Fuente: MeriStation.
Prince of Persia: Las arenas del tiempo era desde el momento de su anuncio uno de los proyectos cinematográficos basados en videojuegos más ambiciosos de los últimos años: el productor de Piratas del Caribe, Jerry Bruckheimer, había unido fuerzas con Walt Disney para crear una nueva franquicia millonaria que llenase los cines este verano. Parece que tan altas expectativas y un elevado presupuesto (200 millones de dólares, según Box Office Mojo) no han sido del todo alcanzadas aunque su actuación tampoco haya sido completamente nefasta.
La película dirigida por Mike Newell y basada en la franquicia clásica de Ubisoft, concretamente en su renacimiento de 2003, acumula a fecha de hoy 133 millones de dólares a nivel mundial tras su estreno hace dos semanas. En territorio americano se estrenó el pasado viernes y ha recaudado 37,8 millones de dólares, una cifra que se queda muy lejos de lo esperado por una produccion de esta envergadura, en segundo lugar del Top10 tras Shrek 4. En el resto del mundo, donde el film lleva en cartelera desde hace dos semanas, acumula 95,5 millones.
Comparando con la franquicia estrella de Bruckheimer-Disney, que era el espejo en el que tenía que mirarse Prince of Persia, la primera película de la (por ahora) trilogía hizo 46 millones de dólares el primer fin de semana. La segunda superó los 137 millones en el mismo tiempo y la tercera alcanzó los 114. A pesar del "pinchazo", Prince of Persia: Las arenas del tiempo se ha colocado como la tercera película basada en un videojuego con mayor apertura inicial, por detrás de Pokémon: La película y el primer largometraje de Tomb Raider. En el mundo del cine se requiere que un largometraje duplique su presupuesto para comenzar a ser rentable, lo que significaría que en el resto de su vida en cartelera el citado film debería alcanzar al menos los 400 millones de dólares, una cifra que se antoja complicada cuando la respuesta de la crítica ha sido tibia y los usuarios (tanto angloparlantes como hispanoparlantes) no parecen muy entusiasmados.
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