Fuente: El Tiempo.
Estas personas tendrán que sumar, a partir de ahora, una prescripción más a su lista de actividades de riesgo: la televisión en tres dimensiones. Al menos así lo recomienda en el sitio web de Samsung, que ya comercializa sus primeros televisores con esta tecnología.
Una de las primeras advertencias de la compañía es que "algunos espectadores pueden experimentar ataques epilépticos tras la exposición a imágenes intermitentes de alguna película o vídeojuego".
Samsung afirma que no es necesario haber padecido con anterioridad estos ataques o tener antecedentes familiares para sufrir uno de estos episodios al estar frente a una pantalla con imágenes tridimensionales.
Visión alterada, sensación de mareo, movimientos involuntarios como espasmos musculares, confusión, náuseas, pérdida de conciencia, convulsiones, calambres o desorientación son algunos de los síntomas que pueden presentar los espectadores.
Según Samsung, en caso de experimentar solo uno de estos síntomas, es recomendable suspender lo que se esté viendo. En caso de que el malestar persista, es necesario acudir al médico de inmediato.
El fabricante asegura que la mejor forma de evitar todos estos riesgos: hacer "frecuentes descansos" y aprovechar para verificar si hay cansancio en la vista o resequedad en los ojos.
También es importante abstenerse de jugar con las gafas diseñadas para los equipos 3D, pues son físicamente dañinas y debilitan la vista, según advierte la empresa.
Samsung recuerda que ver televisión en 3D puede causar desorientación en el espectador. Por eso recomienda no situar el aparato muy cerca de balcones ni escaleras por los que pueda caer, ni cerca de otros objetos con los que pueda tropezar.
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