En enero Nintendo rebajó un 70% las previsiones de venta de su Wii U para el trimestre fiscal que terminaría en marzo. La compañía japonesa se ve cada vez más lastrada por las pérdidas.
La nipona acaba de hacer públicos los resultados de este cuarto trimestre con una pérdida operativa anual por tercer año consecutivo en 2013, aumentado sus números rojos hasta 46.400 millones de yenes (457 millones de dólares), ya que las ventas de Wii U no han logrado remontar tras la temporada navideña, como recoge The Verge.
Las ventas totales de Wii U se han situado en 6,17 millones de consolas en todo el mundo, lo que significa que Nintendo ha vendido solo 310.000 unidades en el trimestre finalizado el 31 de marzo. Esto supone una caída del 20% respecto a hace un año.
La pérdida neta de la compañía ha ascendido a 23.200 millones de yenes (22,8 millones de dólares).
Este balance contrasta con los resultados de PlayStation 4 de Sony, que a fecha del 6 de abril había alcanzado 7 millones de consolas comercializads en todo el mundo, superando ya a Wii U.
En el cuarto trimestre la familia Nintendo 3DS ha vendido 590.000 unidades hasta alcanzar un total actual de 43,3 millones, 2,2 millones de los cuales son de la variante 2DS de menor precio.
Nintendo está buscando la manera de sacar más partido a su negocio de videoconsolas y ha planeado una nueva estrategia, con la entrada este año en el mercado móvil. El fabricante lanzará minijuegos para smartphones o demos para videoconsolas que después solo podrán adquirirse por completo en el hardware de Nintendo.
Al tiempo, el CEO de la compañía, Satoru Iwata, se ha reducido el sueldo a la mitad y el resto de miembros directivos lo hará entre un 20% y un 30% en estos meses.
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