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2010/05/06

Graduados universitarios chinos optan por continuar estudios en vez de buscar empleo

Fuente: Pueblo en Linea.

Dos años después de haberse graduado, el joven desempleado Zhang Junhui sigue yendo cada mañana a las instalaciones del campus de la Universidad de Peking.

A día de hoy Zhang mantiene la rutina que seguía cuando todavía era un estudiante: se levanta a las 8:00 horas para desayunar en la cantina universitaria, y media hora más tarde ya está sentado estudiando en una de las clases vacías. Por la noche, a las 22.30 horas, después de un largo día de estudio vuelve a su casa en bicicleta.

"Estar en una buena universidad estimula mi estudio, además he conocido a cuatro estudiantes extranjeros, por lo que mi inglés está mejorando rápidamente", dijo Zhang, que también se siente atraído por el bajo coste de las comidas de la cantina y por las instalaciones médicas del campus.

Zhang se graduó en 2008 como ingeniero en la Universidad Tecnológica de Hebei, en la provincia septentrional china del mismo nombre, antes de comenzar su primer trabajo como programador informático, cobrando un sueldo mensual de 2.500 yuanes. Pero después de nueve meses decidió cambiar de vida, y renunció.

"No quería formar parte de la 'tribu de las hormigas', y por eso estoy compartiendo este piso de 12 metros cuadrados y pobre iluminación con otros tres compañeros de piso para ser admitido en la Universidad de Peking", afirmó Zhang.

La 'tribu de las hormigas' a las que se refiere Zhang, es como se conoce a los recién graduados que cobran un salario muy bajo y esperan construirse una carrera profesional en Beijing, mientras viven hacinados en barriadas en Tangjialing, a las afueras de la capital.

En términos generales, estas "hormigas" provienen de zonas rurales pobres, y no tienen conexiones sociales que les puedan ser útiles.

Para no acabar como ellos, Zhang se mudó a un apartamento frente a la puerta oeste de la Universidad de Peking en abril de 2009, y desde entonces se ha estado preparando para el examen IELTS que le permitirá estudiar en Australia. Su sueño es trabajar en una de las empresas del Fortune 500 después de haber estudiado en el extranjero.

"Estos graduados universitarios que siguen con sus estudios, viven cerca de la universidad, que no trabajan y que dependen de sus padres para que los mantengan, son muy distintos de la 'tribu de las hormigas'", dijo Lian Si, un sociólogo de la Universidad de Económicas y Negocios Internacionales de Beijing.

Según una encuesta efectuada por Lian a 2.981 jóvenes en los alrededores de los campus universitarios de Beijing, Shanghai, Wuhan, Guangzhou y Xi'an, el 61,23 de los encuestados aseguraron estar o bien buscando trabajo, o bien matriculados en estudios de postgrado, habiéndose graduado previamente en otra universidad. Del total, un 72,7 por ciento provienen de zonas rurales. Lian llevó a cabo la encuesta entre junio de 2008 y julio de 2009.

"Estos estudiantes amplían sus estudios esperando que esto les ayude a encontrar un buen trabajo para poder construirse una vida mejor", dijo Lian.

"Una licenciatura ya no hace que destaques entre los demás, sobre todo si tu expediente académico no es espectacular, como es mi caso", explicó Zhang.

Un récord de 6,3 millones de graduados universitarios se incorporarán al mercado laboral chino este verano, el número más nutrido desde la expansión de reclutamiento universitario en 1999, según datos del Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social (MRHSS). Pero el mercado laboral, que se encuentra en un periodo de recuperación, no está en condiciones de absorberlos a todos.

"Espero que mejorar tanto mi inglés como mis conocimientos profesionales me otorgue un mejor comienzo en la vida. Me será imposible hacer esto cuando ya tenga una familia, así que sólo me doy dos años para llevarlo a cabo", aseguró Zhang.

Uno de los compañeros de piso de Zhang no ha podido pasar el examen para acceder a un postgrado en seis veces.

"Valoro el espíritu de trabajo duro de estos jóvenes", dijo Xia Xuelan, sociólogo de la Universidad de Peking, "Pero no pueden prolongar la transición de estudiantes a trabajadores durante mucho tiempo. Si la prolongan demasiado, puede que sea perjudicial para la gestión del centro educativo, y también para la estabilidad social, ya que su ansiedad y frustración crecerá con el tiempo".

"Además de un título de una prestigiosa universidad, los empleadores también valoran certificados de ocupación, trabajos relevantes y la experiencia obtenida mediante prácticas", explica Lian.

"En vez de empeñarse en conseguir un máster estos jóvenes graduados deberían estar más atentos al mercado laboral para saber qué es lo que los empleadores quieren", sugirió Lian.

Pero Lian también criticó el sistema educativo chino, rígido y poco práctico, que no logra cumplir con las demandas del mercado laboral.

El gobierno por su parte está esforzándose por promover la independencia y la facilidad para encontrar empleo de estos estudiantes.

A principios del mes pasado, el MRHSS, el Ministerio de Educación, el de Hacienda y el Banco de China, lanzaron una serie de políticas preferenciales para motivar a los jóvenes graduados a trabajar en las zonas rurales, y a que abran sus propios negocios. Esta políticas recién estrenadas tienen como objetivo ayudar a que al menos un 70 por ciento de los nuevos graduados encuentren trabajo antes del próximo mes de julio, y que otro 10 por ciento lo haga antes de finales de este año.

A los jóvenes graduados también se les anima a que se alisten en el Ejército Popular de Liberación. Cada graduado que se aliste recibe un solo pago de 24.000 yuanes (3.500 dólares), para ayudarles a pagar sus estudios y los créditos universitarios.

Pero los alrededores del campus no son un puerto fijo para la mayoría de los graduados.

Según la encuesta de Lian, sólo el 8,4 de los encuestados seguían viviendo cerca del campus cinco años después de graduarse. Algunos se marcharon para cubrir puestos de trabajo con buenos sueldos, y otros se mudaron a ciudades de segundo nivel donde la competencia laboral no es tan agresiva.

"Si no consigo aprobar este año, me pondré a buscar un trabajo de nuevo", afirma Zhang, "Sea como sea, tengo que abrirme mi propio camino".

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