La banda ancha más rápida del mundo tiene una velocidad de 1,4 terabits por segundo , y está en Londres, tras una prueba conjunta entre la compañía de telecomunicaciones Alcatel-Lucent y el proveedor de Internet BT realizada entre el centro de la ciudad e Ipswich, una ciudad ubicada a unos 410 kilómetros. La velocidad alcanzada fue suficiente para que se pudiera transmitir en un segundo unas 44 películas HD sin compresión.
Si bien aún este servicio de banda ancha no estará disponible al público, las pruebas fueron realizadas sobre la infraestructura preexistente de fibra óptica, lo que permite en el mediano plazo poder ofrecer velocidades mayores en los planes comerciales con un menor costo de inversión en equipos y actualizaciones.
Según Alcatel-Lucent, la mayor demanda de velocidad impulsa este tipo de testeos, que buscan optimizar el equipamiento actual ante los requerimientos del mercado, una tendencia marcada por uso de los servicios de streaming. De forma previa, hubo otros intentos realizados en laboratorios, con transferencias que alcanzan los 100 terabits por segundo, pero con una incierta implementación real en la infraestructura actual.
Entre los actuales planes comerciales, las velocidades aún están lejos de la marca londinense, pero no dejan de ser veloces: Japón cuenta con el servicio más rápido del mundo con una conexión hogareña de 2 Gbps , disponible en Tokio mediante So-Net, un proveedor de Internet que forma parte del conglomerado de empresas de Sony. Por su parte, Google ofrece en las ciudades estadounidenses de Missouri y Kansas su servicio Fiber, una banda ancha de 1 Gbps de velocidad con planes de 70 a 120 dólares.
La Argentina, mientras tanto, tiene una oferta de conectividad pobre comparada con el resto de la región.
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