmente idéntica a la original, lo que además también evita la inmovilización habitual en intervenciones de este tipo en que la vértebra prostética necesita de un periodo de adaptación al cuerpo y viceversa.
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