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2012/02/03

Luanda, donde los precios están por las nubes

Cuando usted piensa en las ciudades más caras del mundo, la polvorienta capital de Angola, Luanda, parece un candidato poco probable.
Baches en las calles, caótica y aún marcada por décadas de guerra civil, la ciudad tiene muy poco de la elegancia y el glamour de Tokio, Nueva York o Moscú, y aproximadamente la mitad de los angoleños vive con menos de 2 dólares al día.

Pero a pesar de la pobreza evidente y los barrios marginales en expansión, Luanda todavía es capaz de ofrecer precios exorbitantes.
La renta de una casa puede costar US$10.000 al mes, un almuerzo básico para dos fácilmente llega a los US$50, una habitación de hotel puede costar US$400 por noche y un kilo de tomates importados US$16.
El alquiler de un auto (sin incluir el complicado tráfico de la ciudad y la falta de aparcamientos) puede ser de US$90 al día, y si quiere una camioneta (recomendada por lo malo de las vías) asciende a los US$200.

Gastos

Precios como estos han hecho que Luanda sea uno de los lugares donde los costos de repatriación son de los más altos según una encuesta de organismos como Mercer.
Cuando Wina Miranda se trasladó con su esposo desde Indonesia a Luanda en 2008, sabía que la ciudad iba a ser cara, pero no estaba preparada para lo que iba a ver.

"El alto costo de la vida fue todo lo que encontré cuando busqué en Google cosas sobre Angola", indicó Miranda, de 34 años de edad.
"No había mucho más, ni imágenes ni otro tipo de información, sólo historias diciendo lo caro que era. No sabía muy bien lo costosa que era hasta que realmente vinimos aquí y lo vivimos en carne propia".
Su esposo Erwin, también de 34 años, trabaja para una compañía petrolera internacional que paga por la vivienda de su familia (una pequeña casa de tres dormitorios en un complejo privado en el sur de la ciudad), su auto y la escuela de su hija.
Wina indica que el principal gasto son los alimentos.
"Creo que probablemente gastamos alrededor de US$2.000 al mes y ni siquiera bebemos alcohol", agregando que la carne y las verduras se encuentran entre los artículos más caros.
"Somos asiáticos por lo que comemos una gran cantidad de brotes de soja, pero una lata aquí cuesta US$6 y la carne llega a los US$45 el kilo, y ni siquiera es fresca, es congelada".

US$200 por un almuerzo

Fernando Azvedo, ingeniero en telecomunicaciones proveniente de Portugal ha vivido en Luanda con su esposa desde 2010. Dice que los únicos artículos a un precio razonable son la cerveza (60 centavos de dólar por botella), cigarrillos (US$1,50) y el combustible, 40 centavos por litro de diesel.
"Puede darse una vuelta por Luanda para encontrar mejores precios", dijo. "Pero nunca hay seguridad acerca de la calidad de los productos. Sólo compro la fruta fuera de las tiendas regulares, todo lo demás no se sabe su calidad".

Paga US$5.000 al mes por su departamento -aunque lo cubre su compañía - y dice que puede gastar US$200 en un almuerzo sólo para él.
James Wilde, que ha vivido en muchas partes del mundo y que ahora está en Luanda como consultor para una compañía alemana de telecomunicaciones, afirma:
"Luanda es, sin duda, el lugar más caro en el que he estado en cuanto a los alquileres, cenas y cosas por el estilo".
"El alquiler es extremadamente alto. Un apartamento de dos habitaciones en Luanda cuesta US$4.000 al mes. Cuando vivía en Moscú pagaba 2.000 euros al mes para un lugar de dos dormitorios. Aquí se paga mucho más y no es de la misma calidad ".
"Cuando llegué por primera vez recuerdo que tenía que abastecer mi cocina. La primera vez que fui al supermercado pasé de los US$800. Ni siquiera llené la parte de atrás del auto, no me lo podía creer".
"Lo más frustrante es que no creo que hay relación entre el precio y la calidad del producto o servicio. Pero mi salario se ajusta al alto costo de la vida, por lo que todavía vale la pena trabajar en Luanda y creo que que es el caso de la mayoría de los expatriados".

¿Por qué es tan cara?

