Libertad Digital
El dispositivo busca recuperar la participación que perdió frente a Apple y Google en el mercado de teléfonos inteligentes, y será una prueba clave de la capacidad de Microsoft para competir en el mercado de electrónicos de consumo. "Probablemente es justo decir que tenemos mucho trabajo por hacer", dijo el presidente ejecutivo Steve Ballmer en la presentación anual de la empresa a analistas en la sede central en el estado de Washington. "No todo va a suceder de la noche a la mañana", añadió.
Empleados de Microsoft mostraron nuevos teléfonos que operan con el sistema Windows Phone 7, y que fueron creados por los fabricantes Samsung y LG, pero no permitieron tomar fotografías porque aún están en etapa de prototipo. Ningún fabricante de dispositivos anunció una fecha para el lanzamiento comercial. Ballmer solo dijo que llegarían al mercado este otoño.
Los dispositivos tienen grandes pantallas, incorporan un reproductor de música Zune, programas de correo electrónico y un enlace con el contenido de Xbox Live, Facebook y otras redes.
Microsoft también está preparando una plataforma alternativa para competir con el iPad de Apple basada en Windows 7 y en procesadores de Intel. Ballmer puso el ejemplo de los netbooks, que originalmente estaban equipados con Linux pero que al final terminaron funcionando con Windows XP, asegurando que algo similar ocurrirá con las tabletas. Los modelos no serán fabricados por la propia Microsoft.
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