Mientras la estrategia de comercialización de Windows 7 parece que avanza a buen ritmo en el mercado de consumo (aunque sólo sea por la cantidad de equipos nuevos que vendrán con él pre-instalado) en el mercado corporativo no está tan claro y a Microsoft le preocupa que cerca del 71% de empresas hayan pasado de Vista y sigan con Windows XP.
Es por ello que Microsoft está en una gran campaña para convencer a las corporaciones de los beneficios de la migración al nuevo sistema operativo y se esfuerza en ofrecer acuerdos de “licencias en volumen” y otros tipos de ofertas con Windows 7 como protagonista.
Desde que Ballmer vino a decir que las empresas serían un infierno con XP, argumentando que “si retrasas cuatro o cinco años el despliegue de nuevos sistemas operativos, la mayoría de trabajadores le preguntarán a su jefe por qué diablos no utilizan la tecnología que tienen en casa”, la compañía ha continuado una campaña de marketing que ahora se intensifica.
El fracaso total de Vista en empresas ha convertido a Windows XP en un fantasma que persigue a Microsoft, ya que tras ocho de vida muchas corporaciones (hasta un 70%) lo consideran suficiente para su productividad.
Por eso Microsoft está liberando estudios de investigación, informes de consultoras como Forrester, renovados acuerdos de licencias en volumen o nueva versión del Microsoft Desktop Optimization Pack, destinados a convencer a los clientes más importantes de la conveniencia de migrar a Windows 7. Veremos si lo consiguen y dentro de unos años puede acabar hasta con las campañas para salvar el XP y no tener que revivirlo de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario