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2012/01/06

2011 fue el peor año para los elefantes africanos

La palabra progreso lleva implícita la idea de que, con el paso del tiempo, las cosas mejoran. Pero no es así para los elefantes. De hecho, según datos de TRAFFIC , el pasado año fue el peor de las últimas décadas. La prueba es el incremento explosivo del tráfico ilegal de colmillos.
Aunque aún falta la confirmación oficial, los primeros datos revelan que el número y cantidad de requisas en operaciones a gran escala (más de 800 kg de peso) han aumentado en 2011. Según la red de vigilancia del tráfico de vida salvaje (TRAFFIC), el año pasado hubo 13 grandes operaciones contra este comercio.
Mientras, en 2010, hubo seis grandes incautaciones, cuyo peso total fue de algo menos de menos de 10 toneladas de marfil. Una estimación conservadora del peso del marfil confiscado en las 13 mayores incautaciones en el 2011 coloca la cifra en más de 23 toneladas, una cifra que probablemente representa a unos 2.500 elefantes, o más.
El caso más reciente en salir a la luz implicó la captura de 727 piezas de marfil descubierto el 21 de diciembre oculto dentro de un contenedor en el puerto de Mombasa, Kenia, y con destino a Asia. En los últimos 12 meses, las operaciones más grandes de marfil ilícito de África tienen su origen en los puertos de Kenia o Tanzania.
"En 23 años de recopilación de datos de marfil incautado, este es el peor año para las grandes incautaciones de marfil. 2011 ha sido realmente un año horrible para los elefantes", dice el experto de TRAFFIC, Tom Milliken.
Milliken gestiona el ETIS (Sistema de Información sobre el Comercio de Elefantes Sistema de Información), un mecanismo de vigilancia del tráfico ilegal de marfil que opera TRAFFIC en representación de los miembros de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES)). ETIS contiene los detalles de más de 17.000 informes sobre marfil y otros decomisos de productos de elefantes de todo el mundo desde 1989.
"La escalada de grandes cantidades de marfil implicadas en el año 2011 refleja un aumento de la demanda en Asia y la creciente sofisticación de las bandas criminales que están detrás del tráfico. La mayoría de los embarques ilegales de marfil de elefante africano termina en China o Tailandia", asegura Milliken.
Una vez dentro de Asia, la documentación que acompaña la carga en tránsito se cambia para que parezca como una reexportación local, contribuyendo a disimular su origen africano. "Como la mayoría de los grandes decomisos de marfil acaban sin ninguna detención, me temo que los criminales están ganando", añade este experto.

2011/12/09

El año que Zambia quiso enviar un astronauta a la luna

Cuando se habla de la carrera espacial, todo el mundo piensa en la lucha que mantuvieron los Estados Unidos y la desaparecida Unión Soviética por convertirse en la primera potencia capaz de llevar un hombre a la Luna. Sin embargo, no fueron los únicos países que durante la Guerra Fría se lanzaron a la conquista del espacio.
Según cuenta Guillermo Carvajal en “La brújula verde”, a comienzos de la década de los 60, Zambia también desarrolló su propio programa espacial. Su objetivo era enviar un cohete a la luna, tripulado por doce astronautas y dos gatos.
La iniciativa fue ideada y puesta en marcha en 1962 por Edward Makuka Nikoloso, un profesor de ciencias y activista político que fundó la Zambia National Academy of Science, Space Research and Philosophy.
Para poder llevar a cabo el proyecto, Nikoloso construyó un centro de entrenamiento cerca de la capital del país, Lusaka. En esas instalaciones, mientras los futuros astronautas recibían consignas tan disparatadas como no forzar la conversión al cristianismo de los habitantes marcianos, otros operarios se encargaban de construir artesanalmente la nave que debería llevarlos hasta el planeta rojo, que sería impulsada con un sistema derivado de la catapulta.
Como es lógico, el gobierno de Zambia no puso demasiado interés en esta alocada iniciativa, así que Nikoloso solicitó siete millones de libras a la UNESCO para afrontar los costes de su programa espacial. El dinero nunca llegó y el proyecto acabó siendo cuando abandonado cuando Matha Mwambwa, la primera mujer de raza negra que debía llegar a Marte, se quedó embarazada y abandonó el programa con sus gatitos. Pese a la evidente inviabilidad del proyecto, el profesor Nikoloso nunca reconoció que su idea era una utopía. Al contrario, llegó a escribir artículos de prensa en los que la defendía, a la vez que aseguraba que los rusos y americanos espiaban su trabajo y planeaban robarle a la chica astronauta con el objetivo de frustrar su proyecto.

2011/12/05

"África ya exporta tecnología"

"Para los occidentales África vive de la ayuda humanitaria, cuando ya exporta tecnología", asegura Erik Hersman. Este bloguero y emprendedor estadounidense creció a caballo entre Sudán y Kenia, país donde se siente más cómodo que en "ningún otro lado". Si en WhiteAfrican.com detalla "los avances en alta tecnología del continente", en AfriGadget.com muestra con humor "el ingenio de sus ciudadanos para resolver los problemas cotidianos". Hersman también es impulsor del iHub de Nairobi (Kenia). "Fue el primer gran centro de innovación tecnológica, ahora hay unos 50 en el continente, y solo tiene un año y medio de vida". Dice que empezó como un "experimento", aunque ya agrupa a más de 3.000 personas y el modelo se está desplegando por otros países.

A la gente le sorprende, dice Hersman, "que haya tecnología africana que triunfe en el mundo, porque no se lo espera. Aunque sea de forma incipiente ya está ocurriendo". A través del sistema de pagos por móvil Mpesa de Safaricom, filial de Vodafone, por ejemplo, "se han realizado más de 8.000 millones de transacciones financieras". Craft Silicon "exporta desde Kenia sus sistemas bancarios a más de 40 países, europeos y asiáticos principalmente, con los que hace bastante dinero". Sin olvidar el chat móvil Mxit que, dice, tiene tres veces más abonados en Sudáfrica que la red social Facebook y "unos 25 millones de clientes a nivel mundial".
Ushahidi ?testimonio o testigo en suahili? es su propia aportación al cambio. Esta plataforma de código abierto fue creada durante la crisis electoral de Kenia en 2008 para que los ciudadanos informasen en tiempo real de los acontecimientos. Ushahidi recogía la información a través de mensajes sms y correos electrónicos. Datos que automáticamente se visualizaban en un mapa y mostraban la evolución de la crisis en tiempo real. De Kenia saltó al resto del mundo: actualmente hay más de 200.000 desarrollos basados en esta plataforma de mapeo en 132 países. Ha sido útil en el ámbito global, en grandes crisis humanitarias como los terremotos de Haiti y Chile o el tsunami de Japón, pero también a nivel local. En Egipto, por ejemplo, lo han utilizado ahora para monitorizar las elecciones.
Todo empezó, como iHub, de forma accidental. Crearon Ushahidi entre cuatro personas en tres días durante la primera semana de enero de 2008."Estábamos cada uno en su casa chateando por Skype. No pensábamos en cambiar el mundo, simplemente queríamos acceder a la información, porque en esos momentos los medios tradicionales estaban siendo intimidados o no podían acceder a los lugares donde estaban sucediendo las cosas". Hersman y sus compañeros, dice, no inventaron nada nuevo. Los sistemas de mapeo ya existían desde hacía cuatro años, "pero lo utilizamos de forma distinta". En cualquier caso, "si Ushahidi ha cambiado la forma en que fluye la información es por la gente ordinaria, que sabe lo que ocurre en su entorno. Sin su implicación, los problemas no se resuelven, porque la tecnología solo es el 10% de la solución. Lo hemos visto en la primavera árabe, porque gracias a este tipo de tecnologías la gente resuelve sus problemas. este es el gran cambio, aunque de momento solo veamos la superficie".
África también es un gran mercado. "Los costes para acceder a Internet se están reduciendo, hay una masa critica de gente con móvil en el bolsillo, pero sobre todo un número creciente de personas que pueden pagar por servicios y productos. Piensa que el 34% de los africanos son de clase media, según datos del Banco Mundial. Por eso empresas como Intel, Google o Facebook, abren oficinas allí. Si lo hacen es porque el continente está creciendo un 5% de media". El móvil, en su opinión, es uno de los artífices del cambio. "Es dificil evaluar su impacto, porque lo ha transformado todo: la vida en los pueblos, en las ciudades, la forma de trabajar, de divertirse... Cuando fui a vivir a África tardé tres años en conseguir teléfono fijo. ¡Imagínate lo que suponía para una empresa! Hoy la mayoría va con móvil. No hay ninguna tecnología tan rompedora".

2011/12/02

Los humanos salieron de África 35.000 años antes de lo pensado

El momento en el que los humanos salieron de África para colonizar nuevos horizontes es una de esas preguntas clave, tan decisiva para entender la evolución humana como pueda serlo la búsqueda del bosón de Higgs para dibujar el origen del universo. En los últimos años, las teorías se multiplican y cada una de las propuestas científicas se va perfilando con nuevos hallazgos que ayudan a precisar cómo y cuándo se abrió la puerta. El publicado ayer en la revista PLoS ONE perfila un escenario novedoso, en el que habría que ubicar el primer viaje culminado con éxito de los humanos anatómicamente modernos (Homo sapiens) 35.000 años antes de lo que aseveran los libros de historia.
El primer asentamiento consolidado fuera de África se debería datar hace alrededor de 106.000 años, en lugar de los 70.000 años considerados hasta ahora como el momento más plausible. Y todo gracias a un montón de piedras troceadas y talladas de una forma muy particular, unas piedras que estos humanos dejaron atrás hace miles de años para que el equipo de Jeffrey Rose, investigador de la Universidad de Birmingham, les encontrara un parecido sorprendente. Las lascas descritas en este hallazgo se encontraron al sur de la península arábiga, en lo que actualmente es la Sultanía de Omán. Esas herramientas rocosas están talladas como sólo se hacía al otro lado del mar Rojo, en África, en unos asentamientos nubios (de la Edad de Piedra Intermedia) que se extendieron por un largo periodo de tiempo, desde hace 128.000 años hasta hace 74.000, en el valle del Nilo y en algún punto del llamado cuerno africano.

