Sony tiene el mismo sueño que sus competidores coreanos, LG y Samsung. El mismo que sus vecinos de Panasonic, solo que está mejor armada. Todos estos fabricantes quieren conquistar cuatro pantallas: móviles, tabletas, televisores y ordenadores.
El gigante japonés, además, cuenta con un importante estudio de cine, algunos de los mejores desarrolladores de videojuegos y, algo que sus directivos subrayan cada vez que tienen oportunidad, el 60% del catálogo musical del siglo XX y lo que va del XXI. A este arsenal hay que sumar los videojuegos. PlayStation, tanto en versión para el hogar, PS3, como portátil, la recién estrenada Vita, sirven para jugar de una manera más profunda que el resto de competidores.
Kazuo Hirai reciente consejero delegado forjado en PlayStation. asume el reto de hacer de Sony una compañía integral, en la que se consuman los contenidos en todos los formatos y en el mayor número posible de aparatos. Sony Entertainment Network es su ecosistema (palabra de moda en todos los fabricantes), el equivalente a iTunes de Apple, para acceder a la descarga y disfrute de películas, música y videojuegos. La firma deja de estar organizada en un amplio número de divisiones para trabajar como una sola, de manera más horizontal. Albert Vives, responsable de formación de la marca en España, subrayó cómo, poco a poco, quieren convertir la consola doméstica en un centro multimedia. “Su potencia le convierte en el aparato ideal para descargar fotos y vídeos y compartirlo sin demora”, insiste.
En el catálogo de 2012 no se han olvidado de algunos de sus productos más afamados. Entre las videocámaras llama la atención la estabilización de imagen, el proyector integrado en algunos de los modelos (para compartir un viaje, por ejemplo), o la inclusión del cable USB en el asa de sujeción. Una solución bastante ingeniosa para evitar que se pierda. Sirve tanto para cargar la batería como para descargar el contenido.
Rafael Vieyra, director general de Sony España, se muestra especialmente orgulloso de la cámara alpha 57, sucesora de la 55. Es el buque insignia, con ráfagas de hasta 12 fotos por segundo, de esta gama. Vuelve el Walkman, su gran invención, pero con Android. El modelo Z1000 más que un aparato para escuchar música es el equivalente de Sony al iPod Touch. Algo así como un móvil de última generación, con wifi, almacenamiento de 16 gigas, pantalla de 4,3 pulgadas y acceso a aplicaciones, pero sin teléfono.
Las televisiones comienzan a tener descripciones similares a las de móviles y tabletas. El procesador es ahora uno de los grandes motivos para marcar distancias entre sus modelos Bravia y el resto de competidores. La televisión también está conectada a la Red. Para los que todavía no se decidan a dar el paso, la marca ofrece una interesante opción intermedia: Google TV box, una cajita, menor que un lector de Blu Ray, pero algo mayor que el Apple TV. Sirve para navegar a través de Android, con el navegador Chrome y todas las aplicaciones que ya usan tabletas y teléfonos. Sería un modelo más del mercado si no fuera por el ingenioso mando que le acompaña, con doble cara. Por un lado es un panel táctil, para utilizarlo como puntero y ratón, y un teclado retroiluminado, para contestar correos o actualizar el estado en redes sociales sin necesidad de una aparato adicional.
A finales de 2011 Sony adquirió la compañía de móviles que compartió con Ericsson. Durante el reciente congreso mundial de móviles de Barcelona enseñó su gama Xperia, pero se guardó un modelo adicional, desvelado este martes, quizá el más sorprendente de toda la horna, el modelo Sola. Mantiene la estética pero añade una tecnología, bautizada Floating Touch, que mejora la navegación web.
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