La economía de rápido desarrollo de Vietnam es muy dependiente de las TIC y de la explosión de la web.
El parque industrial tecnológico implantado en el país por la mano de obra barata ha transformado sus ciudades y sus barrios.
Pero el gobierno autoritario cada vez aplica más regulación para censurar la libertad de expresión a través de Internet y mantener su control desde el poder.
El país ocupa el séptimo lugar final en la lista de libertad en la Red en el informe de 2013 elaborado por Freedom House. Además, Vietnam ocupa el puesto 172 de 179 en el ranking 2013 de Reporteros sin Fronteras ‘World Press Freedom’, un lugar por encima de China -donde la censura opera a gran escala-.
En este escenario, Vietnam ha introducido nuevas sanciones financieras severas para socavar las libertades en la web, incluyendo multas de hasta 5.000 dólares para cualquier persona que utilice los medios de comunicación social para difundir propaganda contra el Estado, como recoge The Register.
El nuevo Decreto 174 acaba de aprobarse como una extensión del Decreto 72, que entró en vigor en septiembre y limita el uso de los blogs y las redes sociales para “facilitar o intercambiar información personal”, prohibiendo el contenido antigubernamental.
El comercio electrónico no escapa tampoco a la criba, con la emisión del Decreto 185 que establece multas a las empresas que operan sin licencia, pevio control estatal, o aquellas que no reportan los cambios exigidos en sus sitios.
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