Los investigadores, sirviéndose de un sistema relativamente novedoso de datación (denominado Luminiscencia Ópticamente Estimulada), concluyen que esas herramientas tienen 106.000 años (con un margen de error de nueve años). Mucho antes de cuando se suponía que debían haberse asentado estos humanos allí tras cruzar el mar Rojo. Ya se había dado con otros asentamientos a ese lado del mar, pero estos tienen una particularidad: habían dado el paso con éxito. Habían colonizado la península de Arabia.
"Los restos evidencian que esas piedras eran de allí, no habían sido llevadas. Las tallaron in situ, porque era ese el lugar donde vivían estos humanos", explica el paleoantropólogo Enrique Baquedano, ajeno al hallazgo. "Llama la atención la gran cantidad de herramientas talladas con esta técnica encontradas en ese lugar; sin duda se trata de un descubrimiento muy serio", juzga Baquedano, codirector del yacimiento tanzano de Olduvai. Según su perspectiva, el hallazgo es riguroso pero la datación exacta del mismo puede ser algo "precipitada". Este experto considera que el nuevo sistema para determinar la fecha de estas herramientas todavía necesita ajustes. "No hay restos fósiles humanos ni animales, hay muy poca información para aventurar una fecha tan llamativa", asegura.
"Todavía estamos viendo la crema de lo que puede ser esta propuesta científica defiende necesitamos información paleobiológica y contextos más claros". No obstante, Baquedano considera que Rose y los suyos han abierto una línea de investigación muy jugosa: "Oriente Próximo y Arabia están revolucionando la investigación. La evolución humana está pendiente de lo que encontremos allí".

2011/11/25

Cómo una abeja puede controlar un elefante

Durante años se ha venido intentando resolver un grave problema en los sitios poblados por elefantes en África: los conflictos causados por el ingreso de estos animales a tierras de agricultores.
Una científica británica parece tener la respuesta. Lucy King ganó un prestigioso premio internacional por mostrar cómo las abejas pueden ser utilizadas para reducir los enfrentamientos entre elefantes y seres humanos.

King tuvo la idea de construir cercas con panales para mantener a los animales fuera de áreas cultivadas.
Los elefantes tienen miedo de las abejas, que pueden picarlos en la parte interior de la trompa, y huyen cuando escuchan el zumbido de esos insectos.
Lucy King fue galardonada con el premio de investigación del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA, que fue concedido en Bergen, Noruega, durante el encuentro de la Convención sobre Especies Migratorias. El premio es concedido cada tres años a una tesis de doctorado excepcional en el campo de la conservación.
La tesis de investigación de King, quien nació en África, fue supervisada por la Universidad de Oxford.

Espantados

"El trabajo de la Dra. King muestra cómo trabajando junto, en lugar de contra la naturaleza, ésta puede proveer a la humanidad con muchas soluciones a los desafíos enfrentados por países y comunidades", dijo Achim Steiner, director ejecutivo del PNUMA.

"Ofrece una solución inteligente a un problema de antaño, confirmando al mismo tiempo la importancia de las abejas y contribuyendo en forma muy creativa a la conservación del mayor animal terrestre para generaciones actuales y futuras".
"Recibir este premio es un reconocimiento maravilloso, especialmente luego de cinco años de andar de un lado para otro en el campo", dijo King a la BBC.
Parte del premio fue hablar sobre el proyecto ante los delegados del encuentro en Bergen.
King explicó cómo, junto a su equipo en Kenia, comprobó que el 90% de los elefantes huye al oír el zumbido de abejas y alertan a otros elefantes sobre el peligro.
Los investigadores decidieron poner en práctica su descubrimiento, construyendo barreras en las que se entretejen panales.
Un proyecto piloto incluyó a 34 fincas agrícolas protegidas por estas ceras. Cuando los elefantes intentaban cruzarlos, movían los panales y acababan huyendo espantados por las abejas.
El uso de las barreras se extendió luego a comunidades en tres distritos en Kenia y los agricultores incluso aumentaron sus ingresos vendiendo miel.

De África a Asia

"La Dra. King diseñó una solución que considera las necesidades de los animales migratorios y los beneficios económicos a las comunidades locales vinculadas a la conservación de especies", señaló Elizabeth Maruma Mrema, secretaria ejecutiva de la Convención de Especies Migratorias, CMS por sus siglas en inglés.

A medida que aumenta la población en África, la competencia por espacio entre los elefantes y los seres humanos se está intensificando y produciendo víctimas mortales en ambos bandos.
Y lo mismo está sucediendo en regiones de Asia. En Sri Lanka se estima que cada año cerca de 60 personas y 200 elefantes mueren en estos conflictos.
Lucy King está trabajando ahora con la ONG Save the Elephants, para determinar si la técnica de las abejas podría ser aplicada en otras partes de África y eventualmente en Asia.
"No puedo decir con certeza si esta solución funcionará en todas partes, pero potencialmente podría llevarse al sur del continente africano, donde se encuentran las mayores poblaciones de elefantes y los mayores conflictos con agricultores", dijo King a la BBC.
"En el caso de Asia, hay varios factores que debemos considerar. Se trata de especies diferentes tanto de elefantes como de abejas, llueve mucho y hay animales como osos que adoran la miel".
"Pero me interesaría mucho poder trabajar con alquien que conozca bien el medio asiático y comprobar si también allí podrían funcionar estas barreras".

2011/11/18

Un fondo buitre planea sobre las arcas de la RD del Congo

Varias ONGs del Reino Unido están intentando frenar a un especulador estadounidense a quien acusan de querer aprovecharse de la delicada situación económica de la República Democrática del Congo (RDC).
Peter Grossman dirige un "fondo buitre" que compra deuda de países pobres a precios bajos para luego reclamarles diez o incluso cien veces el valor que pagó.

Este tipo de fondos compran la deuda cuando está a punto de vencer y luego demanda ante los tribunales todo el valor de su crédito más los intereses.
Sus críticos aducen que esto convierte en rehenes a los países pobres y les impide escapar de la pobreza.
Las ONGs han recurrido ante los tribunales para impedir que Grossman reciba US$100 millones de los fondos públicos de la RDC.

Postguerra

La RD del Congo está aún recuperándose de una guerra de cinco años que causó alrededor de tres millones de muertes, como resultado directo del conflicto o de las enfermedades y la malnutrición.
Aunque la guerra terminó oficialmente en 2003, el conflicto es aún un gran problema en las regiones del este congolés. La mayoría del país vive en la pobreza y para también sufre ahora los efectos de una epidemia de cólera.
El fondo de Naciones Unidas para la infancia, Unicef, le dijo a la BBC que, con millones de congoleños sin acceso al agua potable y con brotes de cólera azotando el país, US$100 millones invertidos en la potabilización de agua podrían salvar la vida de unos 200.000 niños.

Una investigación de la BBC y el diario británico Guardian reveló que la deuda congoleña fue contraída hace 30 años por Zaire, antiguo nombre de la RDC, cuando recibió un préstamo de la extinta Yugoslavia.
El fondo del estadounidense Grossman, FG Hemisphere, le compró esa deuda al gobierno de Bosnia por US$3,3 millones.
Se la vendió ilícitamente el exprimer ministro bosnio, Nedzad Brankovic, que está siendo investigado por corrupción por unas acusaciones no relacionadas.
Cuando la BBC le preguntó a Grossman si pensaba que era justo embolsarse US$100 millones del Congo por una deuda que le costó US$3 millones, Grossman dijo: "Si, claro que sí", pero negó haber pagado solo US$3 millones.

Demandas desestimadas

Aunque los fondos buitres fueron ilegalizados en Reino Unido el año pasado, FG Hemisphere, interpuso una demanda en Jersey, uno de los territorios dependientes de la Corona Británica, aprovechando que allí no se aplica esa ley.
Oxfam, Christian Aid y Jubilee Debt Campaign han solicitado a Jersey que cree una ley similar a la de Reino Unido.
En EE.UU. los tribunales están rechazando cada vez más los recursos de fondos buitres. Estos fondos también intentan obtener sus créditos por medio de demandas en sus países de origen a las empresas que negocian con los países pobres.
Este año, China ha bloqueado un intento de FG Hemisphere de demandar el dinero del Congo a China Railways.

Advierten sobre inminente epidemia que ataca a la yuca en África

La Organización para la Alimentación y la Agricultura de Naciones Unidas (FAO, por sus siglas en inglés) advirtió este miércoles que un virus de la yuca está al borde de provocar una epidemia en África oriental.
Una nueva variedad de enfermedad de la yuca infesta una vasta zona de la región, especialmente en la zona de los Grandes Lagos, y pone en peligro una fuente vital de alimentos e ingresos, informa la FAO.

Los expertos de la organización afirman que la raya marrón de la yuca está a punto de convertirse en epidemia, y pidieron medidas urgentes para ayudar a los agricultores y a los mejoradores.
La yuca - también conocida como mandioca, casava y guacamota- es uno de los cultivos más importantes del mundo, especialmente en Sudamérica y África. Proporciona hasta un tercio de la ingesta de calorías para muchas personas y es de especial importancia en África, ya que crece en tierras pobres y de poca lluvia.
En Ruanda, un análisis del Instituto Nacional de Investigación Agrícola en el año 2010 mostró una tasa de 15,7% de la infección en las variedades locales y 36,9% en las variedades mejoradas.
"Ninguna de las variedades de yuca que se están distribuyendo actualmente a los agricultores parece ser tolerante a los efectos de la raya marrón de la yuca. Es urgente obtener información del alcance y gravedad del brote, y apoyar las inversiones para determinar las variedades tolerantes a esta enfermedad y estrategias de adaptación para los agricultores", dijo Jan Helsen, dirigente de la Iniciativa Regional para la Yuca en África oriental y central de la FAO, financiada por la Unión Europea.

