Activistas de internet presentan un 'Manual de desobediencia a la Ley Sinde'

Activistas de internet agrupados en torno al colectivo Hacktivistas.net, han presentado en Madrid el 'Manual de desobediencia a la Ley Sinde', un texto que resume las posibilidades que la red ofrece para "evitar las barreras de la censura gubernamental". El manual ha sido publicado por la editorial Traficantes de Sueños y proclama como objetivo "demostrar la ineficacia radical de la Ley Sinde" presentando métodos técnicos para sortearla.
El manual, que cuenta con el apoyo del periódico Diagonal, explica en su introducción que en él se proporcionan las "claves para mantener intacta la libertad de expresión y el derecho a la cultura".
Según los autores del texto, de 54 páginas, la Ley Sinde, aprobada en el Congreso el pasado febrero con el respaldo de PSOE, PP y CiU, intenta perpetuar un esquema económico que ha sido superado por los recursos tecnológicos. "Gobierno y poderes económicos creen que basta con aprobar la ley. Que han detenido la red. Nada más lejos de la realidad", se agrega en la introducción que subraya que internet "siempre" encuentra la forma de hacer lo que siempre ha hecho.
Por ello, presentan este manual destinado a usuarios y webmasters como "un mapa para alcanzar nuevas tierras donde sus injustas e inútiles leyes no puedan cumplirse". "Si creen que han ganado, este manual quiere demostrar que no pueden ganar. Nos obligan a desobedecer una ley y a saltarnos sus mecanismos de control (...) Nos convirtieron en delincuentes. Actuemos como tales, detengamos la máquina", concluye la introducción del texto.
Entre los distintos recursos presentados para intentar burlar los eventuales controles que puedan derivarse de la aplicación de la Ley Sinde, el manual propone a los usuarios diversos métodos para cambiar el nombre de dominio (DNS) de su conexión, configurar y usar proxys para ocultar el origen del tráfico de datos, y establecer redes privadas virtuales.
El manual aconseja a los webmasters compartir sus servidores con otras personas o empresas a fin de evitar eventuales bloqueos, y realizar fuera de España los registros de dominio y el alojamiento de sus webs.

La Vanguardia