Sharp es uno de los fabricantes que más está investigando con pequeñas pantallas 3D que no necesitan gafas. Su teléfono móvil Lynx 3D se comercializará en Japón a través de la operadora NTT Docomo y, pese a sus limitaciones, algunos expertos han visto ya en estos dispositivos una buena forma de llegar a unos usuarios que hasta ahora han rechazado las gafas como condición para acceder a los contenidos 3D.
Sharp ya intentó en la década pasada adentrarse en el mercado del 3D sin gafas, aunque no obtuvo el éxito que buscaba. Ahora, con la esperanza de que hay un mayor número de contenidos y que estas pantallas han mejorado tanto en brillo como en contraste, se tiene la esperanza de convencer a los consumidores.
"En la era 2D, los contenidos y la infraestructura pasaron del cine a los hogares y de estos a los dispositivos móviles. Nosotros creemos que va a ocurrir lo mismo con el 3D. Las imágenes 3D que ya están disponibles en las grandes pantallas van a llegar a los terminales móviles", destacaron los ejecutivos de Sharp a mediados del pasado año, cuando mostraron por primera vez estas pantallas. La compañía LG también ha mostrado en CES un pequeño televisor 3D portátil de 7 pulgadas que tampoco necesita gafas.
Límites a la tecnología
Pese a la eliminación de las gafas, esta tecnología aún tiene que enfrentarse a retos importantes. Para ver adecuadamente el televisor de 20 pulgadas mostrado por Toshiba, es necesario colocarse a 90 centímetros, una distancia que se reduce a 65 centímetros en el caso del modelo de 12 pulgadas. Lynx 3D tiene una pantalla táctil de 3,8 pulgadas y, para que el efecto sea el adecuado, hay que situarse a unos 30 centímetros de la pantalla y mirarla de frente, ya que si el ángulo no es el adecuado se perderá el efecto tridimensional. Esas limitaciones son uno de los motivos por los que fabricantes como Sony, Samsung o Panasonic continúan apostando por las gafas para generar el relieve en pantalla.La primera apuesta en España por la tecnología 3D sin accesorios vendrá de la mano de Nintendo y Sharp a través de la consola portátil Nintendo 3DS, que está previsto que llegue al mercado europeo en marzo. "Fue Nintendo la compañía que lanzó la tecnología táctil en la DS o el control de movimiento en la Wii. Todos fueron pasos que crearon muchas dudas (y mofa en más de una ocasión), pero al final todos ellos se han vuelto parte fundamental en lo que hoy entendemos como videojuego", añaden en Nintendo para explicar la confianza en su nueva plataforma.
La compañía ya intentó en 1995 acercarse a la emulación 3D a través de la consola Virtual Boy, aunque en esa ocasión no tuvo el éxito esperado.
En esta ocasión, al igual que Lynx 3D, la pantalla de 3,5 pulgadas de la 3DS puede alternar entre contenidos 2D y 3D y eliminar por completo este último efecto, reservando así un espacio para los usuarios menores de 6 años, a los que Nintendo desaconseja el uso de esta tecnología. "La tecnología solo es un medio. Lo importante es lo que haces con ella", replican en Nintendo. Y por ello, además de los títulos que los creadores de videojuegos están desarrollando para la máquina, la compañía también insiste en que puede ser utilizado como un reproductor portátil de todo tipo de contenidos.
Publico
No hay comentarios:
Publicar un comentario