La mayor central de energía solar construida en la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China, entró en operación el día 6 miércoles.
El proyecto de la planta de 30 megavatios se ubica en la prefectura de Xigaze, a unos tres kilómetros de la ciudad del mismo nombre, la segunda más grande de la región.
La planta será construida en tres fases. La primera fase incluye la construcción de instalaciones eléctricas con un costo de 249 millones de yuanes (38,5 millones de dólares). Dichas instalaciones fueron integradas hoy a la red local de electricidad, y generarán hasta 20,23 millones de kilovatios/hora de electricidad anualmente, según el gerente del proyecto, Gao Yuankun.
El funcionario dijo que esta primera fase del proyecto aliviara la escasez de electricidad en la prefectura al ofrecer el servicio a más de 100.000 familias.
El proyecto también permitirá el ahorro de 9.000 toneladas métricas de carbón y reducirá la emisión de dióxido carbono en 17.800 toneladas métricas por año, de acuerdo con Gao.
Con una inversión de 800 millones de yuanes, el proyecto es financiado en su totalidad por Linuo Power Group, uno de los principales proveedores de sistemas de generación de energía solar fotovoltaica, con sede en la provincia oriental de Shandong.
El Tíbet cuenta con abundantes recursos de energía solar, recibiendo un promedio de 3.300 horas de luz cada año.
La región ha acelerado su exploración de recursos de energía limpia durante los últimos 60 años, a fin de proteger el medio ambiente y simultáneamente fortalecer el crecimiento económico y el desarrollo social.
Pueblo en Linea
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