No han tenido el mismo impacto que en otros países europeos, pero el Partido Pirata ya han entrado en la administración española. En concreto, a través de un concejal fijo y otro rotativo en dos localidades de la provincia de Barcelona. El partido pirata catalán ha multiplicado sus votos por toda la comunidad.
El partido Pirates de Catalunya tendrá representación en los ayuntamientos de Fruitós de Bages (20.500 habitantes) y de Santa Coloma de Gramanet (120.000 habitantes). En ambos casos, los piratas han conseguido la reprentación parlamentaria formando parte de coaliciones de izquierda que en principio no gobernarán en ninguno de los dos consistorios.
La primera en tener su acta de concejal será Manoli Martín, de Fruitón de Bages, donde Imagina’t Sant Fruitós AM se ha hecho con el 11,66% de los votos. En su programa electoral destaca la lucha por conseguir que la cultura sea un bien de libre acceso, pero no es un partido de motivación única. Al igual que los últimos movimientos políticos espontáneos como Democracia Real Ya y su Spanishrevolution, entre su ideario está lograr la participación ciudadana real en la vida política.
Bastantes piratas pero menos que en Europa
En Santa Coloma, la coalición que integra la estructura catalana del Partido Pirata no tiene un asiento fijo. Gent de Gramenet solo ha obtenido dos actas y sus asientos serán rotativos entre todos los números de la lista; por eso hasta dentro de tres años no habrá un segundo concejal pirata.
Pirates de Catalunya también ha logrado duplicar su participación en las grandes ciudades catalanas como Barcelona (6.659 votos), L’Hospitalet, Lleida y Mataró.
Unos resultados muy alejados de los que obtuvieron los partidos piratas de países como Suecia, origen de la propuesta, o Alemania, donde tienen incluso representación europarlamentaria en el primer caso y medio centenar de concejales en el segundo.
El debate parlamentario y la aprobación de la ley de regulación de los derechos de autor en Internet en España, llamada Ley Sinde, protagonizó durante semanas el debate político nacional, pero finalmente su repercusión ha quedado limitada a Cataluña. Se trata, como señalamos desde TICbeat el pasado 17 de mayo, una de las tres batallas que se libran en Internet.
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