Buscar

2011/09/28

El país con wifi gratuito en bosques y gasolineras

En España estamos acostumbrados a que Internet sea un servicio caro y generalmente lento. Algo muy distinto ocurre en la República de Estonia; para los apenas 1.287.000 habitantes de este país, navegar por la red es un Derecho fundamental que además se puede disfrutar de forma gratuita en muchos lugares públicos.
En esta exrepública soviética, que el pasado mes de agosto cumplió 20 años como estado independiente y es miembro de la Unión Europea desde 2004, no sólo es posible recorrer su capital, Tallín, de norte a sur y de este a oeste conectados a internet durante todo el trayecto, sino que, tal y como nos cuenta la bitácora de viajes «El rincón de Sele», es posible encontrar redes wifi gratuitas en casi todas sus gasolineras e incluso en sus bosques.
El ejemplo más representativo de esta inusual conectividad es el Parque Nacional de Soomaa, un bosque de 390 kilómetros cuadrados de extensión y con un ecosistema en el que abundan los ríos y humedales junto a osos, lobos o cisnes. Entre tanta naturaleza, apenas hay unas pocas construcciones humanas, pero el visitante puede recorrer sus rincones y conectarse a Internet a través de un wifi tan libre como el aire que respira.
La abundancia de zonas wifi en Estonia, señalizadas con carteles color naranja y negro y la inscripción «wifi –ee», se debe a que su legislación considera el acceso a Internet como uno de los Derechos fundamentales de sus ciudadanos. Muchos bares, hoteles, gasolineras, parques, plazas o centros comerciales permiten navegar de forma rápida y gratuita, sin necesidad de consumir en ellos. Incluso las señales de tráfico en las carreteras también indican la presencia de puntos de acceso.
Este evidente privilegio del que gozan los estonios -el 75,1% de los mismos se conectaron habitualmente a Internet el pasado año, frente al 57 por ciento que lo hacía en 2007 o al 28,2 por ciento del año 2000, según la Unión Internacional de Telecomunicaciones- ha permitido que el país comience a ser conocido como «E-stonia» o «Estonia 2.0» y se convierta en un ejemplo a seguir para muchos de sus socios europeos.

No hay comentarios: