La más reciente ampliación a la estación espacial internacional, un gigantesco laboratorio japonés, será ampliada todavía un poco más.
Luego de instalar cámaras de televisión y retirar cubiertas durante una caminata realizada el jueves, los astronautas en el transbordador espacial y la plataforma orbital enfrentarán un nuevo reto: Colocar una bodega en el laboratorio, del tamaño de un autobús.
La obra de ampliación será realizada a una altura de 338 kilómetros (210 millas) la tarde del viernes.
El laboratorio, denominado Kibo, "esperanza" en japonés, es tan grande que tuvo que ser dividido en tres partes, cada una transportada en una misión diferente de los transbordadores, para ser llevado a la estación. Su bodega de cuatro metros (14 pies) de largo fue entregada en marzo, siendo dejada en un lugar temporal.
La parte final del proceso de ensamblado, un portal, será lanzado el próximo año.
Los caminantes espaciales Michael Fossum y Ronald Garan hijo parecían muñecas blancas el jueves, comparándolos con el laboratorio de 11 metros (37 pies) de largo y cuatro metros (14 pies) de ancho, que es ahora la habitación más grande de la estación.
Esta fue su segunda caminata espacial en tres días.
"Siento que estoy en un salida a acampar, tratando de reparar una carpa mojada la mañana del domingo", dijo Fossum al luchar por colocar el aislamiento del laboratorio. El y Garan retiraron parte del recubrimiento del brazo robot del laboratorio, colocándolo en varias articulaciones.
Mientras ellos estaban en el espacio, sus ocho colegas llevaban repisas con equipos hacia el laboratorio, mientras los controladores de vuelo en las inmediaciones de Tokio supervisaban los sistemas de energía.
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