Cualquiera podría pensar que el aumento de los precios del petróleo sólo puede traer beneficios a una economía dependiente de la energía. Sin embargo, esto no es así.
Tomemos el caso de Rusia: durante los años del boom de la década de 2000, cuando el presupuesto del país aumentó gracias a los ingresos por exportaciones de petróleo y gas, el gobierno evitó tomar muchas medidas impopulares pero necesarias para diversificar su economía.Entonces, ocurrieron dos cosas no relacionadas entre sí: Dmitri Medvedev se convirtió en presidente de Rusia y poco después comenzó la crisis financiera mundial.
Sin muchas alternativas, el joven presidente puso en marcha un programa de modernización, con el objetivo de convertir a Rusia en un país tecnológicamente avanzado.
Su proyecto insignia -la creación de una versión rusa de Silicon Valley en Skolkovo, cerca de Moscú- se inició oficialmente en la primavera pasada.
Pero en un año no ha habido buenos resultados, más que una serie de memorandos de entendimiento firmados entre el Fondo Skolkovo y empresas extranjeras, entre ellas Microsoft.
"Se está hablando mucho de esto [modernización], el presidente y el primer ministro están hablando de ello, pero francamente no hay muchas cosas sucediendo en esta dirección", le dijo a la BBC Andrey Kostin, presidente del banco estatal ruso VTB.
Comprensión de la actividad
Pero el presidente del Fondo Skolkovo, Viktor Vekselberg, señaló que aunque el proyecto fue creado legalmente en mayo de 2011, el Parlamento ruso recién aprobó la ley que regula sus actividades en septiembre.Dijo que los siete meses transcurridos desde septiembre no son prácticamente nada para un proyecto.
Sergey Aleksashenko, director de investigación macroeconómica en la Escuela Superior de Economía en Moscú, está de acuerdo: "Sería un poco ingenuo esperar resultados definitivos en el plazo de un año".
Una de las razones, dice, es que muchos de los responsables designados para la ejecución del proyecto no tenía ninguna experiencia en el negocio de la alta tecnología.
"Se necesita tiempo para comprender, para conocer a los colegas", dice Aleksashenko.
Pero hay otra razón importante, cree Vadim Malkin, socio gerente de la Consultoría de Mercados de Transición LLP.
Los que idearon el proyecto no le prestaron suficiente atención a por qué los inversionistas optarían por Rusia y no por otros países como Portugal, con exenciones de impuestos igualmente atractivas, o India, con un costo mucho más barato de la mano de obra, según le dijo al diario ruso Vedomosti.
Nuevo ecosistema
Vekselberg le dijo a la BBC que, si bien los investigadores rusos siguen siendo más que capaces de generar nuevas ideas, casi no hay medios, ni incluso una comprensión clara, para trasladarlas a la economía real.De acuerdo con el multimillonario, esa es la tarea del proyecto Skolkovo: crear un ecosistema de normas, reglamentos y leyes que hagan posible la transferencia.
El gobierno prometió 85.000 millones de rublos (US$3.000 millones) durante cuatro años para el proyecto, explica Vekselberg.
A su vez Kostin, del banco VTB, señala que el gobierno no ve otra alternativa a que Rusia sea una economía abierta, aunque añadió: "Cuánto nos beneficiaremos de esto depende mucho de que logremos modernizar nuestra economía".
Sin embargo, la reciente subida de los precios del petróleo podría volver a hacer que el gobierno esté menos dispuesto a seguir esta agenda de modernización, especialmente considerando que 2011 es un año preelectoral en Rusia.
El petróleo y el gas representan aproximadamente dos tercios de las exportaciones de Rusia.
El ministro de Economía, Alexei Kudrin, ya ha sugerido que el déficit presupuestario del país se podría eliminar el próximo año -tres años antes de lo esperado inicialmente- si el precio de los Urales, la marca rusa de exportación de petróleo, alcanza un precio promedio de US$120 por barril.
El precio promedio del crudo Urales superó los US$100 en el período enero-marzo, y recientemente aumentó a US$120 por barril.
"El aumento de los precios del petróleo ayudará [al gobierno] a posponer la toma de decisiones difíciles", dice Sergei Guriev, rector de la New Economic School de Moscú.
Calidad del petróleo
Pero incluso si los precios del petróleo permanecen altos, sería imposible para Rusia disfrutar de los ingresos del carburante sin tener que invertir fuertemente en nuevas tecnologías.El ministerio ruso de Recursos Naturales dijo en su informe a principios de esta semana que la calidad de las reservas de petróleo del país está en declive.
Según el ministerio, el petróleo pesado y viscoso, que es difícil de extraer, ahora representa el 70% de las reservas de petróleo del país, mientras que el más ligero, que es de mayor calidad, representa el 70% del total de petróleo extraído.
Esto significa que incluso la industria del petróleo y del gas sufrirán si la economía no se moderniza.
"La cuestión de la modernización es la cuestión de convertir a Rusia en un país del siglo XXI," dice Aleksashenko.
"De lo contrario, Rusia seguirá atrapado en algún lugar entre los siglos XIX y XX", vaticina.
BBC Mundo
No hay comentarios:
Publicar un comentario