Hay varias razones. La principal es que Angola vivió una guerra civil que se inició en 1975 cuando el país obtuvo su independencia de Portugal. Continuó hasta 2002.
La infraestructura del país está en malas condiciones después de más de 20 años de combates.

Durante ese tiempo la mayor parte de la producción industrial y agrícola se detuvo y la infraestructura básica como carreteras, ferrocarriles, líneas eléctricas y de abastecimiento de agua sufrieron graves daños.
Después de haber sido una vez un gran exportador de productos como el café y el algodón, y autosuficiente en la mayoría de los alimentos, Angola ahora importa aproximadamente el 80% de sus bienes de consumo.
Por cada lata o paquete de alimentos que usted compra en Luanda, debe tener en cuenta los costos involucrados en la obtención de ese producto.
Hay algunos que dicen que la élite empresarial de Angola, que controla las empresas importadoras, ha hecho poco para reducir los costos, aunque en los últimos años una prioridad del gobierno ha sido bajar los precios.
José Severino, presidente de la Asociación Industrial de Angola, dice que es un círculo vicioso.
"Usted tiene un sistema de electricidad no fiable por lo que necesita un generador, las redes de transporte deficiente y la capacidad humana débil, lo que empuja hacia arriba el costo de la producción local. Esto nos lleva a que sigue siendo más barato importar productos en lugar de hacerlos aquí".
Daniel Esteves es dueño de Imorizon, una pequeña compañía de bienes raíces en Luanda.
Originario de Portugal, ha vivido en el país durante cinco años.
"Es una cuestión de oferta y la demanda"
"A medida que la construcción está en su apogeo, hay más viviendas disponibles y los precios están bajando. En algunos casos, los apartamentos son 50% más baratos de lo que eran hace tres años. La tendencia continuará a medida que más viviendas se construyan".
Esteves sin embargo dice que todavía se puede alquilar un apartamento nuevo por hasta US$15.000, y casas por US$30.000.
La inundación de expatriados tras la postguerra en Luanda -en su mayoría traídos para el sector de la construcción y el petróleo- ha mantenido los precios del las viviendas inflados, dice Esteves.
"Yo diría que el hecho de que haya petróleo y otras grandes empresas multinacionales que buscan alojamiento para sus trabajadores extranjeros ha hecho subir los costos, ya que se tiende a pagar sólo lo que se les pide", dijo.
Sin embargo, pese a que las multinacionales pueden haber aumentado los precios de las casas, hay que recordar que los propietarios en Angola se han estado aprovechando de esto.
Fernando Azvedo también acota que los angoleños con dinero también gastan mucho en productos alimenticios, por lo que no sólo los extranjeros son los responsables de la demanda.
"En los supermercados veo a muchos angoleños ricos con un carro lleno de productos caros como el Champagne que no parecen preocuparse por el precio".
Wina Miranda, quien al igual que su marido es ingeniero ambiental, dice que la alternativa es salir de Luanda hacia la costa.
Recientemente encontró una granja china que vende a bajo costo verduras de buena calidad.
"Conozco a una señora que tiene su propia máquina de hacer yogur, heladera, horno para hacer pan y cultiva su propia col y brotes de soja", dijo. "No hay mucho que hacer aquí, así que tienen tiempo para hacer estas cosas".
"Recuerdo que diez días después de que llegamos mi hija cumplía cuatro años y le había prometido un pastel de Barbie. Así que me fui en busca de uno que terminó costándome US$360. Pero al año siguiente, me las arreglé para hacer su pastel yo misma. Qué es lo que haces, aprendes a sobrevivir, ya que un pastel de cumpleaños por US$360 es simplemente ridículo".

Las cosas están cambiando

Ed Corbett es un consultor británico que vive en Luanda.
Habla portugués y no tiene ningún problema en tomar un taxi o regatear frutas de los vendedores ambulantes, pero acepta que esto no es posible para todos los expatriados.
Aseguró que los precios han bajado "notablemente" en los últimos 18 meses, no sólo los de bienes raíces sino en los supermercados y, sobre todo debido a una mayor competencia.
"Me sorprendería si Luanda mantiene su puesto número uno en el costo de la vida", dijo Ed Corbett. "Luanda es cara, pero si usted sabe dónde ir de compras, sin duda es cada vez más accesible".

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