Signos ocultos

Uno de los retos que afrontan los que están tratando de frenar la propagación de la enfermedad es su detección oportuna .
La yuca representa hasta un tercio del total de la ingesta de calorías de la población de países como Burundi, Ruanda, Uganda y la República Democrática del Congo, señala la FAo en un comunicado.
La enfermedad apareció por primera vez en Uganda en 2006, pero en los últimos meses se ha trasladado a Burundi y la República Democrática del Congo por primera vez.
Como explica el corresponsal de ciencia de la BBC Matt McGrath, un problema particular con este virus es que los agricultores no se dan cuenta de que el cultivo está enfermo hasta que lo cosechan, ya que los síntomas sólo aparecen en las raíces.
Ninguna de las variedades de yuca actuales parece ser resistente a la raya marrón.
"La enfermedad se manifiesta de diferentes maneras, de acuerdo a las condiciones locales. En algunos casos sólo presenta síntomas en las raíces. Se pueden encontrar raíces podridas en una planta aparentemente sana al cosecharla, con consecuencias obvias para la seguridad alimentaria", explicó Helsen.
Los científicos dicen que están jugando una carrera contra el tiempo con esta cepa particular del virus y piden un rápido aumento de la financiación para mejorar la vigilancia y de investigación y desarrollo de nuevas variedades de la cosecha.

2011/11/16

Libia reescribe su historia tras la caída de Gadafi

Un equipo de investigación de la Universidad de Leicester (Reino Unido) acaba de romper con algunas de las teorías más asentadas sobre la historia de Libia. Los científicos liderados por el profesor de Arqueología Romana David Mattingly han descubierto en pleno desierto del Sáhara, al suroeste del país, restos de la civilización de los garamontes, un pueblo de origen bereber que habitó el norte de África en la antigüedad.
Mattingly asegura que se trata de "uno de los descubrimientos más extraordinarios, pues posiblemente estamos hablando de la primera civilización preislámica nativa, antes de que los griegos y los romanos colonizaran el norte de África". Según explica, en torno a la ciudad antigua de Garama (Germa), habría germinado una especie de estado organizado con ciudades y pueblos, dotado de un lenguaje escrito propio y con los oasis como epicentro de su actividad, aprovechando cierta vanguardia tecnológica para la explotación agraria.
El descubrimiento se produce de manera tardía por el manifiesto desinterés del régimen de Gadafi y, en este sentido, el arqueólogo afirma que "estos asentamientos no estaban ni identificados ni registrados" por el Gobierno libio. Ha sido ahora, gracias a los trabajos de Mattingly y su equipo, volcados en la región desde hace más de cuatro años, y a la financiación de casi 2,5 millones de euros por parte de la Unión Europea, cuando se ha producido el hallazgo. En este proyecto de investigación han participado otras entidades internacionales, como la Fundación Leverhulme, la Sociedad de Estudios Libios y la Fundación GeoEye.
Desde el punto de vista de Mattingly, "se trata de un nuevo comienzo para el Servicio de Antigüedades de Libia" que, a pesar de haber estado involucrado en todo el proceso arqueológico, venía siendo ninguneado por el régimen del dictador, privado de los recursos más esenciales. El profesor inglés reivindica la importancia cultural de cara al pueblo libio y confía en que "el nuevo Gobierno le otorgue al hallazgo la importancia que merece", resolviendo estas carencias.
A pesar de que la ubicación del yacimiento, para el que Mattingly solicita protección, se encuentra en pleno desierto del Sáhara, el científico apuesta por que este juegue "un papel clave en la economía del país con la activación del turismo una vez que se estabilice la situación políticamente". Asimismo, Mattingly no duda en afirmar que "es muy importante que se cuente la historia en las escuelas de Libia, que los niños conozcan quiénes fueron sus antepasados. Los garamontes deberían ocupar un espacio central en la historia, en la herencia cultural que estudian los niños libios en los colegios".

No eran 'bárbaros'

La ayuda de las imágenes vía satélite ha jugado un papel fundamental en las investigaciones de la Universidad de Leicester, dada la extensión del área a estudiar y lo inhóspito de la región en la que floreció la civilización garamonte. La confirmación de los restos sobre el terreno se produjo a principios de año, pero el estallido de la guerra contra el régimen de Gadafi obligó a los arqueólogos a regresar a Reino Unido, aunque ya se prepara una expedición de vuelta a Libia.
Los hallazgos dan un vuelco a las teorías tradicionales en torno al pueblo de los garamontes, hasta ahora considerados bárbaros nómadas. Sin embargo, los resultados de las investigaciones han revelado todo lo contrario: "Las construcciones que hemos encontrado al suroeste de Libia nos hacen pensar que se trataba de un pueblo sedentario y agricultor", apunta Mattingly.
El equipo británico ha hallado más de un centenar de granjas fortificadas y aldeas construidas siguiendo la estructura de castillos, así como varias ciudades que podrían datar de entre el siglo I y el IV antes de Cristo. El trabajo de campo del pasado mes de febrero descubrió ladrillos de adobe y paredes del castillo en pie de hasta cuatro metros de alto. Junto a las fortalezas, más restos de viviendas, cementerios con los enterramientos marcados con montones de piedras e, incluso, pozos de riego.
A este respecto, Mattingly subraya lo avanzado de este pueblo, "capaz de construir sofisticados sistemas de riego", lo que descartaría tanto su carácter nómada como su carácter agresivo frente a los romanos. De hecho, el experto asegura que "los garamontes fueron pioneros en el comercio transahariano pero también con otras culturas mediterráneas como los propios griegos y romanos", según los restos hallados.

2011/11/14

El 'Bill Gates' ghanés

Innovar es resolver un viejo problema con nuevas tecnologías. Cada quien en sus propios términos, una tras otra, todas las personas que interrogué en África me dieron casi igual definición de la palabra "innovación".

