Si tuviera que dejar su hogar por unos días, y sólo pudiera llevarse un único objeto, ¿con cuál se quedaría? La pregunta fue formulada por la consultora IDC a 2.360 personas en todo el mundo. Y las respuestas ratificaron la altísima penetración que tiene el teléfono móvil en la vida de las personas. Casi el 50% de los consultados en América latina eligió al celular, seguido con casi el 30% por la laptop, un 15% por ¡la billetera!, y apenas el 3% ¡las llaves! y el reproductor de medios digitales iPod.
El caso de los latinoamericanos se distingue del resto de las regiones, porque fue la región donde el celular obtuvo las más altas tasas de elección. “El consumidor latinoamericano tiene avidez de comunicarse”, interpretó la analista de IDC, Romina Aducci, al analizar este cuadro durante la reciente presentación del sistema opeativo Windows Mobile 6.5 en Buenos Aires.
Se puede hacer la siguiente prueba: observar en un medio de transporte público los usos que le dan los pasajeros al celular: Hablar, enviar mensajes de texto, armar la agenda, escuchar música, ver videos, y en el caso de los equipos más avanzados, navegar por Internet y responder e-mail.
En la Argentina, el teléfono móvil es la vía preferida de comunicación: a fin de año habrá 33,5 millones de líneas activas de celulares, seguidas unos 20,5 millones de usuarios de Internet, y 3,7 millones de conexiones de banda ancha, según estimaciones de la consultora TBI Unit.
La telefonía celular, pese a no verificarse las subas de años anteriores, demuestra una facturación que sigue en alza. De hecho lo hizo en los primeros 9 meses de este año más de un 24%, apalancado por el incremento del consumo de voz y sobre todo el de datos, que ya superó el 30% de la facturación de las compañías, apuntó el estudio.
Si al final los usuarios comienzan a utilizar en forma intensiva los servicios de valor agregado en su dispositivos, se darían las condiciones para que se reproduzca lo que se registra en el mercado estadounidense.
Hace pocos días, el fabricante de celulares Motorola difundió los datos de un estudio que realizó sobre el consumo de los medios y las expectativas para el 2010.
El Barómetro de Compromiso Multimedia 2009, encomendado por la unidad de negocios Home & Networks Mobility de Motorola (NYSE: MOT), reveló un marcado cambio en lo que respecta a la influencia del consumidor que aún no ha sido ampliamente reconocido. La edad ya no constituye un factor determinante para la predisposición o habilidad del consumidor para utilizar servicios o tecnología multimedia.
De hecho, todas las generaciones, es decir, los jóvenes del nuevo milenio (75%), los Generación X (74%) y los Boomers (66%), reconocen el papel que tienen las tecnologías de entretenimiento en ayudarlos a mantener sus vidas en orden, lo cual explica por qué tanto los jóvenes del nuevo milenio (80%) como los Generación X (78%) y los Boomers (78%) demuestran el mismo interés en permanecer conectados en todo momento.Con todas las generaciones inmersas en las tecnologías de entretenimiento, se debe mirar más allá del factor edad para predecir posibles influencias:
- La conectividad ya ha pasado a ser un estilo de vida. Estar disponible en todo momento es más bien una necesidad para las distintas generaciones (los jóvenes del nuevo milenio, 79%; los Generación X, 64%; y los Boomers, 65%).
- Existe un diálogo de dos vías entre los consumidores de todas las edades a medida que se vuelcan a los productos tecnológicos y comparten sus experiencias. La mayoría de los estadounidenses manifiestan influenciar las decisiones de sus hijos (75%), amigos (74%), colegas (67%) y padres (58%).
- Padres, abuelos e hijos están activamente comprometidos con la esfera de influencia tecnológica. Los padres de los jóvenes pertenecientes a las generaciones X y Boomer manifiestan estar incidiendo en los hábitos tecnológicos de sus hijos (Generación X, 87% y Boomers, 79%), porcentaje aún mayor que el de los jóvenes pertenecientes a la generación X (62%) y los del nuevo milenio (76%) sobre los hábitos de sus padres.
