“Habla, escucha, cúrate”. Tres verbos, dos ventanas desde las que comunicar con todo el mundo. Una idea. Healcam es el resultado de un impulso. Una iniciativa diseñada, desarrollada y financiada por los fundadores del blog de tecnología médica Medgadget, que todavía no tiene patrocinadores ni mucho presupuesto para publicidad, pero que pretende conseguir suficiente masa crítica de usuarios como para sobrevivir. Y no sólo entre los jóvenes ni los 'early adopters', según dicen.
“Empezamos el proyecto después de descubrir Chatroulette, porque pensamos que era una gran idea que necesitaba un objetivo algo más concreto”, cuenta a LaVanguardia.es Gene Ostrovsky, editor de Medgadget. “La idea es que la gente que tiene un problema médico pueda hablar del tema con otras personas que están pasando por la misma situación”, añade.
El sitio funciona igual que la web de videochat aleatorio que desembarcó en el panorama internáutico en noviembre del 2009. No hace falta registrarse. Basta con entrar en Healcam.com, enchufar el micrófono y la webcam y escoger una afección de entre las disponibles (unas 15, a la hora de escribir el artículo). El sistema conecta entonces al usuario con otra persona con la misma dolencia. Y, como en Chatroulette, si la conversación no arranca o se estanca, siempre se puede hacer clic en el botón Next para cambiar de interlocutor.
Chatroulette consiguió un considerable eco mediático durante unos pocos meses, pero pronto se convirtió en un refugio friki del que sacar, cuando menos, imágenes curiosas. Pero Ostrovsky no cree que Healcam vaya a tener que hacer frente a una situación similar.
“Esperamos que Healcam sea un sitio en el que la gente tenga la oportunidad de ser escuchada, de compartir experiencias e incluso de hacer amigos en un entorno constructivo”, afirma. “Pero es cierto que los usuarios son impredecibles, así que ya veremos”, concluye.
La Vanguardia
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