Intel ha anunciado la llegada al mercado de sus nuevos chips configurables, fruto de la combinación entre procesadores Atom de baja potencia y la tecnología de Altera, que permite obtener chips programables.
La idea de Intel es que estos chips de la serie E600C permitan a los usuarios programarlos para satisfacer sus distintas necesidades. Se prevé que saldrán al mercado para comienzos de 2011.
Los nuevos chips configurables serán posibles gracias a la unión de la versión de baja potencia de los chips Atom de Intel y la tecnología que permite crear circuitos integrados programables de Altera.
Puesto que estos chips programables pueden ser fabricados en grandes cantidades y destinados a muy diversos usos, se espera que sean más baratos que los que están diseñados con requisitos más restringidos.
Con este movimiento, Intel trata de abrirse camino en un nuevo sector, ya que a pesar de seguir siendo el mayor fabricante de procesadores del mundo, está perdiendo presencia a marchas forzadas ante el dominio de ARM en el sector smartphone.
the INQUIRER
No hay comentarios:
Publicar un comentario