Concepción bastante alejada de la que uno encuentra en Silicon Valley, donde, por lo general, se asocia a la comercialización de nuevos productos o de procesos mejorados y más eficientes. La paradoja de este modelo dominante consiste en que incluso las innovaciones más aclamadas, más populares, son aquellas que solucionan problemas que aún no existen y por tanto crean necesidades que hasta ahora no teníamos.
Es grande la tentación de aventurar que, por tratarse de problemas de otras latitudes, las innovaciones africanas no nos conciernen y habría que ignorarlas. Grave error: en primer lugar, porque existen; segundo, porque se asocian a un mercado de más de mil millones de personas (el que más rápido crece), y por último, porque las innovaciones de África pueden revelarse extremadamente útiles en otras partes.
Tomemos el caso de la tan común tarjeta de crédito. ¡Apenas si ha cambiado desde los años cincuenta del siglo pasado! Si los ejecutivos de Visa, MasterCard, American Express y otros quisieran hacernos la vida más fácil, les convendría darse una vueltecita por África.
M-Pesa
A cualquiera de esos titanes de la economía le sorprendería la aparición de M-Pesa en Kenia: una plataforma que abre nuevos horizontes para la circulación de dinero en la cual podrían inspirarse. No se trata -como creía- de un sistema de banca móvil, sino de una tecnología que permite transferir dinero entre teléfonos. La diferencia es radical: no requiere de una cuenta bancaria.
Justamente de la carencia de instrumentos crediticios partieron los innovadores kenianos. "Hace cuatro años, cuando lanzamos M-Pesa [pesa significa dinero en swahili, y M-Pesa, dinero móvil], solo una pequeña fracción de la población disponía de cuenta bancaria, ya que abrir una cuesta caro", me dijo Waceke Mbugua, responsable de mercadeo en Safaricom.co.ke, primer operador de telefonía móvil en Kenia y promotor del proyecto.
"Un gran número de habitantes viven en las grandes ciudades y envían cada semana dinero a los familiares que radican en el interior. A falta de acceso al sistema bancario, debían llevarlo ellos mismos o confiar en que el fajo de billetes que entregaban al conductor de un autobús llegaría íntegro a manos de sus parientes cuando pasara por su pueblo".
Lanzado como proyecto piloto en marzo de 2007 (gracias a una inversión de Vodafone y a la ayuda del Gobierno danés), el servicio ya suma 15 millones de usuarios, el 80% de la base de Safaricom, que detenta el 75% del mercado de voz en el país. Más impresionante aún: "Los fondos que hoy circulan a través de M-Pesa equivalen al 25% del PIB", asegura Sitoyo Lopokoiyit, economista de la empresa. La mayoría, en transacciones de medio dólar estadounidense. Y añade: "Desde el inicio, nuestro servicio ha transferido 11.500 millones de dólares. No se aplican intereses ni se hacen préstamos, y las transacciones se realizan de manera instantánea. En raras ocasiones el dinero disponible permanece intacto más de una semana".
Hoy día, los kenianos lo utilizan para pagar cuentas de electricidad, agua, televisión por cable, los pagos del colegio de sus hijos y hasta pueden comprar en varias tiendas, incluso algunas muy pequeñas. Retiran o depositan dinero gracias a una red de más de 2.000 puntos de venta distribuidos en todo el país donde compran esas tarjetas que, al rascarse, revelan el código con el que alimentarán sus cuentas.
"M-Pesa facilita la vida de la gente y le ayuda a ahorrar dinero en desplazamientos", puntualiza Waceke Mbugua.
Safaricom equipa en la actualidad cajeros automáticos (ATM) capaces de entregar dinero a una persona, cuya instrucción es enviada desde un móvil. Hace poco lanzó una tarjeta de débito que puede cargarse desde un teléfono, desvinculada de bancos, pero utilizable fuera del país.
Tengo cuentas bancarias (nada cuantiosas) y tarjetas de crédito de las que la mayoría de los kenianos carecen, pero la verdad es que cuando un usuario llegó a recargar su móvil a uno de los puntos de venta en Nairobi y me explicó que compraba verduras y pagaba la electricidad con su aparato, tuve la certeza de que el más moderno no era quien uno habría pensado.
ShopAfrica53
Lo que más deslumbra, obviamente, es cuando la innovación proviene de los propios africanos. Ahí proliferan las pequeñas iniciativas, muchas con base en el uso de SMS que suple los servicios que normalmente se consiguen en la web -ver el artículo Los insospechados recursos de los SMS en página siguiente-.
Pero existen además iniciativas muy ambiciosas, lanzadas por individuos con perfil continental.
A Herman Chinery-Hesse me lo presentaron como el Bill Gates de África. No posee ni por asomo la riqueza ni el poder del fundador de Microsoft. Aunque hace 20 años creó una gran compañía de software para las PME en Ghana. Y en la realidad es mucho mejor de lo que la mala comparación pudiera sugerir: abierto, cálido, dueño de una visión clara de lo que aspira a hacer por su país y su continente.
Después de graduarse de ingeniero en Estados Unidos, Chinery-Hesse regresó a su tierra en 1990 para fundar SoftTribe.com, que vende software para empresas. Les facilita administrar sus puntos de venta, sus relaciones con los clientes o el trámite para reservar pasajes (en el caso de empresas de transporte). Hoy gana "millones de dólares", reconoce sin entrar en más detalles.
Su éxito, sin embargo, alcanzó el punto donde ya no era viable crecer más. ¿Por qué? El 70% de la economía está bajo control del Gobierno, y las multinacionales cuentan con los medios para ejercer presión a fin de poder servirse con la cuchara grande, valiéndose incluso de sus embajadores de ser necesario. Situación empeorada por el modelo tradicional de contratos anuales y de grandes equipos técnicos. "A esto nos enfrentamos cuando quisimos construir un Microsoft ghanés", me explicó.
Para sortear tales inconvenientes subió SoftTribe a las nubes. Su software está disponible en la web, y sus clientes apenas necesitan un ancho de banda muy limitado para bajar los módulos que necesiten.
En vez de un contrato anual, les solicita una módica cuota (50 dólares) y/o un pago en función de su utilización (pay as you go). A una compañía de autobuses, por ejemplo, le propone apenas un cargo extra del 1% por boleto. Es menos oneroso para el cliente y, con márgenes pequeños en cada transacción, genera una cantidad apreciable de dinero. "Para cambiar África hay que cambiar la mentalidad de la mayoría de los africanos, dirigiéndose a la base de la pirámide". La pirámide de su interés es la de las empresas.
No satisfecho con sus éxitos, Herman Chinery-Hesse está lanzando un proyecto todavía más ambicioso. Se trata de ShopAfrica53.com, una especie de centro comercial en línea, cuyo objetivo es "servir de intermediario a las pequeñas empresas africanas", me contó en su veranda.
El sistema se basa en tres pilares. El primero, un sitio web por país, que permite a los comerciantes anunciar sus productos, y a los clientes, ordenarlos. Todas las transacciones se realizan a través de SMS.
El segundo es un sistema de crédito bautizado Tarjeta de Libertad Africana (africanlibertycard.com). Esas tarjetas que se raspan, pueden adquirirse en distintos puntos de venta para transferir dinero entre móviles, pagar facturas y disponer de fondos para gastar en ShopAfrica53.
El tercero es una de las enormes astucias de Chinery-Hesse. Toda la logística se apoya en los correos tradicionales (DHL y otros Fedex), adiestrados en ir a buscar un producto al monte y despacharlo a Zaragoza, Toulouse o Miami. En ese rúbrica, todo se hace también a través de SMS. ShopAfrica53 solo tiene que poner el dinero a disposición de los proveedores a final de mes. Cuando inquirí sobre el coste de sus operaciones, Chinery-Hesse respondió con una sonrisa de oreja a oreja: "La diferencia entre los salarios de África y los de Europa o Estados Unidos nos deja un margen respetable, del que sacamos provecho".
Reconoce que hará falta cierto tiempo para que su proyecto se imponga: "Tal vez cinco años", pero será una cosa enorme. Más efectivo que lo que cualquier ayuda del exterior habría logrado durante el mismo lapso. "No sé de ningún país que se haya desarrollado gracias a la ayuda externa. Es una cortina de humo. Nosotros lo haremos mejor y, además, con dignidad", afirma rotundo.
La palabra "dignidad", soltada en medio de una amena conversación, revela una conciencia social, política, presente en todos mis interlocutores. De hecho parece que hoy en África no puede emprenderse nada... sin ser emprendedor social y, en muchos casos, hasta activista.
Si Steve Jobs hubiera sido africano...
Los elementos para entender la convergencia cada vez más creciente entre activistas y empresarios me los dio Bright Simmons, un empresario ghanés de 29 años.
Con Mpedigree.org, Bright innova en un ámbito que podría salvar miles de vidas: detecta medicamentos falsos gracias a los SMS enviados directamente por los compradores a una base de datos que se mantiene rigurosamente al día. Estima que en su país el 60% de las medicinas en venta son o placebos o veneno, un fenómeno muy común en África. Mpedigree se encuentra todavía en su fase inicial, pero estima que para finales de año cubrirá el 8% de los medicamentos en el mercado nacional.
Se trata de una empresa sin fines de lucro basada en un modelo económico sencillo: tomar muestras entre el 0,5% y el 1% de cada caja de medicinas. Los laboratorios están encantados de participar en un sistema que evite la falsificación.
Lanzar en África un proyecto de tal naturaleza toma demasiado tiempo. De hecho, agrega Simmons, "hace falta crear todo un ecosistema que allane el terreno donde una innovación florezca". En su caso, por ejemplo, tuvo que luchar para obtener un mismo y único código de acceso para todos los operadores de Ghana y el resto del continente. Los laboratorios farmacéuticos han aceptado revisar las cajas de sus medicamentos y añadir un código oculto bajo una superficie que, al rasparse, revela un código que el consumidor envía por SMS para verificar si se trata de una falsificación.
La mayoría de las veces, infraestructura y valor (capital) son insuficientes. Esta limitación explica por qué África requiere de emprendedores sociales para innovar. "La gente detrás de Mpedigree han sido activistas. Está en el ADN de nuestra compañía", explica. Y añade: "Si Steve Jobs hubiera sido africano, habría sido un emprendedor social".

Los insospechados recursos de los SMS

Esta primera vuelta por África me muestra una gran verdad: las nuevas tecnologías cuentan menos que los problemas que resuelven. Todos mis interlocutores africanos coinciden al respecto.
El ejemplo más impactante es, sin duda, el uso sistemático y extremadamente ingenioso que hacen de los SMS, esos mensajes de texto corto que casi todos los teléfonos del mundo pueden enviar y recibir.
La idea general consiste en poner al alcance de quienes no pueden comprar un smartphone los servicios más avanzados, por lo regular a disposición de cualquiera en la web. Una idea que comienza a ser fuente de inspiración en los países desarrollados.
He aquí tres casos tomados de Senegal, Ghana y Kenia, países donde la penetración de la telefonía móvil todavía está lejos del 100%, pero el número de smartphones asciende apenas a miles o decenas de miles.
En Senegal, Manobi ofrece tanto servicios de geolocalización a los productores de cacao como a la infraestructura hidráulica. "Es casi imposible acceder a Internet en las zonas rurales", explica Emmanuel Bocquet, director técnico de la empresa, "pero los SMS llegan a todos los lados". Basta con asegurar la interfaz entre los teléfonos y las bases de datos. Una vez configurado, el sistema permite el intercambio de información. "Si se descompone una de las bombas de agua donada por Unicef, alguien envía un SMS a la base de datos de Manobi, la cual inmediatamente avisa a un especialista", agrega Bocquet.
La tecnología de NandiMobile, una compañía ghanesa, facilita que las empresas conozcan la opinión de sus clientes y se comuniquen con ellos. "Relaciona las preguntas formuladas por el usuario a respuestas previas o grabadas de antemano. Poco a poco aprende a responder por sí misma", dice Edward Tagoe, director de negocios y desarrollo. Esta facultad permite que las empresas permanezcan atentas a los comentarios de sus clientes, igual que sus homólogas estadounidenses o europeas. NandiMobile recibió este año el Premio a la Mejor Empresa en la conferencia Launch celebrada en San Francisco.
En Nairobi, m-farm ayuda a los granjeros a saber el precio vigente de sus productos, tanto en el mercado interno como en otros sitios del país. "El agricultor envía un SMS al código 3535 con el nombre del producto y la ubicación de su interés, y en menos de 10 segundos recibe el precio, que le ayuda a decidir dónde vender", me explicó Linda Kwamboka, cofundadora de m-farm.
Un SMS que dice: precio, col, Embu (una ciudad), obtiene el precio de un saco normal -de 126 kilos de col- en Embu. Pero si luego redacta: precio, col, Nairobi, sabrá si le conviene más ir a vender a la capital. Los otros dos módulos permiten "comprar juntos" o "vender juntos", siempre por SMS.
Dicho sistema no es exclusivo de África.
La empresa Dotgo.com acaba de internarse en la misma brecha... pero en Estados Unidos. Si el usuario envía un SMS a The New York Times, recibe los títulos de la sección de su interés. Funciona de modo semejante para conocer los horarios de los próximos trenes de Nueva Jersey. Y parece ser la mejor manera de registrarse en Foursquare cuando uno llega a algún sitio. Gracias a los SMS, los propietarios de un smartphone obtienen respuestas más rápidas y otros ganan en posibilidad de interacción sin el elevado coste de aparatos sofisticados y planes de precios descomunales.
Lindo ejemplo de cómo las tecnologías utilizadas en África pueden resolvernos problemas.

2011/10/31

¿Podría África ser el granero del mundo?

La visión que se despliega a lo largo de la llanura de Mkshi, en Zambia, difiere de la imagen lúgubre que a menudo se tiene del África moderna.
A tres horas de la capital, Lusaka, las espigas de trigo resplandecen bajo el sol tropical.
Una cosechadora combinada se mueve metódicamente de un extremo a otro del campo inmenso.
Muy cerca, unos aspersores riegan un cultivo de soja.
Uno podría pensar que se encuentra en las llanuras del centro de Estados Unidos o en los campos de cereal de Ucrania.
Esto son campos generosos, una África productiva que contrasta con la narrativa de conflictos y hambre que domina nuestra idea del continente.
"Sólo con incrementar las cosechas hasta el 80% de la media mundial, África se convertiría en un exportador neto de comida. Creemos que África puede alimentarse a sí misma y al resto del mundo también", asegura Dabney Tonelli de la empresa británica Chayton Africa, que gestiona una explotación de 12.000 hectáreas en Mkushi.

