20minutos
Hace años que son conocidas las webs que ofrecen un curioso servicio: alquilar un amigo. Algunas, como el caso algunas empresas japonesas, ofrecen incluso la posibilidad de alquilar familiares, por ejemplo, para una boda.
En España ya es posible alquilar amigos a través de webs como Rent a Friend (literalmente, 'alquila un amigo'). Dependiendo del 'amigo', éste costará entre 10 y 50 euros por hora (más los gastos originados en el encuentro). Asociarse a la web es gratis, pero si el usuario quiere alquilar un amigo el coste ronda los 20 euros mensuales (60 si se quiere entrar a formar parte del club de amigos). El servicio funciona desde hace unos días para 47 ciudades españolas.
Scott Rosenbaum es el creador de esta web. La idea surgió, según cuentan en la BBC, a partir de las ya mencionadas web asiáticas que ofrecían amigos y familiares de alquiler. Rosenbaum le dio a Rent a Friend un aspecto de red social y, según él, el servicio, que dio sus primeros pasos en EE UU y Canadá, cuenta con alrededor de 285.000 de usuarios que alquilan amigos y 2.600 abonados.
Voces a favor y en contra
Mientras que el creador de Rent a Friend defiende que, con esto, se trata de ayudar a personas y que si las webs de citas funcionan esto también puede hacerlo, hay otros que piensan que servicios como éste explotan las inseguridades de personas que llegan hasta el punto de pagar por amistades.
¿Se puede considerar algo así como una amistad? Keith Camp, profesor de Psicología de la Universidad estadounidense de Georgia, cuenta, también en la BBC, que el concepto de amistad ha cambiado con las nuevas tecnologías. "Basta mirar a Facebook donde se suelen tener cientos o miles de amigos, que no lo son realmente de acuerdo con las definiciones del pasado", argumenta.
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