Las web oficiales Cubasí y Cubadebate publican hoy un artículo en el que se afirma que el premio Nobel se volvió "disidente" tras galardonar al opositor chino Liu Xiaobo y al escritor peruano Mario Vargas LLosa.
"Con tales elegidos, el poco prestigio que le quedaba al Nobel se diluye cada vez más en el desconcierto", afirma el texto del periodista Manuel Henríquez Lagarde, director del portal digital Cubasí. "Ojalá solo se trate de uno de esos bandazos ideológicos que el otrora prestigioso galardón ha dado a lo largo de su historia y no una nueva regla", añade.
Nobel de la Paz
Según la nota, el currículum de Liu Xiaobo, merecedor del Nobel de la Paz, "no se diferencia para nada del tipo de 'disidente' que EE.UU. lleva décadas diseñando para usar, con mayor o menor éxito, como quintas columnas en aquellos países que no resultan de su agrado por el simple hecho de disentir de su hegemonía".
Además, señala que el chino prevaleció dentro de una lista de más de 200 candidatos entre los que se encontraban las Abuelas de Plaza de Mayo de Argentina y el presidente de Bolivia, Evo Morales.
Nobel de Literatura
Sobre el Nobel de Literatura otorgado a Mario Vargas LLosa, afirma que el autor debió recibir el galardón hace años, cuando aún era "mucho más escritor que político". "Su imparcialidad con lo más reaccionario de la derecha internacional es tan incuestionable como sus silencios sobre la injusta guerra desencadenada por EE.UU. contra Irak o las torturas en el Campo de Concentración de Guantánamo", considera.
Tras calificar a Vargas LLosa de "'disidente' vocero del imperio" y "apostata de la izquierda", la nota recuerda las declaraciones realizadas por el autor a la prensa tras recibir la noticia del galardón, en las que criticó a Cuba y Venezuela. "Los ambivalentes enfoques de los titulares sin dudas dan qué pensar. ¿Será este un premio para reconocer al autor de La Casa Verde o un Nobel para atacar a Cuba y Venezuela? ", apunta el artículo.
La primera crítica oficial en la isla tras el Nobel a Vargas Llosa se publicó ayer viernes, cuando el diario Granma criticó en una escueta nota sus posiciones políticas y morales, y le llamó "antinobel de la ética".
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