Explotaciones comerciales

Chayton arrendó la tierra por un periodo de 14 años del gobierno de Zambia con la promesa de aumentar la producción, crear puestos de trabajo para los habitantes locales y enseñar las técnicas agrícolas a los pequeños agricultores de subsistencia que cultivan parcelas en la zona.
Tras años de corrupción y desgobierno, Zambia, que recientemente celebró elecciones, es visto como un remanso de tranquilidad en el continente.
"El ambiente político es estable y las condiciones para la agricultura en cuestión de clima y suelo son excelentes. Para el inversor agrario, Zambia es el lugar en el que uno quiere estar", asegura Tonelli.
Agricultores blancos que fueron expulsados de Zimbabwe, quienes perfeccionaron técnicas de cultivo intensivo durante décadas, fueron contratados para gestionar las operaciones de Chayton.
El director de la explotación en Mkushi, Stuart Kearns, se convirtió en agricultor siendo un adolescente después de que mataran a su padre en la guerra civil de la antigua Rhodesia.

Promesas y obstáculos

A pesar de su experiencia en Zimbabwe, es optimista sobre el futuro de la agricultura en Zambia.
"Hay un potencial enorme aquí y creo que la clave en África es intentarlo una y otra vez. Eso es algo que se aprende cuando se crece aquí".
Chayton promete "crear trabajo, introducir técnicas agrícolas sostenibles… suministrar apoyo y entrenamiento a los campesinos locales".
Pero hay obstáculos importantes: infraestructuras pobres y la burocracia entorpecen que Zambia se convierta en un gran exportador de comida al continente. De momento, Chayton sólo produce para el mercado interno.
En una entrevista con el programa de la BBC Newsnight, el vicepresidente del país, Guy Scott, quien también es agricultor, se mostró escéptico ante algunos de los reclamos realizados por la compañía.
"Soy muy escéptico porque estuve por allí mucho, sé cómo son las propuestas y las justificaciones en el juego de las inversiones y diría que el 90% de lo que se promete resulta no ser cierto… No necesariamente por un interés económico o un fraude deliberado".
"Creo que las personas esperan lo mejor. Creen que va a funcionar y el gobierno también. Entre todos nos esperanzamos. Y entonces te encuentras con que no tuvimos tanto impacto social ni económico como habíamos esperado".

Riesgos para la población

Scott teme las consecuencias sociales de una posible pérdida de puestos de trabajo debido a que la mecanización del campo desplace a la mano de obra local.
"Pienso que el principal problema es que la población de Zambia es cuatro veces mayor que su economía. Y creo que ése es el peligro de la agricultura intensiva a gran escala. Tiende a ser intensiva desde el punto de vista del capital y a no crear puestos de trabajo. Al mismo tiempo tiende a desplazar a las personas que pierden su trabajo en la agricultura de subsistencia".
Chayton reconoce que sus métodos modernos de cultivo ya produjeron pérdidas de empleos, pero insisten en que a medida que el negocio crezca se crearán puestos de trabajo en empresas relacionadas.
"Sí, a corto plazo, parte de los empleos poco cualificados desaparecen como consecuencia de la mecanización, pero estamos construyendo un negocio a gran escala que a medio plazo creará otros trabajos", señala Tonelli.
"Tenemos que ser capaces de formar personas para que hagan labores cualificadas que les permitan desarrollar su carrera en la agricultura o encontrar un empleo en otro sector".
Los agricultores de subsistencia con los que se habló para elaborar este reportaje se mostraron favorables al principio de la agricultura comercial, pero todavía está por ver cómo les reportaría algún beneficio.
Chayton sólo lleva operando en la zona durante un año, pero Brighton Marcikatebe, un granjero de Asa, un pueblo cercano, asegura que los agricultores comerciales no ayudaron a sus vecinos más pequeños.
"Si vienen con ayuda, la aceptaremos, pero de momento no ayudaron", indica.

Los lugareños también se quejan de que no tienen acceso al capital. La mayor parte de la tierra en Zambia es propiedad del Estado y es administrada por los jefes locales.
Sin títulos legales, los pequeños granjeros no pueden obtener créditos bancarios con los que comprar maquinaria y expandir su producción.
Pero según Scott, los agricultores de Zambia pueden esperar un trato mejor.
"Fuimos elegidos por los zambianos y sus intereses son lo primero. Si sus intereses pueden coincidir con los de los mercados internacionales, entonces estupendo, pero ak fin y al cabo somos responsables de su protección, de su protección social".
Hacer que el cumplimiento de ese compromiso sea compatible con los acuerdos firmados con inversores extranjeros requerirá de una habilidad política considerable.

2011/10/12

China trata de mejorar su imagen como empleador en África

 La presencia de empresas chinas en Zambia, y el modo en el que tratan a los trabajadores africanos, fueron una cuestión de fondo en las recientes elecciones de ese último país. En consecuencia, algunas empresas chinas dicen que están tomando medidas para hacerle frente al problema.
Hace un año Taska Chinko, empleado en una mina de carbón, era parte de un grupo de trabajadores zambianos reunidos fuera de las residencias de los gerentes chinos de la mina de carbón Collum, en Zambia.

Chinko dice que, en lugar de tratar de hablar con los trabajadores, que exigían mejores salarios, los gerentes chinos fueron a buscar sus pistolas de aire comprimido.
Chinko todavía no puedo creer lo que pasó después.
"Cuando vimos a los gerentes salir con armas de fuego nos sentimos muy mal, porque nosotros no somos animales, no tienen que usar armas de fuego para mantenernos alejados".
Hubo disparos y 12 mineros resultaron heridos, dos de ellos de gravedad.
Los mineros respondieron con disturbios y saqueos a un complejo chino, exactamente lo que los gerentes chinos querían evitar.
Con el tiempo, las cosas se calmaron. Los heridos recibieron compensaciones y los gerentes chinos fueron detenidos, aunque pocos meses después el caso fue olvidado y los gerentes regresaron a China.
Zambia reconoce que los chinos han llevado al país dinero y trabajos, muy necesarios, y siguen invirtiendo en una región rica en recursos naturales.

Pero el incidente en la mina Collum no se ha olvidado en Zambia, cuyos trabajadores sienten que su gobierno ha tenido una relación demasiado estrecha con los inversores chinos.
El mes pasado resultó elegido un nuevo presidente, Michael Sata, quien durante años habló sobre la necesidad de obtener un trato más justo para los trabajadores de Zambia, y para Zambia en general, por parte de los chinos.
Aunque esta es una alianza natural entre el mayor productor mundial de cobre, Zambia, y el mayor consumidor mundial de cobre, China, para hacer negocios, muchos zambianos creen que su país puede y debe salir mejor parado.

Al borde de disturbios

En el último año, los cuatro hermanos chinos dueños de la mina de carbón Collum hicieron algunos cambios.
Duplicaron los salarios de los mineros, aunque los trabajadores dicen que siguen ganando apenas lo suficiente para vivir y que no se les paga nada cuando la mina no los necesita.
Los hermanos también contrataron a un experto zambiano en recursos humanos, Corry Moono.

"Básicamente, mi función es asegurarme de que las leyes laborales de este país se cumplen, para proteger tanto los intereses de esta empresa como los de los trabajadores", explica.
Pero él dice que ni la empresa ni los trabajadores lo ven así.
"Los trabajadores no entienden. Me dicen: 'Usted está del lado de los chinos." Y los chinos dicen: "Usted está del lado de los negros'''.
A pesar de que sus jefes no pueden apreciar sus esfuerzos, Moono dice desde que llegó a la mina hace nueve meses el hecho de estar allí para comunicarse con los trabajadores en su idioma, y de tratarlos con respeto, ayudó a evitar tres situaciones de disturbios.
"Les dije: 'Muchachos, vamos a trabajar juntos", dice Moono. "'Nuestros inversores están aquí para ganar dinero, y ustedes están aquí para ganarse la vida'. Cuando les hablo así, en cierta medida lo entienden".
Eso no quiere decir que estén contentos.
Taska Chinko dice que él y otros mineros no reciben paga por sus días libres. La mala ventilación en la mina les está afectando los pulmones, y hasta se tuvo que comprar su propio casco.
Chinko dice que, si pudiera, buscaría otro trabajo.
A cientos de kilómetros hacia el norte, en el cinturón de cobre de Zambia, el carbón de la mina Collum sirve de combustible para la fundición de cobre chino.
Allí, los trabajadores tienen quejas similares. Muchos ganan menos de US$200 al mes y la mayoría del dinero se gasta en alquiler.
Las empresas chinas aducen que por lo menos les pagan el salario mínimo, por lo que no están infringiendo la ley.
Pero Goodwell Kaluba, secretario general del Sindicato Nacional de Minas y Afines de Zambia, dice que el salario mínimo es para los trabajos seguros y sedentarios, como los vendedores, pero no para mineros.
Sin embargo, acepta que algunas empresas chinas están haciendo un gran esfuerzo para mejorar las relaciones.
Uno de ellos es el Grupo de Construcción de Shanghái, de participación mayoritariamente estatal.
"Estamos tratando de emplear a más locales", dice Wu Jiang Rong, gerente de proyecto. "Tratamos de formar a los trabajadores locales para mejorar sus habilidades. Muchos de ellos cuando llegan son trabajadores generales, y después de unos meses son pintores, carpinteros, albañiles", añade.

¿Un futuro más prometedor?

