El registro regional de Internet (RIPE) pretende colocar a lo largo del mundo más de 300.000 sensores para predecir los posibles atascos en la Red basándose en la velocidad de Internet de diferentes países, logrando de esta forma ofrecer información a los ingenieros para mejorar la red y evitar los posibles atascos o cuellos de botella.
RIPE quiere ampliar su pequeña red de sensores introduciendo USB por diferentes servidores de Europa (50.000) y otros por el resto del mundo (250.000) para que envíen solicitudes de “ping” con regularidad y poder medir el estado de dichas conexiones.
El RIPE NCC es una organización independiente, sin fines de lucro y que apoya la infraestructura de Internet a través de la coordinación técnica del servicio entre varios países y que a través de estos sensores mencionados anteriormente, pretende mejorar el servicio.
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