El proyecto Phonebloks, pionero en la idea de los teléfonos modulares, quiere llevar ahora que este concepto a otro tipo de dispositivos, no sólo gadgets, sino también electrodomésticos, como un horno o un frigorífico.
La idea en la que se basa este proyecto es que podamos utilizar de forma transversal los módulos entre nuestros electrodomésticos, independientemente de su naturaleza. Para llevar a término su idea, Phonebloks ha cerrado una alianza con el fabricante de auriculares y micros Sennheiser, y está trabajando para que se sumen a la iniciativa más empresas, infroma Fandroides.
Phonebloks se hizo famoso en septiembre del año pasado con un video que se difundió de forma viral e introducía el concepto de “teléfono modular” para mejorar la eficiencia y reducir los residuos. Ahora, el Proyecto ARA de Google ha hecho de este concepto una realidad, con el objetivo de simplificar el hardware de los dispositivos móviles a escala masiva, reduciendo los costes tanto para los fabricantes como para los consumidores.
Este concepto modular abre más canales para que los fabricantes de equipos originales y los minoristas puedan llegar al cliente. Después de comprar un dispositivo modular, los consumidores podrían comprar en línea en cualquier marketplace o en la página web de otro fabricante un componente y pedir que se lo envíen directamente a ellos, según Venture Beat. Estas piezas también podrían ser devueltas o enviadas para su reparación.
Además, empresas como Canon o Nikon podrían vender nuevos módulos de cámara separados para los teléfonos móviles. Este modelo de autoservicio crea más posibilidades de personalización de los teléfonos inteligentes y abre un enorme mercado para los accesorios y componentes add-on. Esto incluye elementos estándar como baterías y pantallas, pero también tiene un gran potencial para incluir aplicaciones más específicas, como termómetros, pulsómetros o medidores de azúcar en la sangre para el cuidado de la salud.
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