Por primera vez en seis años, el gobierno de Japón intervino este miércoles en el mercado de divisas para debilitar el yen.
La tercera economía del mundo trata de impedir que la fortaleza de su moneda, que registra su cotización más alta en relación con el dólar en los últimos 15 años, debilite el ritmo de sus exportaciones y, como consecuencia, afecte a su frágil recuperación de la crisis global.El Banco Central apoyó la medida poniendo a la venta millones de yenes para impulsar la devaluación del yen.
Las exportaciones, especialmente de la industria electrónica e informática, constituyen el motor de la economía japonesa.
La intervención se produce semanas después de que el Banco Central del país tomará diversas medidas encaminadas en la misma dirección.
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Ganando terreno
El ministro de Finanzas japonés, Yoshihiko Noda, explicó: "Hemos realizado una intervención para suprimir las excesivas fluctuaciones en el mercado cambiario. Nuestra economía está todavía en una difícil situación, con una deflación continuada. El alza del yen produce inestabilidad y no podemos permitirlo".El yen ha ganado terreno en relación con el dólar en los últimos tres años. Desde 2007, la moneda nipona ha registrado un alza del 30% respecto de la divisa estadounidense.
Esto constituye una fuente de malas noticias para una economía de grandes exportadores, que incluye a importantes empresas de productos electrónicos y a compañías líderes en fabricación de automóviles.
Si el valor de la moneda es alto, los productos se vuelven menos competitivos en los mercados extranjeros y se obtienen menos beneficios cuando el dinero vuelve al país.
Ante este panorama, el gobierno de Tokio ha estado bajo presión para intervenir en el mercado cambiario.
Nuevo intento
Según explica el analista económico de BBC Mundo, Marcelo Justo, esta sería "un nuevo intento de revivir una economía que no logra salir de una crisis que empezó hace dos décadas. Si va a dar resultado, todavía no se sabe".Sin embargo, Justo también plantea una incógnita.
"Por el momento, la decisión del gobierno japonés es un caso aislado, motivado por las condiciones especiales de su economía. En el nivel internacional, el peligro es que otros países decidan adoptar políticas de devaluación similares para mejorar su competitividad, una de las razones que profundizó la crisis económica de los años 30. No parece que vaya a ocurrir, pero si las condiciones internacionales empeoran, puede ser una tentación difícil de resistir", concluyó.
Entre tanto, las reacciones de la bolsa no hicieron esperar. No bien se conoció la intervención gubernamental, el Nikkei -el índice del mercado bursátil de Tokio- experimentó un alza de un 2% en la apertura de la sesión.
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