Para Jeff Schick, Vicepresidente de IBM de Software a nivel global, es lo que podría suceder con el correo electrónico en algún tiempo. Consultado por Infobae.com acerca de la posibilidad de que el e-mail "muera" en un futuro, el ejecutivo respondió que era "posible" aunque "no todavía".
"De hecho hemos notado un descenso significativo en los últimos tiempos del uso del correo electrónico y no sólo en nuestra compañía, sino en varias", puntualizó Schick, uno de los animadores de Lotusphere 2011.
Es que el uso extendido de las redes sociales no sólo en el hogar, sino también en el trabajo podría hacer desaparecer –más temprano que tarde– la utilización del correo electrónico como herramienta principal de comunicación por internet.
"Es posible que las redes sociales terminen matando al e-mail, aunque no todavía", expresó y agregó una anécdota doméstica que despertó curiosidad en él.
Al llegar a su casa después de un largo día laboral Schick le dijo a su hijo que se pusiera con sus tareas escolares. Al ver que no le respondía, subió el tono y le ordenó que utilizara el teléfono, que llamara a sus compañeros y que además les escriba para interiorizarse sobre sus responsabilidades.
A los pocos minutos notó que el preadolescente estaba navegando en Facebook: "¿Qué estás haciendo? ¿No te dije que llamaras a tus compañeros y que les escribieras?". La respuesta lo sorprendió: "Papá, el e-mail es para tu abuelo".
Infobae
"De hecho hemos notado un descenso significativo en los últimos tiempos del uso del correo electrónico y no sólo en nuestra compañía, sino en varias", puntualizó Schick, uno de los animadores de Lotusphere 2011.
Es que el uso extendido de las redes sociales no sólo en el hogar, sino también en el trabajo podría hacer desaparecer –más temprano que tarde– la utilización del correo electrónico como herramienta principal de comunicación por internet.
"Es posible que las redes sociales terminen matando al e-mail, aunque no todavía", expresó y agregó una anécdota doméstica que despertó curiosidad en él.
Al llegar a su casa después de un largo día laboral Schick le dijo a su hijo que se pusiera con sus tareas escolares. Al ver que no le respondía, subió el tono y le ordenó que utilizara el teléfono, que llamara a sus compañeros y que además les escriba para interiorizarse sobre sus responsabilidades.
A los pocos minutos notó que el preadolescente estaba navegando en Facebook: "¿Qué estás haciendo? ¿No te dije que llamaras a tus compañeros y que les escribieras?". La respuesta lo sorprendió: "Papá, el e-mail es para tu abuelo".
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