Apenas unos días después de ser elegido presidente, Michael Sata se reunió con el embajador chino, Zhou Yuxiao. Zhou quiso transmitirle las felicitaciones del presidente chino Hu Jintao.
Sata escuchó cortésmente, pero le dijo: "Damos la bienvenida a su inversión, pero ésta debería beneficiar a los zambianos. Ambos deben beneficiarse. Debe ser un ida y vuelta".

Añadió que las empresas chinas deben cumplir con las leyes locales y respetar los límites sobre el número de trabajadores extranjeros que traen al país, una denuncia popular en Zambia, ya que muchas empresas chinas utilizan trabajadores chinos para realizar trabajos que los zambianos podrían hacer.
El embajador Zhou le dijo el presidente Sata que las empresas chinas deben seguir siempre la ley y rendir cuentas si no lo hacen.
Luego me dijo que cree que las empresas chinas son criticadas injustamente en Zambia.
"Las empresas chinas aquí en Zambia son tan buenas como las empresas chinas que trabajan en otros países. He estado trabajando en muchos países africanos", dijo. "Pero las compañías [de Zambia] tienen una imagen mucho peor. Quizá no tanto por el desempeño de las compañías chinas sino más que nada por la situación política que hay aquí".
Zhou reconoce que todavía hay cosas por mejorar en la manera en que las empresas chinas hacen negocios en Zambia. Muchos zambianos estarían de acuerdo.

2011/09/21

La deforestación reduce las lluvias en África a la mitad

La cuenca del Congo, en el África occidental, se está secando. La segunda mayor selva del mundo, tras la amazónica, está sufriendo el acoso de la agricultura y, con la tala de árboles, las lluvias escasean cada vez más. Las precipitaciones se reducen hasta un 50% en las zonas cercanas a los campos de cultivo.
Los árboles es un conocido factor climático. Sin su termoregulación, la concentración de nubes se reduce y, con ello, la posibilidad de lluvias. Los investigadores han querido ahora comprobar cómo se produce este fenómeno en el África occidental. "Ya sabíamos por las observaciones satelitales que los cambios en el uso del suelo pueden tener un gran impacto en los patrones del clima local. Aquí hemos sido capaces de demostrar por qué sucede", explica Luis Garcia-Carreras, de la universidad británica de Leeds.
"Nuestros hallazgos sugieren que no se trata sólo del número de árboles arrancados lo que amenaza la estabilidad de los bosques tropicales del mundo, el patrón de deforestación también es importante", asegura.
Mediante el uso de modelos meteorológicos, comprobaron que mientras que la cantidad total de precipitaciones no varió, la lluvia era de cuatro a seis veces mayor en las tierras de cultivo (que son zonas más cálidas) que si no se hubiera producido la deforestación. Mientras, en el resto de la selva se reducía a la mitad. La diferencia en las precipitaciones viene provocada por el cambio de temperatura entre la tierra de cultivo y el bosque, lo que produce los vientos que convergen sobre el área de cultivo y forman las nubes.
"Los bosques africanos ya tienen el menor índice de precipitaciones de el resto de ecosistemas de selva en la Tierra, lo que podría hacerlos sensibles a los cambios en los patrones del clima local", dijo García-Carreras. " Por lo tanto, si la lluvia se reduce aún más como resultado de la deforestación, esto podría amenazar la supervivencia de los bosques que quedan al aumentar la sensibilidad de los árboles a la sequía", añade.
Su colega de estudio, publicado en Geophysical Research Letters, el profesor Doug Parker, también de la Universidad de Leeds, agregó: "Si bien nuestro estudio sólo se centró en una pequeña región de África, es razonable sugerir que este mecanismo podría ser común en otros bosques del mundo basándonos en observaciones similares de las lluvias en la Amazonía".

2011/09/02

La batalla de los contratos en Libia


La batalla de las balas y las bombas parece estar acercándose a su desenlace en Libia. Lo que se viene ahora es otra guerra: la de los contratos, la pelea por ver quién se posiciona mejor en la nueva Libia.
El más prominente de los hijos de Muamar Gadafi, Saif al Islam, niega que ese momento haya llegado e insiste en que desde su bastión de Sirte los partidarios de su padre reconquistarán Libia.

Y si bien es cierto que la guerra no ha terminado, no parece que las palabras de Al Islam inquieten en la comunidad internacional, reunida en la conferencia de "Amigos de Libia" en París.
El encuentro sirve para expresar apoyo al Consejo Nacional de Transición (CNT) y, al tiempo, "meter un cambio de marcha", como lo describe el corresponsal para Asuntos Diplomáticos de la BBC, Jonathan Marcus.
La reunión de París cambiará el foco de la agenda "de la guerra a la reconstrucción", como señala Marcus.
Es probable que la decisión de Naciones Unidas de autorizar la liberación de los fondos que habían sido congelados a Gadafi, también le imprima al encuentro un interés comercial.
Los países que propiciaron la intervención de la OTAN, como Francia y Reino Unido, ya están tomando posiciones.
Los italianos, tradicionales socios comerciales de Libia en Europa (y antigua potencia colonial) también tratan de no perder terreno, y ya preparan una misión de empresarios a Bengasi.
Pero tampoco se quedan atrás otros como Rusia o China, que opuestos a la intervención de la alianza atlántica, no dejaron de enviar sus representantes a París.

"No necesitamos donantes"

De lo que nadie duda es de que Libia va a necesitar contratar empresas extranjeras para la reconstrucción. Además, sus enormes reservas internacionales y su abundante petróleo, hacen que la cuestión sea potencialmente muy lucrativa.
"No necesitamos donantes. Libia es un país rico. Los activos estatales de la Autoridad de Inversiones Libia, el Banco Central y las reservas en oro equivalen a US$168.000 millones", declaró el ex director del Banco Central libio, Farhat Bengdara.
Conscientes de ello, recientemente, el presidente del CNT, Mustafa Abdel Jalil, prometió favorecer a los países que ayudaron en la rebelión. "Lo gestionaremos de acuerdo con el apoyo que nos han brindado", dijo.

Rusia presente

No hace mucho tiempo, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, se preguntaba quién había autorizado a la OTAN a buscar la salida del poder de Gadafi. Este jueves, no obstante, Moscú anunció que reconoce al Consejo Nacional de Transición como la legítima autoridad.

No eran pocos los que daban por hecho que las nuevas autoridades libias pasarían factura a países como China y Rusia por su falta de apoyo a la intervención de la OTAN.
De hecho, entre los propios rusos algunos temían ser grandes perjudicados del cambio de régimen.
Empresas como Gazprom o Tatneft han invertido cientos de millones en el sector del gas y el petróleo libio. Y la estatal ferroviaria rusa estaba construyendo una línea de tren de alta velocidad entre Sirte y Bengasi gracias a un contrato de US$3.000 millones ganado durante el gobierno de Gadafi.
"No creo que el nuevo gobierno de Libia empiece revisando los contratos con Rusia por cuestiones políticas más que criterios técnicos o económicos", dijo Mikhail Margelov, enviado ruso a la conferencia de París.

China también quiere estar ahí

Las empresas chinas también tenían una fuerte presencia en Libia antes de que estallara la rebelión. Al menos 26 compañías hacían negocios por unos US$20.000 millones.
El gobierno chino en todo momento se mostró reticente a la acción impulsada por Francia y Reino Unido.
Pero Pekín se ha hecho presente en la reunión.
"China desea sumarse a la comunidad internacional y jugar un rol activo en la reconstrucción de Libia", declaró el portavoz de la cancillería china, Ma Zhaoxu.
Pekín envió a un viceministro a la conferencia de París con la intención de "apoyar a las partes en sus esfuerzos para restaurar la estabilidad y promover una transición tranquila".

Italia firma acuerdo

Italia podría tener razones para estar preocupada por sus intereses económicos en Libia.
Las aparentes buenas relaciones entre el primer ministro Silvio Berlusconi y el coronel Gadafi podrían causar dificultades a la antigua potencia colonial frente a las nuevas autoridades libias.
La petrolera italiana Eni, que está presente en Libia desde 1959 (diez años antes de la llegada de Gadafi al poder), se considera a sí misma la primera compañía internacional en términos de producción de hidrocarburos del país.

Eni firmó un memorándum de entendimiento con el CNT, donde ambas partes se comprometieron a "recrear las condiciones para una rápida y completa reanudación de las actividades de la compañía petrolera en Libia y a trabajar para la reactivación del gasoducto GreenStream", que proveía 8.000 millones de metros cúbicos de gas natural al año.
Los italianos se comprometen inicialmente a proveer hidrocarburos para satisfacer las necesidades inmediatas de la población. Igualmente ofrecerán asistencia técnica para ayudar a restaurar el funcionamiento de las instalaciones.
Eni también ofreció ayuda humanitaria y material médico.

No sólo petróleo

Pero los acuerdos no se limitan al crudo. Así fue que el CNT firmó dos contratos con productores franceses para comprarles 60.000 toneladas de trigo a cada uno.
Según un alto funcionario francés, los contratos ascendieron a US$22 millones.
De hecho, Libia planea importar medio millón de toneladas de trigo.
La cámara de comercio italiana anunció para el 20 de septiembre un viaje con empresarios a Bengasi, donde su presidente expresó su intención de abrir una oficina.
"Primero, porque es el área industrial que va a necesitar mayor intervención y desarrollo; y segundo por que es más estable y segura", declaró el presidente de los empresarios italianos, Antonio de Cappoa al diario Libero.


2011/08/17

Los países musulmanes se reúnen en Estambul para incrementar la ayuda a Somalia

Los ministros de Exteriores de los 57 estados miembros de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) se reúnen este miércoles de forma extraordinaria en Estambul para tratar la grave situación de hambruna que padece Somalia.

"Se discutirá la catastrófica crisis humanitaria en Somalia y su peligro para los países africanos. También se discutirá el deterioro de la situación humanitaria en Somalia y cómo movilizar apoyo adicional para enfrentarnos a las consecuencias de la hambruna", explicó la organización en un comunicado.
El encuentro comenzará a las 14.00 hora local (11.00 GMT) y estará dirigido por el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan; el presidente de Somalia, Sheij Sherif Ahmad, y el secretario general de la OCI, el turco Ekmeleddin Ihsanoglu.
Se espera que al final de la reunión, el ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, ofrezca una rueda de prensa en la que anuncie un compromiso para que los donantes aumenten ayudas a Somalia.

