Si la compañía logró vender hasta el pasado enero 40 millones de Galaxy S3 (tras 9 meses en el mercado) y más de 100 millones de unidades si se suma toda la familia de terminales Galaxy S, todo apunta a que el nuevo terminal está llamado a ser otro superventas. La compañía no ofreció datos al respecto, pero las cifras que se manejan en el sector apuntan a que podría vender 10 millones de su nuevo Galaxy S4 en el primer mes desde su lanzamiento.
El poderío que derrochó ayer Samsung, sin duda, ayudará a este propósito. Reunió a 3.000 personas en el icónico Radio City Music Hall, donde el Galaxy S4 fue protagonista de un espectáculo al más puro estilo Broadway, donde no faltaron actores y una orquesta. Además, Samsung, que se gasta 12.000 millones de dólares al años en marketing y publicidad, bloqueó parte de la emblemática plaza de Times Square para que la gente pudiera seguir el evento en directo a través de una gran pantalla. Era la primera vez que la multinacional asiática elegía EE UU para lanzar un móvil. Quizás, un modo más de enseñar las uñas a Apple. Y es que todo vale por un mercado, el de los smartphones, que mueve 250.000 millones de euros.
Durante la presentación del Galaxy S4, Samsung quiso demostrar que puede desplazar a Apple como empresa referente de vanguardia tecnológica. Así, la compañía asiática mostró un terminal que permite recorrer un correo o una página web con solo mover los ojos por la pantalla. Igualmente, y gracias a la función Smart Pause, el usuario puede controlar la pantalla del nuevo smartphone con solo mirarla. De esta manera, si una persona está mirando un vídeo y quita la vista de la pantalla la reproducción se para inmediatamente y no se reanuda hasta que no vuelva a mirarla.
Otro avance que permite el terminal es poder hacer previsualizaciones de correos y de imágenes acercando los dedos a la pantalla sin tocarla.
El nuevo móvil, que se estrenará a finales de abril a un precio aún por desvelar (todo apunta que superará los 500 euros), incluye además un avanzado traductor, capaz de reconocer lo que dice el usuario y traducirlo a nueve idiomas diferentes no solo en texto sino también a través de un sintetizador de voz. El Galaxy S4 lleva igualmente una cámara trasera de 13 megapíxeles y otra frontal de dos megapíxeles que pueden usarse al mismo tiempo para que la persona que toma la fotografía pueda incluir su cara en la imagen tomada.
El nuevo terminal estrena también otras funciones para tomar fotos con sonido y eliminar a personas que sin quererlo se cuelan en las fotos. Su función Group Play permite a los usuarios compartir música y, gracias a la tecnología NFC, convertir varios teléfonos en altavoces.
Samsung también ha reforzado con el Galaxy S4 su sistema de mensajería ChatOn (ahora se pueden tener tres interlocutores en la misma videollamada), ha introducido la aplicación S Health para monitorizar la salud de su dueño, y ha reforzado la seguridad del dispositivo. El Galaxy S4 será el primer smartphones que incluya el servicio Knox. El objetivo es que pueda utilizarse indistintamente para uso personal y profesional, sin que esto ponga en riesgo la seguridad de las empresas y poder entrar así con fuerza en el entorno corporativo. El gran reto de Samsung, y la gran amenaza para Blackberry, que tiene en las empresas su gran fortaleza.
El Galaxy S4 mantiene un diseño parecido a su predecesor, el S3, pero su pantalla es mayor (5 pulgadas, siguiendo la nueva tendencia a la que se resiste Apple) y súper Amoled con Full HD. El terminal es muy ligero (130 gramos) y fino (7,9 milimetros) y lleva como sistema operativo el Android 4.2.2 Jelly Bean. En cuanto al procesador, el nuevo smartphone de Samsung saldrá a la calle en dos versiones, una con procesador de cuatro núcleos a 1,9 Ghz, y otra, la más revolucionaria, con un procesador de ocho núcleos a 1,6 Ghz. Por ahora, no se sabe cuál se lanzará en España, donde la compañía ha llegado a acuerdos con Telefónica, Vodafone y Orange para el lanzamiento del terminal.
“Todas las características innovadoras del GS4 han sido desarrolladas a partir de las experiencias y las necesidades que nos han hecho llegar nuestros clientes de todo el mundo”, dijo J. K. Shin, máximo responsable de móviles de Samsung. El directivo sabe que Samsung no puede fallar ahora, justo cuando el mercado de smartphones está a punto de superar al de móviles. En el último trimestre del año, la caída de móviles básicos fue del 19,3% con ventas de 264 millones de unidades, mientras los smartphones crecieron un 38,3% (hasta 207,7 millones). Según Gartner, en 2013 se venderán 1.000 millones de smartphones por 900 millones de móviles básicos.
Samsung, que cerró el último trimestre de 2012 con una cuota del 29% frente al 19% de Apple, es la única empresa que junto a la compañía de la manzana hacen beneficio en este negocio.
Sin embargo, y pese a que el Galaxy S4 ya sea considerado uno de los móviles más avanzados del momento, la batalla para 2013 promete ser intensa. Sony y HTC acaban de estrenar terminales realmente potentes, las compañías chinas como Huawey o Lenovo, pegan fuerte; Blackberry y Nokia no tiran la toalla. Y Google calienta motores con Motorola. Quizás por esto último, Samsung no habló del buscador, su gran socio, en ningún momento de la presentación. Es más durante el evento más bien quiso dejar claro que su estrategia pasa por distanciarse del resto de fabricantes que se basan en Android, y seguramente por una mayor independencia de Google.
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