En el mercado tecnológico se espera con curiosidad e incertidumbre el
lanzamiento de el teléfono propio en el que lleva trabajando Facebook
desde hace tiempo. La red social no pasa por un buen momento (pérdidas
económicas relacionadas con su salida a bolsa y menor número de
usuarios), y este dispositivo puede ser un punto de apoyo para retomar
el rumbo. No obstante, este año no lo veremos.
La compañía con sede en Silicon Valley desarrolla con HTC en un modelo smartphone
con el que pretende tener presencia en este sector. El fabricante chino
prepara el hardware mientras que el sistema operativo, según diversas
fuentes especializadas, sería una versión adaptada de Android.
Ha sido HTC quien ha pisado el freno. Con muchos
proyectos en cartera, se dio cuenta de que cumplir los plazos con el
resultado de un producto bueno (y no chapucero) se había convertido en
una tarea imposible. Éste fue el motivo por el que acordó con Facebook
retrasar su salida hasta mediados del próximo año, según Bloomberg.
Zuckerberg, tal vez para quitar presión sobre su empresa y que esta
decisión no sea tomada con un nuevo paso atrás por los mercados, ha
salido al paso afirmando que el lanzamiento de un teléfono propio “no tendría mucho sentido”, según recoge Mashable.
Pese a esta declaración, dentro de la compañía son conscientes de que
este sector es su punto débil y es donde tienen que redoblar el
esfuerzo.
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