El objetivo del estudio fue explorar de qué manera las distintas generaciones se involucran con los servicios y productos tecnológicos con familiares, amigos y colegas. Los encuestadores entrevistaron a 1.000 estadounidenses de entre 16 y 64 años de edad. No obstante, a medida que las innovaciones tecnológicas continúan evolucionando, la vida de la gente ya no puede segmentarse tan fácilmente. Los jóvenes del nuevo milenio, los Generación X y los Baby Boomers se unen mediante la tecnología, formando vínculos que tienen más que ver con hábitos de uso que con franjas de edad.
“Los proveedores de servicios y las empresas de tecnología están comenzando a proveer servicios de video, comunicaciones e información de manera más agresiva entre los múltiples dispositivos. No obstante, si la clave para el éxito de estos nuevos servicios es la aceptación, la adopción y la lealtad del consumidor, entonces es fundamental comprender a la perfección el modelo de influencia de dicho consumidor – el cual evidentemente ha cambiado – y desviar nuestras estrategias de desarrollo y marketing para alinearnos con los hábitos y las influencias del consumidor”, afirmó Eduardo Conrado, gerente de Marketing de la unidad de negocios Broadband Mobility Solutions de Motorola.
La conectividad es una necesidad
La capacidad de conectarse dondequiera que esté se ha vuelto un componente esencial en la vida diaria, resalta el informe de Motorola. De hecho, siete de cada diez consultados (70%) manifiestan que “es importante para mí estar siempre disponible,” y casi ocho de cada diez (78%) sienten la necesidad de estar permanentemente conectados con sus familiares, amigos y colegas, independientemente del lugar en el que se encuentren.
Este nivel de acceso brinda a los usuarios la libertad de priorizar y combinar aún más los distintos aspectos de sus vidas. Lejos de sentirse sofocados por el hecho de estar disponibles en todo momento, admiten que los hace sentir relajados y tranquilos.
Demanda de contenido en todo momento y lugar
A pesar del uso diario que hacen de la tecnología, el 70% de los encuestados aún se muestra emocionado por la posibilidad de experimentar un estilo de vida “conectado” y, más allá de dónde se encuentren físicamente, han logrado confiar en la posibilidad de acceder y compartir contenido, incluyendo imágenes de video, en cualquier momento y lugar.
El 66% de los encuestados esperan ser capaces de acceder al mismo contenido independientemente de dónde se encuentren.
Necesidad de personalización universal
Además, los encuestados necesitan una manera efectiva de ir directamente al punto y obtener información fehaciente sobre soluciones personalizables que satisfagan sus necesidades, ya que muchos se muestran frustrados y abrumados por los niveles de información actualmente disponibles. Es por eso que los consultados de todas las edades por la encuesta, y no solo los jóvenes del nuevo milenio, ahora reconocen el valor de personalizar sus contenidos y experiencias.
El deseo de dar un toque personal sus experiencias individuales se extiende del consumo de contenido multimedia a las redes sociales y la televisión, tanto para visualización como interacción.
Esfera de influencia
Tradicionalmente, los jóvenes del nuevo milenio fueron considerados como la “generación tecnológica” y quienes ejercen la mayor influencia sobre sus padres en lo que respecta a los hábitos y la adquisición de productos tecnológicos. Un estudio orientado a jóvenes del nuevo milenio llevado a cabo por Motorola en 2008 reveló que el 71% de estos jóvenes tiene una gran influencia sobre las decisiones de sus padres en lo que respecta a servicios por cable, DSL o vía satélite.
No obstante, los resultados arrojados por el Barómetro de Compromiso Multimedia demuestran que, en lo que a decisiones tecnológicas respecta, la proporción de influencia entre padres e hijos es muy similar. Es por eso que es hora de reexaminar la concepción de la esfera de influencia. Independientemente de su edad, pareciera ser que el factor que determina quiénes tendrán mayor influencia tecnológica entre los consumidores de las distintas generaciones está dado por sus hábitos de consumo de contenido multimedia.
