El Gobierno de Brasil acaba de anunciar que penalizará el uso de Twitter para avisar de controles policiales de tráfico. Se ignora, si el servicio del pájaro azul cooperará con las autoridades, pero seguro que frenará esta costumbre extendida en uno de los países donde se han abrazado los mensajes de 140 caracteres con más fervor.
Antes de que llegase la sofisticación de las redes sociales, los conductores tenían por costumbre darse avisos con las luces largas. Un breve toque y el coche que venía de frente pisaba el freno. Waze podría considerarse el equivalente en los tiempos que corren. Se trata de una aplicación móvil, gratuita, que funciona tanto en teléfonos como en tabletas. Es compatible con iPhone, Android, Windows Phone y Symbian, hecho que le ha ayudado para su rápida difusión.
La aplicación une varios aspectos, por un lado es un GPS, un aparato cada vez menos vendido desde que los móviles traen mapas, por otro es una red social con aspectos de juegos, al estilo FourSquare. Nada más darse de alta se nos adjudica un coche que se va movimiendo por el mapa. A medida que se hace aportaciones sobre un bache en un lugar concreto, una calle cortada temporalmente, un semáforo roto o un control de tráfico, el conductor va recibiendo medallas y puntos que le sirven de reconocimiento ante el resto de miembros de la red.
La mayor ventaja está en el uso en tiempo real, si hay un atasco cerca, avisará de que hay conductores bloqueados ahí y ofrece una vía alternativa. Permite guardar rutas habituales y conocer las incidencias antes de salir de casa. Uno de los aspectos más constructivos está en la función “Asfaltar”, que sirve para actualizar los mapas de la aplicación con nuevas calles y caminos disponibles. En este aspecto es difícil que los fabricantes de GPS puedan competir.
La semana pasada Waze lanzó su versión 3.0 para Android. Permite tener una experiencia más completa al conectarse con el citado FourSquare y Yelp, para poder obtener recomendaciones de comercios cuando se pasa cerca de ellos, y, algo todavía más cómodo, recibir órdenes vocales para mantener las manos en el volante, en lugar de en la pantalla.
La DGT, de momento, no se ha pronunciado al respecto y raro es el trayecto en coche, por corto que sea, en el que no se encuentra un consejo o advertencia para los conductores.
Antes de que llegase la sofisticación de las redes sociales, los conductores tenían por costumbre darse avisos con las luces largas. Un breve toque y el coche que venía de frente pisaba el freno. Waze podría considerarse el equivalente en los tiempos que corren. Se trata de una aplicación móvil, gratuita, que funciona tanto en teléfonos como en tabletas. Es compatible con iPhone, Android, Windows Phone y Symbian, hecho que le ha ayudado para su rápida difusión.
La aplicación une varios aspectos, por un lado es un GPS, un aparato cada vez menos vendido desde que los móviles traen mapas, por otro es una red social con aspectos de juegos, al estilo FourSquare. Nada más darse de alta se nos adjudica un coche que se va movimiendo por el mapa. A medida que se hace aportaciones sobre un bache en un lugar concreto, una calle cortada temporalmente, un semáforo roto o un control de tráfico, el conductor va recibiendo medallas y puntos que le sirven de reconocimiento ante el resto de miembros de la red.
La mayor ventaja está en el uso en tiempo real, si hay un atasco cerca, avisará de que hay conductores bloqueados ahí y ofrece una vía alternativa. Permite guardar rutas habituales y conocer las incidencias antes de salir de casa. Uno de los aspectos más constructivos está en la función “Asfaltar”, que sirve para actualizar los mapas de la aplicación con nuevas calles y caminos disponibles. En este aspecto es difícil que los fabricantes de GPS puedan competir.
La semana pasada Waze lanzó su versión 3.0 para Android. Permite tener una experiencia más completa al conectarse con el citado FourSquare y Yelp, para poder obtener recomendaciones de comercios cuando se pasa cerca de ellos, y, algo todavía más cómodo, recibir órdenes vocales para mantener las manos en el volante, en lugar de en la pantalla.
La DGT, de momento, no se ha pronunciado al respecto y raro es el trayecto en coche, por corto que sea, en el que no se encuentra un consejo o advertencia para los conductores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario