Steve Jobs no ha vuelto al trabajo, pero se ha dejado ver en las oficinas de Apple. Un consultor, que estaba de visita en la sede de Cupertino, se encontró al directivo en el parking de la compañía, hablando por teléfono y con un aspecto bastante saludable.
“Su voz era fuerte y sonaba como él mismo en el escenario”, explica al San Francisco Chronicle el testigo. “Tenía una estupenda sonrisa en el rostro”.
El encuentro con Steve Jobs permite desmentir los rumores más terribles sobre su enfermedad: Apple no ha ofrecido ningún tipo de justificación oficial para la baja del directivo y han sido varias las teorías que apuntan hacia una enfermedad de gravedad.
Silicon News
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