Perspectivas
Otra investigación, en este caso de la consultora Porter Novelli, apunta sobre las próximas tendencias en el mercado de las comunicaciones móviles. Para elaborar el informe se realizó una encuesta a expertos, identificando los patrones de las tendencias e investigando datos globales. Algunos de los resultados clave del estudio, denominado “Mobile Life & Times”, fueron:
- El uso personal de tecnología móvil e inalámbrica no tiene precedentes. Cerca del 58 por ciento de la población mundial cuenta con una suscripción móvil activa. La cifra se cuadruplicó tan sólo en los últimos seis años.
- Los servicios basados en ubicación crean un enorme potencial para aprender sobre los clientes e incrementar la inteligencia de la mercadotecnia. El desafío de los promotores: aprovechar la oportunidad sin ser invasivos ni molestos. El desafío de los proveedores de tecnología móvil: comercializar la oportunidad con eficacia.
- La tecnología móvil constituye un escalón para el progreso de los países en desarrollo. Es económica y ofrece una manera accesible de simplificar las conexiones, mejorar el acceso a la atención médica y establecer negocios locales.
- La atención médica se encuentra detrás de la curva de la movilidad, pero existe un gran potencial de utilizar la tecnología para mejorar los sistemas deficientes a través de la capacidad de compartir datos con facilidad, incrementar el alcance y poder de las herramientas de diagnóstico, supervisar a los pacientes en forma remota, reducir costos y mucho más.
- El teletrabajo está despegando: es conveniente y económico tanto para el empleado como para la empresa. Es una medida sensata para la creciente cantidad de consultores y trabajadores independientes. Además, permite la interacción entre los equipos ubicados en diferentes partes del mundo, y los pronósticos muestran que puede llegar a reducir las emisiones de carbono en forma considerable.
- La movilidad invasiva se ha extendido tanto que se requiere acordar sobre nuevos códigos de conducta. No sólo tiene que ver con malos modales, sino también con la privacidad, la confidencialidad y la seguridad personal.
Las tendencias reflejadas en las investigaciones de Motorola y Porter-Novelli, ¿pueden darse en la Argentina? Un informe de la consultora D’Alessio IROL otorga chances a la respuesta positiva: Nueve de cada diez personas en el país ya utilizan funciones que exceden la simple comunicación hablada y los SMS.
El informe de este gabinete de investigación indica que la multifuncionalidad dejó en segundo plano el motivo fundamental de la aparición del celular: la comunicación en sí misma. “Hoy los celulares se han convertido en una herramienta laboral y de entretenimiento”, señala.
De acuerdo al estudio además de las llamadas y el envío de SMS, se utilizan en promedio 5 funciones del equipo. En primer lugar, la agenda electrónica que básicamente incluye directorio, calendario, alarma y calculadora. En igual medida, para aquellos teléfonos que incluyen cámara de fotos, esta opción también es una de las más aprovechadas. El segundo lugar es para el paquete “Entretenimiento”, que según el modelo de aparato, puede contar con las opciones de MP3, MP4, envío de MMS y juegos.
Las funciones de Internet (envío de mails, navegación, chat) se encuentran en tercer lugar. Sin embargo, la consultora remarca que, “insólitamente, a pesar de estar presente en la mayoría de los modelos actuales, su uso no se ha masificado aún”.
“Los jóvenes (y cada vez de menor edad) tienen su teléfono celular y lo llevan a todos lados. El celular se transforma en su compañero de aventuras. A menor edad del usuario, crece la cantidad de funciones utilizadas”, señala el estudio.
Pero el móvil no es sólo una herramienta, sino también un bien aspiracional: “Estar a la moda no es sólo una cuestión de adolescentes. Contrariamente a lo que se puede suponer, los que tienen mayor intención de cambio de equipo son los adultos, probablemente porque los más jóvenes ya se iniciaron con modelos más vanguardistas. Quienes más veces cambian, lo hacen para tener ‘lo último’. La condición es que sea ‘más moderno’, con ‘mayor cantidad de funciones’. En definitiva, se privilegia la innovación”, explican desde la consultora.
La funcionalidad también es de importancia: “Entre los menores de 24 años, se busca cada vez más aumentar la capacidad de memoria de los teléfonos móviles para aprovechar al máximo las funciones MP3, MP4, juegos, cámara de fotos, multimedia y otros entretenimientos”, apunta el estudio.
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