La preocupación por la falta de tabletas y teléfonos avanzados en Intel está ensombreciendo las fuertes ganancias del fabricante de procesadores y reforzando la idea de que la compañía ya no establece la dirección en la industria de la tecnología.
El mayor fabricante de semiconductores del mundo está preparando nuevos procesadores para dispositivos móviles para este año y está impulsando la inversión en investigación y desarrollo, pero continúa lejos de alcanzar a su rival ARM Holdings, cuyos chips se encuentran en la mayoría de las tabletas y "smartphones".
La estrategia de Intel en el mercado de los teléfonos móviles consistió en adaptar procesadores originalmente diseñados para computadoras personales, pero esas versiones consumían bastante más energía que los chips de ARM, haciéndolos menos adecuados para dispositivos móviles que se dejan encendidos durante muchas horas.
Los consumidores utilizan cada vez más aparatos móviles para navegar por Internet, y algunos inversores creen que el tradicional enfoque de Intel en los ordenadores podría comenzar a perder relevancia.
Los problemas de Intel también está poniendo de manifiesto la falta de estrategia de su pequeño rival Advanced Micro Devices (AMD) en el mercado en eclosión de los teléfonos avanzados.
Esta semana, Dirk Meyer, consejero delegado de AMD, dejó la compañía tras la preocupación existente sobre que no había hecho lo suficiente para entrar en ese mercado.
"AMD se encuentra en una posición poco envidiable por tener indiscutiblemente uno de los peores balances en semiconductores", dijo Rick Schafer, analista de Oppenheimer, citado por la agencia Reuters. "Y se encuentra aplastada entre Intel y Nvidia, dos empresas con enormes balances, enormes flujos de capital y recursos para gastar en investigación y desarrollo", agregó.
Se espera que AMD facilite sus resultados trimestrales el jueves.
Los inversores han mencionado la pobre estrategia de Intel en los segmentos tecnológicos en crecimiento como las tabletas y los aparatos móviles como la razón de que esté perdiendo su estatus de preferida entre las acciones tecnológicas.
Analistas económicos se inclinan por "comprar" respecto a Intel, según datos de Thomson Reuters, y muchos dicen que ha sido castigada en exceso por quedarse atrás en el terreno de los móviles.
La firma está cerca de doblar su gasto de capital con la inversión en 2011 alrededor de 9.000 millones de dólares para incrementar la producción de sus microprocesadores de nueva generación, que le otorgarán el liderazgo en la mayor parte del mercado tecnológico.
Intel fue la primera tecnológica grande que ha dado a conocer sus resultados trimestrales, y a pesar de las preocupaciones sobre su estrategia móvil, sus buenas cifras establecen un tono positivo para gran parte del sector.
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