Los inversores han mostrado un profundo rechazo al plan de reorganización de Hewlett-Packard. Las acciones de la compañía se han desplomado más de un 20% tras borrar los inversores casi 16.000 millones de valor de mercado del mayor fabricante de ordenadores personales del mundo.
Leo Apotheker, presidente ejecutivo de HP, anunció el pasado jueves una serie de reajustes estratégicos, entre los que se encontraba la escisión de su división de ordenadores, el abandono de sus tabletas y teléfonos basados en el sistema WebOS, y la decidida apuesta por el 'software' ejemplificada en la compra de una compañía británica de software por 8.149 millones de euros.
Estos importantes cambios estructurales han provocado la desconfianza de los inversores, "Están haciendo demasiadas cosas al mismo tiempo", dijo el analista de Sterne Agee, Shaw Wu.
En ese sentido se expresó Shaw Wu, que aseguró que HP no debería haber anunciado su intención de deshacerse de un negocio que le proporciona el 16% de sus ingresos. "Por qué querrían hacer negocios si saben que están en venta".
Wu también considera que se le cuestiona la decisión de abandonar tan pronto el negocio de telefonía celular que compró por 1.200 millones de dólares (835 millones de euros) a Palm. El analista considera que "no hay mucha confianza en la gestión (de Apotheker)", a la vez que recordó que tuvo que rebajar la perspectiva para cada trimestre desde que el ejecutivo se unió a HP. "Esto es una nueva demostración".
En la misma línea se expresó la firma Needham & Co en una investigación donde asegura que erosionado lo que quedaba de confianza de Wall Street en la compañía y en su estrategia". Las cifras de la bolsa parecen darle la razón, pues las acciones de HP bajaron hasta los 18, 85 euros, cuando antes del anuncio estaban asentadas en 21,86 euros. Además, los inversores huían a compañías rivales como Dell, cuyas acciones subieron casi un 3%.
Leo Apotheker, presidente ejecutivo de HP, anunció el pasado jueves una serie de reajustes estratégicos, entre los que se encontraba la escisión de su división de ordenadores, el abandono de sus tabletas y teléfonos basados en el sistema WebOS, y la decidida apuesta por el 'software' ejemplificada en la compra de una compañía británica de software por 8.149 millones de euros.
Estos importantes cambios estructurales han provocado la desconfianza de los inversores, "Están haciendo demasiadas cosas al mismo tiempo", dijo el analista de Sterne Agee, Shaw Wu.
Temprano anuncio
La separación de su división de ordenadores también ha sido muy criticada por los analistas. Según ellos, con este anuncio tan temprano se ha puesto en riesgo las ventas de ordenadores personales, pues los cientes podrían huir a marcas rivales como Dell ante la incertidumbre de la compañía.En ese sentido se expresó Shaw Wu, que aseguró que HP no debería haber anunciado su intención de deshacerse de un negocio que le proporciona el 16% de sus ingresos. "Por qué querrían hacer negocios si saben que están en venta".
Presidente en entredicho
Tampoco el presidente ejecutivo, Leo Apotheker, parece contar con muchos apoyos actualmente, cuya decisión de pagar casi 12.000 millones de dólares (8.358 millones de euros) por la compañía británica de 'software' Autonomy Corp ha generado preocupación entre los inversores, pues muchos consideran que es una cantidad desproporcionada.Wu también considera que se le cuestiona la decisión de abandonar tan pronto el negocio de telefonía celular que compró por 1.200 millones de dólares (835 millones de euros) a Palm. El analista considera que "no hay mucha confianza en la gestión (de Apotheker)", a la vez que recordó que tuvo que rebajar la perspectiva para cada trimestre desde que el ejecutivo se unió a HP. "Esto es una nueva demostración".
En la misma línea se expresó la firma Needham & Co en una investigación donde asegura que erosionado lo que quedaba de confianza de Wall Street en la compañía y en su estrategia". Las cifras de la bolsa parecen darle la razón, pues las acciones de HP bajaron hasta los 18, 85 euros, cuando antes del anuncio estaban asentadas en 21,86 euros. Además, los inversores huían a compañías rivales como Dell, cuyas acciones subieron casi un 3%.
No hay comentarios:
Publicar un comentario