Ayuda turca

La reunión extraordinaria fue convocada por Turquía, que en los últimos años ha incrementado a pasos agigantados sus relaciones con África, un continente del que había estado ausente durante su historia republicana pero con el que le atan lazos históricos de la época del Imperio otomano.

De hecho, las ONG turcas se han volcado en el Cuerno de África durante este mes de Ramadán, para tratar de mitigar los efectos de la hambruna, que afecta a casi a cuatro millones de somalíes.
Según el Gobierno turco, durante este mes, los ciudadanos turcos han donado 202 millones de liras turcas (unos 79 millones de euros) para ayudar a África. El Gobierno turco también anunció hoy que enviará 50.000 toneladas de harina de trigo a África para luchar contra el hambre, informó la agencia de noticias estatal Anadolu. Mañana por la noche, Erdogan viajará a Somalia junto a su ministro de Exteriores y al presidente somalí.

2011/08/03

Uganda, contra los ordenadores de segunda mano

'Ordenadores de segunda mano en venta', dice un cartel de una de las muchas tiendas de Katwe, un suburbio de la capital ugandesa, Kampala, conocido por ser un punto de venta privilegiado de productos electrónicos usados. En otra tienda, el anuncio se deja oír a través de unos altavoces: "No se pierdan la oferta del día, ordenadores a la venta por sólo 150 euros".
En la era de la tecnología, en la que los computadores dan acceso a un mundo más amplio, la formación en informática es una salida para un mejor trabajo y, tal vez, para una mejor vida. Pero pocos son, en Uganda, quienes pueden permitirse comprar un ordenador nuevo. A modo de ejemplo, baste decir que el salario de un maestro es de 150 euros al mes, y el de un policía apenas llega a los 70 euros. Así que los 650 euros que puede costar un computador nuevo quedan muy lejos de las posibilidades de la gente corriente. De manera que comprar un ordenador de segunda mano por 150 euros es la mejor alternativa.

Uganda no quiere ser un vertedero de PC

El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) calcula que cada año se generan 40 millones de toneladas de residuos electrónicos en todo el mundo, de los que entre el 60% y el 80% por ciento termina en los países en desarrollo. Y la cifra va en aumento en países como Senegal y Uganda, que hasta 2020 podrían ver multiplicado por ocho la cantidad de residuos electrónicos. En efecto, en Uganda, si se entra en un cibercafé, en una empresa o en una escuela de tecnología de la información lo más probable es que trabaje con una ordenador de segunda mano.
Ante el temor de que el país se convierta en un vertedero de viejos PC que deberían haber ido a los basureros europeos y estadounidenses, el gobierno presentó una ley prohibiendo la importación de ordenadores de segunda mano. La ley se aprobó en mayo de 2010 convirtiendo a Uganda en el único país del mundo que prohibía el uso de computadores usados.
Pero los ordenadores usados siguen a la venta, dentro de las tiendas o, a menudo, amontonados en las aceras. Y es que la policía no hace cumplir la ley y, hasta ahora, ningún vendedor ha sido penalizado. Aún así, estos siguen siendo reacios a que les entrevisten o fotografíen. "¡No, no, no! ¡Fuera! No le permitiré que tome una fotografía de mi tienda de ordenadores", dice un tendero mientras empuja fuera al fotógrafo. "Sabemos que a los periodistas os envían para espiarnos y enviar la información al gobierno. ¡Largo de aquí!", interpela otro comerciante.

Una necesidad para el futuro

Los críticos argumentan que la legislación es corta de miras y que hay ordenadores de segunda mano, reparados y de buena calidad, que permiten a muchas personas acceser a las tecnologías de la información. Para Wellis Welvis Kitto, un profesor de informática de la Escuela de Secundaria de Masaka, el acceso a los ordenadores de segunda mano significa que puede permitirse comprar más máquinas para sus estudiantes ávidos de tecnología.
La de Secundaria de Masaka es una de las mayores y más populares escuelas públicas de Uganda, a 140 km al sudoeste de Kampala. Sobre una de las pocas colinas de esta ciudad de unos 900.000 habitantes, la escuela presume de estar creando una generación "punto-com". Estos estudiantes se forman no con relucientes monitores y ordenadores de última hornada, sino con teclados sucios, letras medio borradas y teclas pegajosas. Es más, el laboratorio de informática es uno de los preferidos de los alumnos de la escuela.
El profesor Kitto, un hombre de unos treinta años, muestra con orgullo su laboratorio de viejos y algo maltratados ordenadores y teclados esparcidos por las mesas de madera. Unos diez estudiantes se arremolinan alrededor del profesor Kitto, mientras les enseña cómo funciona una computadora. Pero cuando Stephen Kalema, de 17 años, le pide que muestre uno de los programas que aparecen en pantalla, ésta se queda en blanco cuando la máquina, sin previo aviso, se desconecta abruptamente.
"No es ninguna sorpresa que me deje colgado a media clase", dice el profesor Kitto. Por otra parte, asegura el docente, una de las ventajas de los PC de segunda mano, es que es más fácil y barato arreglarlos. Es poco lo que se tarda en conseguir repuestos".
"Trabajar con ordenadores de segunda mano, que muchos consideran como residuos electrónicos, no ha hecho que decaiga mi pasión por enseñar informática. Si pudimos crear este laboratorio es por la facilidad de conseguir viejas computadoras", dice Kitto. Como consecuencia de la prohibición, la escuela se está viendo obligada a cambiar sus ordenadores obsoletos por otros nuevos. Kitto dice que ahora sólo podrá comprar tres en vez de 20.

¿Dónde tirar los viejos ordenadores?

Mientras tanto, sigue la cuestión de qué hacer con los ordenadores usados, porque no hay ninguna ley que regule esta cuestión. Los únicos que actualmente se dedican a eliminar estos computadores son los llamados 'patios traseros', empresas que se dedican a inicinerar y recuperar minerales y metales preciosos, como el oro de estos aparatos.
Un análisis de 2008 sobre la gestión de los residuos electrónicos en el país, realizado por el Centro de Producción Limpia de Uganda y el laboratorio suizo Empa, calculó que, al menos, hay 80.000 ordenadores rotos acumulando polvo en habitaciones y almacenes de todo el país.
Waiswa Ayazika, el director de seguimiento ambiental de la Autoridad para la Gestión del Medio Ambiente (NEMA), puntualiza que "los comerciantes que traigan ordenadores de segunda mano están obligados a retornarlos a los países de origen o simplemente deben eliminarlos". Pero ni comerciantes ni consumidores tienen un lugar donde tirar los computadores y otros insumos electrónicos.
Ayazika dice que NEMA está trabajando con el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicación para desarrollar una política de residuos electrónicos, pero más de dos años después de que se implantara la prohibición aún no se ha hecho nada.
El pasado año, NEMA dijo que destinaría 2,3 millones de euros en la construcción de un centro para destruir los residuos electrónicos, que iba a ser gestionado por la compañía Second Life. Sin embargo, Robert-Jan Nieuwpoort, director de Second Life, dice que el pasado mes de marzo NEMA le dijo que lo sentían mucho y que "ya no había dinero".
Nieuwpoort dice que en su centro tiene tres contenedores con computadoras de segunda mano para reciclar. Necesita casi dos millones de euros para poner en marcha el proyecto de residuos electrónicos, pero, dice que "nadie invertirá en él si no le ven los beneficios".
Sugiere que el gobierno debería proponer incentivos a los usuarios: gravar con una tasa adicional para el reciclaje cuando se compra un ordenador, y que ésta sea parcialmente retornada cuando se entregue la máquina a un centro de residuos electrónicos. Sin embargo, hoy por hoy, la estrategia de residuos electrónicos en Uganda está congelada y no se atisba que se vaya a reiniciar en un futuro.

2011/07/25

El Banco Mundial destina 350 millones al Cuerno de África

El Banco Mundial ha anunciado que destinará 500 millones de dólares (348 millones de euros) para ayudas ante la grave sequía que se vive en el Cuerno de África, que se suman a los 12 millones de dólares ya puestos a disposición, ha anunciado la institución en un comunicado.

El anuncio de la ayuda se produce mientras comienza en Roma la reunión urgente organizada por la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) a petición del Gobierno francés en calidad de presidente de turno del G-20, para analizar la crisis humanitaria en el Cuerno de África.

"El alivio inmediato y la recuperación son las principales prioridades, y es importante actuar rápido para reducir el sufrimiento de las personas, pero también hay que tener en cuenta soluciones a largo plazo para la recuperación económica", dijo el Presidente de Banco Mundial, Robert Zoellick.

Aumento del precio de los alimentos

En la nota, el Banco Mundial advierte de que "es importante para los países del Cuerno de África que se preparen para las sequías que volverán a repetirse debido a los efectos del cambio climático".

Asimismo, recordó que ya la entidad "anunció en abril de 2011 que el aumento de los precios de productos alimenticios ha llevado a 44 millones de personas en la pobreza desde junio de 2010 y que una nueva subida del 10% podría empujar a otros 10 millones de personas a la pobreza".

La crisis actual, según datos facilitados por la FAO, afecta a la totalidad del Cuerno de Africa, incluyendo la zona septentrional de Kenia y la región de Karamoja en Uganda.

Hambruna en Somalia

Entre los países más perjudicados por la sequía se encuentra Somalia, donde la ONU declaró el pasado miércoles el estado de hambruna en dos regiones del sur del país, Bakool y Baja Shabelle, algo inédito en los últimos veinte años.

En el encuentro de Roma participarán representantes de los 191 países miembros de la FAO, así como otros organismos de la ONU, organizaciones no gubernamentales y bancos regionales de desarrollo.

