Esta claro que la reforma laboral ha mermado muchos derechos de los trabajadores en España, pero no sabemos como estarán las cosas en China. Lo que sí es cierto es que, independientemente de las condiciones laborales, ofrecer uno de tus propios productos como indemnización por aceptar un despido voluntariamente, resulta bastante inquietante y un nuevo nivel en las negociaciones por desempleo.
El plan de Microsoft en su sede de Beijing es reducir la plantilla de 4.700 trabajadores a sólo 300, y la mejor manera que han encontrado de que no haya protestas, según se ha descubierto, es ofrecer cada día 300 Lumia 630. Si tenemos en cuenta que cada uno cuesta en China alrededor de 130 dólares, no es que sea el “finiquito” soñado, más si además a Microsoft le salen aún más baratos y si con ello encima convierte a sus exempleados en clientes.
No se sabe todavía cuantos de los antiguos trabajadores se han acogido a la oferta y si con ella cesarán las protestas. Lo que sí se sabe es que la compra de Nokia está resultando polémico incluso aún después de producirse, con muchísimo descontento por parte de los antiguos trabajadores de Nokia que en ven en los recortes de plantilla una traición por parte de Microsoft. De hecho, incluso el ministro de finanzas finlandés ha acusado públicamente a Microsoft de no cumplir con lo que habían prometido.
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