Cuando apenas faltan unas horas para que Apple anuncie la tercera versión de su iPad, los analistas se preguntan en todo el mundo si el nuevo "juguete" de la marca de la manzana acelerará el anunciado fin de la era de los PC. Hace apenas unos días, el propio Tim Cook, máximo ejecutivo de Apple, aseguraba que está próximo el día en que los tablets superen en ventas a los ordenadores tradicionales.
Una predicción que se basa en datos muy reales. No en vano, y a pesar de su "juventud" en el mercado, los iPad ya suponen cerca del 20% de los beneficios totales de Apple, con más de 15 millones de unidades vendidas. La cuestión, pues, no es saber "si" los tablet van a sustituir o no a los PC, sino "cuándo" lo harán.
El 27 de enero de 2010, cuando Apple anunció la primera versión del dispositivo, inauguró toda una nueva categoría dentro de la informática personal. El concepto de tablet ya existía desde hace años, es cierto, pero no había conseguido pasar de ser un producto de nicho, muy lejos de las grandes cifras de ventas y del favor del gran público. Algo que, sin embargo, sí que consiguió de inmediato el primer iPad.
A caballo de su pantalla multitáctil de 9,7 pulgadas, su diseño innovador y la facilidad de uso de su sistema operativo, el último invento de Steve Jobs se convirtió, de la noche a la mañana, en un objeto deseado por millones de personas.
El gran impacto
El impacto fue tal que el resto de la industria empezó de inmediato a idear sus propias tabletas. Un año entero hubo que esperar para que decenas de "iPad" de todas las marcas inundaran, literalmente, el mercado. La mayor parte de los fabricantes, además, eligieron para el combate basar sus productos en Android, el sistema operativo de Google y principal rival, en la actualidad, de Apple en el terreno del internet móvil.
Pero Apple supo aprovechar bien su ventaja y aguantó limpiamente la embestida. Con sus sucesivas mejoras tanto en el iPad como en el iPhone, la firma de Cupertino ha ido dotando a sus dispositivos móviles de mejores pantallas, procesadores más potentes y conexiones a la red más cada vez más rápidas. Las mejoras, en todos los casos, han sido bien recibidas por los consumidores de todo el planeta y han permitido a Apple, hasta ahora, mantener una holgada ventaja sobre sus competidores.
Durante el otoño pasado, otro gigante tecnológico dio un gran paso hacia la implantación definitiva de los tablets entre los consumidores. Fue Amazon, con el lanzamiento de su Kindle Fire, un tablet mucho más barato que los demás (199 dólares). Y aunque aún no se han revelado sus cifras, se estima que desde entonces se han vendido cerca de cuatro millones de unidades de ese producto.
Por no hablar de la última "revolución" de Microsoft, cuyo nuevo sistema operativo, Windows 8 (presentado la semana pasada en el MWC de Barcelona), está especialmente pensado para ser utilizado con dispositivos móviles y dará, según todos los análisis, un nuevo impulso a la venta de tablets y smartphones en todo el mundo.
Las especulaciones
Durante el pasado año, la venta de tabletas de todas las marcas (más de un 80% de las cuales fueron de Apple) supuso el 15% de la venta de ordenadores. O, dicho de otro modo, en 2011 se vendió un tablet por cada seis ordenadores. No está mal, si tenemos en cuenta que la proporción durante 2010 fue de 20 a uno a favor de los PC...
Así las cosas, y cuando el resto de los fabricantes ya han conseguido poner en el mercado dispositivos comparables (e incluso técnicamente superiores) al iPad 2, Apple se dispone a marcar de nuevo las distancias con su nuevo, y aún no anunciado, iPad3. Se especula con la incorporación de una pantalla retina (la misma que lleva el iphone 4S), con una resolución de 2048×1536 píxeles. Y con la incorporación de un procesador más potente que el actual (ya existen tablets con procesadores de cuatro núcleos), además, claro, de una nueva cámara (el punto más débil de la versión actual) de por lo menos 8 megapíxeles.
Si el iPad 3 consigue sus objetivos, la previsión de Tim Cook podría hacerse realidad alrededor del año 2017. Incluso antes, según algunos analistas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario