Gracias al acuerdo, ambas empresas tecnológicas podrán utilizar algunos de los productos de la otra en el largo plazo, informó en un comunicado Intel, que detalló que con este pacto acaban todas las batallas legales que mantienen las dos empresas desde 2009.
Ese año el fabricante de microprocesadores demandó a Nvidia por utilizar sus productos, ya que afirmaba que la licencia acordada entre las dos compañías en 2004 no cubría unos microprocesadores lanzados posteriormente por Intel que disponían de un controlador de memoria integrado.
El diseñador de tarjetas gráficas respondió con otra demanda a Intel por incumplir los términos del contrato que ambas empresas habían firmado y que finalmente se ha cerrado con el pacto anunciado este lunes.
"Este acuerdo acaba con las disputas legales entre las dos compañías, preserva la paz sobre nuestras patentes y provee de la protección que permite la libertad en el diseño de productos", dijo en ese comunicado el vicepresidente de Intel, Doug Melamed.
Libertad Digital
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