Se acabaron los rumores sobre el supuesto primer smartphone Nokia con sistema operativo Android. El fabricante de móviles, adquirido el pasado año por Microsoft, ha anunciado esta mañana que lanza una nueva familia de smartphones, los Nokia X, con una versión personalizada de Android, el sistema operativo de Google. Una solución similar a la que ya adoptó Amazon, cuando lanzó sus terminales Android.
La noticia puede sorprender si se tiene en cuenta que Google es el principal rival del gigante de Redmond, y que este busca desde hace tiempo comer terreno a Apple y Google con su sistema operativo móvil Windows Phone. Un objetivo que le llevó a adquirir Nokia.
Sin embargo, Stephen Elop, vicepresidente ejecutivo de dispositivos de Nokia, explicó en rueda de prensa que con estos terminales lo que pretende Microsoft es integrar sus servicios en smartphones más competitivos en precios para que estos lleguen a un público mucho mayor. Y la fórmula que han elegido para ello es abrazar Android, pero sin caer en la nube de servicios de Google. Los terminales Nokia X, además, llevan una interfaz de usuario muy parecida a Windows Phone, “lo que permitirá ir educando al consumidor hacia los servicios de mayor valor de los Nokia Lumia”, aseguraron desde la compañía.
Nokia desveló que habrá tres modelos basados en Android: el Nokia X, el X+ y el XL. Todos permitirán descargar aplicaciones Android, pero no acceder a los servicios en la nube asociados a Google. Los nuevos smartphones X de Nokia conducirán a los usuarios a los propios servicios de Nokia y de Microsoft, como el servicio de mapas Here, el MixRadio o el de almacenamiento en la nube Onedrive, entre otros.
Las aplicaciones de Android se descargarán en estos nuevos terminales desde la tienda de Nokia y no desde Google Play. Y el usuario podrá pagar las aplicaciones a través de la tarifa del operador.
Distintas fuentes del sector aseguraron semanas atrás que Nokia trabajaba desde hace tiempo en un dispositivo con Android con el fin de lanzar smartphones más asequibles. Todo, antes de ser comprada por Microsoft. Lo que no quedaba claro es si la compañía había desestimado el proyecto tras ser absorbida por el gigante del software. Hoy ha quedado claro que no, y que la apuesta es fuerte. Una decisión que no parece convencer demasiado a Microsoft, según muestran las declaraciones de Joe Belfiore. El directivo de Redmond aseguró ayer en Barcelona que en Nokia “están haciendo algunas cosas que nos tienen muy ilusionados. Y otras, algo menos”, en clara alusión a este proyecto heredado, según informó El País.
Con todo, Elop dejó claro que con la nueva familia X Nokia pretende llegar a precios donde hoy le resulta imposible con Windows Phone. Son terminales que se posicionan entre la actual gama baja Asha de la compañía, que utiliza el sistema operativo S40, y los Lumia, su gama alta, equipada con Windows Phone. Y están pensados para los mercados emergentes.
Según la consultora Strategy, el segmento de smartphones “asequibles” crecerá un 20% al año, y Nokia no quiere dejar pasar por alto esta oportunidad. El fabricante de los Lumia ve también en esta iniciativa una buena oportunidad de promocionar servicios propios como los mapas Here citados o el buscador Bing de Microsoft en mercados emergentes. “Los Nokia X abren a Microsoft una excelente oportunidad de llegar a un mercado enorme que, por precio, hasta ahora tenía cerrado”, añaden desde Nokia, que insistieron que su próximo objetivo “es conectar a los próximos 1.000 millones de personas a internet con el lanzamiento de cinco nuevos terminales”, entre ellos la familia Nokia X.
Los precios de los Nokia con Android van desde los 89 euros, el más básico (el X, que lleva pantalla capacitiva de cuatro pulgadas y cámara de 3 MP), a 99 euros (el X+, más orientado a música, fotos, vídeos y juegos), y 109 euros el de mayor potencia, el XL. Este último cuenta con una pantalla de 5 pulgadas, una cámara frontal de 2 megapíxeles para explotar mejor las llamadas con Skype y una cámara principal de 5 megapíxeles con autofocus y flash. Toda la familia X lleva procesador de doble núcleo snapdragon de Qualcomm y admiten simultáneamente dos tarjetas SIM.
Con la adquisición de cualquier Smartphone de la familia Nokia X en mercados seleccionados, el usuario disfrutará, por tiempo ilimitado, de un mes de suscripción global a Skype para realizar llamadas internacionales a fijos en más de 60 países y a móviles en 8 países.
Los terminales se lanzarán de manera inmediata en África, Asia Pacífico, India, Oriente Medio, Europa y Latinoamérica.
Nokia defendió que el lanzamiento de estos terminales no provocará una canibalización de sus smartphones Lumia “porque sus diferencias son sustanciales al ir dirigidos a segmentos muy diferentes”. Aún así no descartan que pueda haber cierta canibalización entre el modelo XL y el más básico de los Lumia, el 520.
Ahora queda por ver cómo reacciona el mercado. Y si esta estrategia continúa a largo plazo, porque a Microsoft, propietaria ya de la unidad de móviles de Nokia, lo que le interesa es crear un catálogo cohesionado de productos con los que impulsar Windows Phone, que aún está muy lejos de iOS y Android.
Según las cifras de IDC de 2013, Android cerró el año con una cuota de mercado del 78,6%, iOS con el 1,52% (tras caer tres puntos porcentuales) y Windows Phone con un 3,3%. Un año antes Microsoft tenía un 2,4%.
Un Asha por 45 euros
Nokia también ha intensificado su apuesta por los terminales de gama más baja. El fabricante de móviles desveló dos modelos enfocados a los países emergentes. Uno es el Asha 230, totalmente táctil y el más económico de esta familia hasta la fecha, pues costará 45 euros. Y el Nokia 220. Un términal básico con teclas preparadas para navegar por internet con aplicaciones sociales y un precio estimado de 29 euros. “El objetivo es lograr que la gente que nunca ha tenido acceso a internet lo tenga”.
La cuestión es ¿cuál son los planes de Microsoft a medio y largo plazo? ¿terminará imponiendo Windows Phone también en los terminales más baratos? Por ahora, parece que no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario