En el Reino Unido se está poniendo en marcha una campaña para saber cuánto contamina cada teléfono móvil, ya que más del 11% de los compradores lo tendría muy en cuenta a la hora de decidir cuál comprar. De este modo, se quiere demostrar que la última tecnología también puede ser sostenible.
En el estudio O2 Eco Rating han participado prácticamente todos los grandes fabricantes, a excepción de RIM, que prometió incorporarse en 2011 y Apple. Desde Cupertino se han negado a dar una explicación acerca de esta ausencia. Aún así, queda cubierto el 93% del mercado británico, o lo que es lo mismo, los terminales más destacados del mercado mundial.
El iPhone y el resto de productos Apple han estado en el punto de mira de los ecologistas, tanto por la selección de materiales como por los procesos de producción. En los últimos años, la compañía ha virado hacia posiciones más conciliadoras y ha aceptado algunas demandas como dejar de utilizar PVC. Sin embargo, siguen manteniendo un control individual que no permite comparar de forma objetiva su contaminación. Ante cualquier duda, dirigen a sus propios estudios, recogidos en su web.
Así, con este estudio se quiere medir la huella ecológica de cada teléfono, o lo que es lo mismo, cómo va afectando al medio ambiente a medida que se va desarrollando su vida: los materiales incluidos, el proceso de fabricación, el empaquetado, el tiempo de uso, su consumo energético y la posibilidad de reuso o reciclaje. Las compañías han tenido que responder 63 preguntas que después han sido valoradas para construir este ranking que puntúa del cero al cinco en orden ascendente.
La segunda posición del ranking está ocupada por siete dispositivos: Nokia 1800, Nokia 6700, Nokia C7, Samsung GT-S8500, Sony Ericsson Xperia X10 mini, Sony Ericsson Xperia X10 mini pro y Sony Ericsson Zylo. A excepción del Samsung, el resto son todos teléfonos producidos por compañías nórdicas, lo que demuestra el grado de concienciación social de sus empresas.
En última instancia, el usuario también es responsable del consumo y del ahorro energético. El análisis afronta la vida del terminal como punto de valoración. Sin embargo, cabría preguntarse cómo lograr un equilibrio para que no sea necesario el cambio de teléfono y otros aparatos en plazos de tiempo tan cortos, uno de los verdaderos compromisos ecológicos de esta sociedad aún por cumplir.
En el estudio O2 Eco Rating han participado prácticamente todos los grandes fabricantes, a excepción de RIM, que prometió incorporarse en 2011 y Apple. Desde Cupertino se han negado a dar una explicación acerca de esta ausencia. Aún así, queda cubierto el 93% del mercado británico, o lo que es lo mismo, los terminales más destacados del mercado mundial.
El iPhone y el resto de productos Apple han estado en el punto de mira de los ecologistas, tanto por la selección de materiales como por los procesos de producción. En los últimos años, la compañía ha virado hacia posiciones más conciliadoras y ha aceptado algunas demandas como dejar de utilizar PVC. Sin embargo, siguen manteniendo un control individual que no permite comparar de forma objetiva su contaminación. Ante cualquier duda, dirigen a sus propios estudios, recogidos en su web.
Cuánto contamina tu móvil
El proyecto O2 Eco Rating está a cargo de Forum of the Future en colaboración con la teleoperadora O2, propiedad de Telefónica. Este ranking es sólo una parte del proyecto que pretende conciliar desarrollo tecnológico con la sostenibilidad. Este concepto no implica sólo respeto medioambiental, sino también comercio justo, políticas empresariales, biodiversidad y otros conceptos socioeconómicos.Así, con este estudio se quiere medir la huella ecológica de cada teléfono, o lo que es lo mismo, cómo va afectando al medio ambiente a medida que se va desarrollando su vida: los materiales incluidos, el proceso de fabricación, el empaquetado, el tiempo de uso, su consumo energético y la posibilidad de reuso o reciclaje. Las compañías han tenido que responder 63 preguntas que después han sido valoradas para construir este ranking que puntúa del cero al cinco en orden ascendente.
Elm, el teléfono más ecológico
El modelo Elm de Sony Ericsson ha resultado ganador de la prueba con una nota de 4,3. Desde Forum of the Future explican que esta nota se debe al bajo coste energético de su producción logrado porque el Elm no incluye 'hardware' como cámara o MP3.La segunda posición del ranking está ocupada por siete dispositivos: Nokia 1800, Nokia 6700, Nokia C7, Samsung GT-S8500, Sony Ericsson Xperia X10 mini, Sony Ericsson Xperia X10 mini pro y Sony Ericsson Zylo. A excepción del Samsung, el resto son todos teléfonos producidos por compañías nórdicas, lo que demuestra el grado de concienciación social de sus empresas.
En última instancia, el usuario también es responsable del consumo y del ahorro energético. El análisis afronta la vida del terminal como punto de valoración. Sin embargo, cabría preguntarse cómo lograr un equilibrio para que no sea necesario el cambio de teléfono y otros aparatos en plazos de tiempo tan cortos, uno de los verdaderos compromisos ecológicos de esta sociedad aún por cumplir.
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