20minutos

El país más joven quiere sacar petróleo de su fauna

Tras una guerra civil de más de 20 años y dos millones de muertos, el 9 de julio nació por cesárea el que por el momento es el país más joven del planeta y que compite por ser el más miserable: Sudán del Sur. En un territorio de mayor tamaño que España, unos ocho millones de personas luchan contra la pobreza en un país corrupto que ha nacido con una jungla de 31 ministerios, pero sin nadie que tome decisiones. Las tripas de Sudán del Sur están preñadas de petróleo, pero uno de cada siete niños que llegan a cumplir un año muere antes de cumplir los cinco; sólo una de cada 15 personas tiene acceso a una letrina y el 90% de los niños no se vacunan contra las enfermedades que los están matando. Es un país recién nacido lleno de problemas.
Un día antes de que se desgajara de Sudán del Norte, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación, la FAO, aseguró que el nuevo país "tiene un gran potencial para el crecimiento sostenible a través de la agricultura". Casi 95 de cada 100 hectáreas cultivables están sin trabajar, en parte porque la violencia ha continuado este año, pese a la anunciada independencia.
Como denunció hace unas semanas la ONG humanitaria Oxfam, los ataques del Ejército de Resistencia del Señor han cortocircuitado la producción agrícola en las regiones más fértiles de Sudán del Sur. Se calcula que en torno al 98% de los ingresos del país proceden actualmente del petróleo, pero ese dinero sale del país o se esfuma en el laberinto de la corrupción.
El país más joven del mundo parece abocado a sufrir la misma pobreza de siempre pero con otra bandera, aunque la organización estadounidense Wildlife Conservation Society (WCS) acaba de poner sobre la mesa una posible vía de escape a la miseria: la fauna. Mientras los documentales se fijan obsesivamente en las idas y venidas de cientos de miles de ñus entre la reserva keniana Masai Mara y el Parque Nacional del Serengueti, en Tanzania, en Sudán del Sur se produce desde tiempos inmemoriales, y lejos de las cámaras, una de las mayores migraciones del planeta. Unos 1,3 millones de cobos de oreja blanca, tiangs y reduncas, tres especies de antílopes, y gacelas de Mongalla atraviesan cada año de sur a norte la sabana intacta del nuevo país en busca de agua y alimentos, formando uno de los últimos espectáculos de la naturaleza todavía en cartel pese a la expansión humana.
"Los tesoros de la vida salvaje de Sudán del Sur ofrecen una oportunidad para una economía diversa, basada en el turismo respetuoso con el medio ambiente en el país más joven del mundo", lanzó el presidente de la WCS, Steve Sanderson, en un llamamiento en la víspera de la independencia. No hay que inventar nada, sólo seguir el modelo del Masai Mara y el Serengueti. El turismo aportó 1.000 millones de dólares a la economía de Kenia en 2009 y la cifra alcanzó los 1.200 millones en Tanzania.

Matar para comer

La WCS trabaja desde hace años, con dinero de la Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional (USAID), con las autoridades sursudanesas para crear dos parques nacionales y una reserva de fauna en un área de 200.000 kilómetros cuadrados, una tercera parte del país, sin renunciar a extraer petróleo. Se calcula que Sudán del Sur se ha llevado el 75% de las reservas de 6.700 millones de barriles de crudo que tenía el país antes de la división, pero hasta el Banco Mundial ha alertado del peligro de vivir de un monocultivo de petróleo. El crudo está en el sur, pero el oleoducto para exportarlo está en Sudán del Norte. Y ambos países todavía no se han puesto de acuerdo a la hora de trazar su frontera. El turismo de safari podría ser, a la vez, una alternativa económica y una herramienta para la paz. A juicio del presidente de la WCS, es "una oportunidad única, quizá sin precedentes", para inventarse un país sostenible de la nada.
Pero otras organizaciones no son tan optimistas. "Sudán del Sur es un país sin infraestructuras, apenas hay unas decenas de kilómetros de carreteras asfaltadas, el aeropuerto está fatal, los hoteles de la capital cuestan 100 euros por noche, no hay salud pública, la gente se muere de hambre. La prioridad ahora no puede ser la conservación del medio ambiente", opina Filippo Ortolani, coordinador en la ONG Oxfam de la ayuda humanitaria en la región. "La biodiversidad es una riqueza para el país, pero la conservación sólo tiene sentido en el marco de una planificación mucho más amplia", añade.
Ortolani recuerda que las dos décadas de guerra civil acabaron con muchas especies. Chimpancés, búfalos, antílopes y elefantes fueron masacrados. "Mataron cualquier cosa para poder comer", recuerda. También cayeron por millares jirafas, oryx y cebras. Fue precisamente en 2005, cuando los dos bandos firmaron el alto el fuego, cuando la WCS comenzó a sobrevolar las manadas de antílopes para hacer un censo de la gran migración del sur de Sudán. Y en 2007 llegó la bomba. Al contrario de lo que ocurrió en Angola y Mozambique, donde las guerras exterminaron la fauna salvaje, en Sudán del Sur seguía produciéndose una de las mayores migraciones del planeta. El último censo, también elaborado por la WCS, era de 1982.
"Si un minero hubiera encontrado una veta de oro como la que hemos encontrado nosotros con los cobos de oreja blanca, habría encontrado El Dorado", anunció entusiasmado J. Michael Fay, uno de los autores del censo, en 2007.
Inmediatamente, la WCS se puso a trabajar con las autoridades para reconvertir a los antiguos combatientes del Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán en guardas de una rudimentaria red de reservas naturales. Los que antes exterminaban a los animales, ahora escoltan a la gran migración.

Publico 

2011/07/18

África, ¿el continente olvidado? No para Google

Según Google, África será el próximo punto que haga más uso del motor de búsquedas y ya ha puesto en marcha iniciativas para impulsar el contenido local.
En esta línea se encuentra la iniciativa “Consigue un negocio africano online”, que aglutinó a una serie de pequeñas y medianas empresas de Nigeria. Mediante este proyecto se facilitó la presencia online de estos negocios para que promocionaran sus bienes y servicios.
Google también está prestando especial atención al desarrollo de las infraestructuras necesarias para la consecución de los objetivos. Así, trabaja con universidades en el África subsahariana, Ghana, Kenya, Iganda y Nigeria en el impulso de su capacidad de ancho de banda, informa The Next Web.
Además, la posibilidad que se está ofreciendo de efectuar las búsquedas en lenguas africanas está teniendo un gran éxito. La opción de poder hacer búsquedas en Swahili por ejemplo, ayuda a entender más los productos y a sentirse partícipe en un continente en el que la identidad juega un papel muy relevante.
A pesar de las iniciativas todavía quedan muchos puntos por resolver. Las bajas tasas de alfabetización, los altos niveles de pobreza, escasos niveles de suministro y la falta de conciencia sobre internet son algunos de los escollos que habrán de superarse.
El reto tiene que ver con la creación de un ecosistema adecuado que permita la accesibilidad será el pilar fundamental para el desarrollo de una red universal y sostenible en el continente.

Silicon News

2011/07/04

Desarrolla la primera tableta africana

Veróne Mankou, emprendedor congolés, creó en 2009 VMK, una empresa tecnológica que espera estrenar en unos meses la primera tableta especificamente diseñada para el mercado africano.
El empresario ha explicado a la web británica thinq_ que el principal problema de África radica en que es un mercado con un limitado poder adquisitivo y por esa razón los precios de las tablets tienen que ser muy ajustados y eso no es fácil para los fabricantes.
Mankou considera que su continente se está quedando atrasado en las revoluciones tecnológicas por culpa de una menor capacidad económica y es necesario revertir esa tendencia.
La tableta que ha desarrollado Mankou está basada en Android 2.3 Gingerbread, que ha elegido por considerarlo un sistema estable y que cuenta con la ventaja de ser de código libre.
La pantalla del dispositivo será táctil de 7 pulgadas y se incluirá un procesador de 1,2GHz, junto a 512MB de RAM, memoria flash NAND de 4GB y conexión Wi-Fi.
Ahora, la tableta se encuentra en la fase previa a la comercialización, que según Mankou es muy compleja debido en parte a los aspectos logísticos al producirla en China.
Otro aspecto que dificulta su llegada al mercado son los impuestos que imponen los países africanos, que como denuncia Mankou, hacen que a menudo sea más sencillo comerciar con países de fuera del continente.
El ambicioso emprendedor congolés espera solucionar todos los problemas y poder vender su dispositivo en las tiendas africanas para finales de año.


the INQUIRER

2011/06/22

Ritmos africanos en iPhone

Pulgares a punto y comienza la música. Rythmic Thumbs aparece de manera intermitente en lo más alto de la categoría "música" de la tienda de aplicaciones de Apple. La aplicación, que cuesta 79 céntimos de euro, mezcla la música africana con el juego.

Nada más comenzar aparece un yembe y suena una base de fondo. Después comienzan a caer notas, por la izquierda, por la derecha y por el centro. Hay que sincronizar los pulgares al compás de la música para no cometer fallos. Parece sencillo pero la aplicación cada vez exige más destreza para descubrir nuevas canciones.Las dos primeras están desbloqueadas desde el principio. Descubrir las ocho restantes son cuestión de práctica y talento con la percusión.
Diego Bezares, programador del juego, piensa ampliar el catálogo con otros diez títulos que se descargarán con un pequeño pago dentro de la propia aplicación. Durante un mes Bezares y el diseñador gráfico Daniel Olaya han creado este juego con cierto aire lúdico. Su intención es lanzar el programa en Android en cuanto lo adapten.
Desde que lo enviaron a la tienda de aplicaciones de Apple hasta que estuvo disponible pasó una semana. Un tiempo que a Bezares le parece bastante apropiado si se compara cuando se desarrolla para videoconsolas. Del precio del programa el 70% es para los creadores, el 30 restante para Apple. De nuevo, ve ventajas sobre las consolas. "Normalmente, los estudios ven 15 euros de los 60 que se paga en la tienda", aclara.
¿La próxima creación? Algo parecido, con la misma lógica de juego pero utilizando el acelerómetro tanto de iPad como iPhone en lugar de la pantalla táctil.

El Pais