La Unión Europea está preparando nuevas directivas que podrían afectar al futuro de los productos de Apple. Entre ellas destaca la 'Nueva Directiva sobre Baterías', que propone la obligatoriedad de que las baterías de los dispositivos electrónicos se puedan "extraer fácilmente" para sustituirlas o desecharlas.
La UE se ha destacado por impulsar reglamentos para la industria que afectan a todas las empresas que comercializan productos en Europa. Por ejemplo, la Directiva RoHS (Restriction of Hazardous Substances Directive) establece unos límites muy estrictos en el uso de plomo, mercurio, cadmio, cromo hexavalente y retardantes de llama denominados PBB y PBDE.
Los efectos de la RoHS
La entrada en vigor de la RoHS en julio de 2006 supuso el final de la cámara iSight de Apple, que hubiera tenido que ser rediseñada para venderla en Europa. El estado norteamericano de California también aprobó leyes que ilegalizaban la venta en California, a partir de enero de 2007, de productos prohibidos en Europa por la RoHS. En 2006, Apple ya había integrado cámaras compatibles con la iSight en sus ordenadores portátiles y en los iMac, haciendo prácticamente innecesario rediseñar la iSight independiente y dando así lugar a la retirada del producto existente. "Como resultado de nuestras medidas de precaución respecto a las sustancias nocivas", declaró la empresa, "Apple ha podido cumplir muchas de las restricciones impuestas por la RoHS mucho antes del plazo de julio de 2006".
Palm fue otra de las firmas afectadas por la RoHS: el teléfono avanzado Treo 650 llegó al final de su vida comercial en Europa bastante antes de ser sustituido en el catálogo de la firma por el Treo 680, precisamente porque algunos de sus componentes incumplían la normativa en cuestión.
Además de la RoHS, se han comenzado a aplicar otros reglamentos relativos a los desechos electrónicos, la eficiencia energética y el uso de productos químicos, algunos de los cuales tienen rango legal, mientras otros son sólo recomendaciones que los estados miembros de la UE aplican con cierta flexibilidad. Al principio, algunos fabricantes se quejaron de que determinados reglamentos muy estrictos podrían causar problemas de mayor envergadura que las ventajas sociales y medioambientales que pretendían conseguir.
En concreto, la industria advirtió de que sin utilizar el plomo, las conexiones soldadas serían más débiles y los productos se averiarían antes. Al mismo tiempo, la industria de la automoción ha descubierto que las soldaduras sin plomo impuestas por la RoHS poseen una mayor resistencia a la temperatura, gracias a la cual se adaptan mejor a las duras condiciones de temperatura, vibración y sacudidas que sufren en el capó de los automóviles. IBM descubrió nuevas tecnologías exentas de plomo que han dado lugar a "reducción del desperdicio en las soldaduras, uso de aleaciones en bruto, mayor rapidez de salida de los productos al mercado y un índice mucho menor de uso de productos químicos".
Las baterías, el próximo objetivo
La directiva de la UE sobre baterías fue introducida en el año 2006, al mismo tiempo que la RoHS, y pone al día los reglamentos existentes, que datan de 1991. Su objetivo principal es evitar el uso innecesario de metales tóxicos en las baterías, e intenta facilitar el desecho y el reciclaje adecuados de las baterías viejas. La directiva exige a los estados miembros de la UE la aplicación de leyes y reglamentos locales sobre baterías antes de final de septiembre de 2008.
Si bien la Directiva sobre Baterías que ahora entra en vigor especifica que los consumidores deberán poder extraer con facilidad las baterías de los productos electrónicos, la "Nueva Directiva sobre Baterías" que se está redactando actualmente va mas lejos al señalar que los equipos eléctricos deberán estar diseñados para que las baterías puedan ser extraídas 'cómodamente' para ser sustituidas o retiradas cuando el producto alcance el final de su vida útil.
Gary Nevison escribe en New Electronics [PDF] que "esta exigencia pretende claramente que los usuarios puedan extraer las baterías abriendo una tapa a mano o quitando un par de tornillos. Asimismo, el fabricante deberá proporcionar al usuario instrucciones para extraer la batería con seguridad".
La UE y Apple
Se diría que tal reglamento afectaría al diseño de los iPods y el iPhone de Apple, que llevan la batería integrada, y son de los pocos productos cuyas baterías no pueden ser sustituidas por el usuario y exigen el uso de herramientas especiales o la intervención de un profesional. Por otra parte, la directiva en cuestión todavía no está finalizada ni ha sido ratificada, por lo que está sujeta a modificaciones y excepciones.
Las directivas de la UE sobre baterías están diseñadas principalmente para evitar que las baterías tóxicas acaben en los vertederos, no para obligar a los fabricantes a crear productos con unas características determinadas. Apple ya ofrece gratuitamente el reciclaje de los iPods y los iPhones. También hay terceros que compran iPods estropeados o rotos, descartando una parte de la preocupación por si los usuarios tiran sus iPod con la batería dentro. La verdadera preocupación afecta a los dispositivos con baterías integradas que han perdido buena parte de su valor cuando llegan al fin de su vida útil, con pocas posibilidades de reciclaje y que probablemente serán desechados con sus baterías.
Aún así, tal como la RoHS afectó la viabilidad de la iSight como producto internacional, Apple podría considerar más sencillo modificar el diseño de los iPods y el iPhone que tratar de ponerle remedio o impulsar excepciones a la directiva en curso de redacción. Ello podría llevar a adoptar baterías modulares y extraibles, o al menos profundizar en las medidas tomadas últimamente por Apple para que las baterías de los iPods no vengan encoladas, de modo que sean más fáciles de cambiar o de retirar durante el reciclaje.
El carácter internacional de la gama de productos de Apple hace sumamente improbable que la empresa desarrolle versiones distintas de sus productos para los mercados europeos, a fin de cumplir las directivas de la UE. Parece más probable que, tal como hizo con la iSight, Apple aplique modificaciones a escala internacional que le permitan cumplir las exigencias de la RoHS y la Nueva Directiva sobre Baterías, y que beneficien a los compradores de sus productos en cualquier lugar.
1 comentario:
Creo que tratándose pues, de cuidar el medio ambiente; es mejor que el usuario no pueda quitarle la pila al dispositivo, por que seguramente esa pila iría a la basura lo cual provoca grandes efectos contaminantes, por que, deberíamos saber que por ejemplo, una pila para reloj de pulso contamina 6.5 MILLONES de litros de agua, entre muchas otras cosas.
Creo que si esa pila la dejan en manos de la empresa (estoy seguro que solo apple deberia arreglar sus productos) ellos podrían comprometerse a hacer el acopio de sus baterías como compromiso ambiental, uno como usuario aunque tenga la intención muchas veces carecemos de medios para llevarlas al lugar adecuado.
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