El proveedor de Internet Free cedió ante el Gobierno francés y accederá a trasladar a sus abonados los avisos que les envíe el organismo encargado de evitar las descargas 'ilegales'.
Según explicó en una entrevista concedida al diario Les Echos el presidente de la compañía, Xavier Niel, Free empezará a enviar los correos a sus clientes, aunque en la empresa sigan estimando que se trata de una práctica ilegal que viola los derechos de confidencialidad de los internautas.
El ministro de Cultura, Fredéric Mitterrand, llegó a tratar la negativa de Free de "inaceptable" y amenazó con promulgar un decreto para hacer cumplir la denominada ley Hadopi, por el nombre del organismo encargado de controlar la 'piratería'.
No obstante, para el presidente de Free, se trata de "una mala ley que no resuelve nada" y que no tiene en cuenta "la evolución de forma que toma el 'pirateo'".
La ley Hadopi otorga a los magistrados la potestad de suspender el acceso a Internet a las personas titulares de un línea desde la que se efectúen descargas supuestamente ilegales repetidamente.
El organismo Hadopi se encargará de vigilar las conexiones desde las que se produzcan estas descargas.
Los clientes de las líneas, cuyas direcciones las habrá facilitado el proveedor, recibirán tres avisos, primero uno por correo electrónico, un segundo correo certificado y, en caso de reiteración, sufrirán la desconexión de la línea.
Según explicó en una entrevista concedida al diario Les Echos el presidente de la compañía, Xavier Niel, Free empezará a enviar los correos a sus clientes, aunque en la empresa sigan estimando que se trata de una práctica ilegal que viola los derechos de confidencialidad de los internautas.
El ministro de Cultura, Fredéric Mitterrand, llegó a tratar la negativa de Free de "inaceptable" y amenazó con promulgar un decreto para hacer cumplir la denominada ley Hadopi, por el nombre del organismo encargado de controlar la 'piratería'.
No obstante, para el presidente de Free, se trata de "una mala ley que no resuelve nada" y que no tiene en cuenta "la evolución de forma que toma el 'pirateo'".
La ley Hadopi otorga a los magistrados la potestad de suspender el acceso a Internet a las personas titulares de un línea desde la que se efectúen descargas supuestamente ilegales repetidamente.
El organismo Hadopi se encargará de vigilar las conexiones desde las que se produzcan estas descargas.
Los clientes de las líneas, cuyas direcciones las habrá facilitado el proveedor, recibirán tres avisos, primero uno por correo electrónico, un segundo correo certificado y, en caso de reiteración, sufrirán la desconexión de la línea.
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