Las generaciones de consolas han arrancado cada seis años por término medio, y hace cinco años y siete meses que se puso a la venta la primera de la séptima generación, la Xbox 360. Así que la edición celebrada esta semana de la Electronic Entertainment Expo (E3), la principal feria de videojuegos del mundo, estaba destinada a anunciar el comienzo del siguiente ciclo. Que arrancará, salvo sorpresa, con la puesta a la venta el próximo año de Wii U, la nueva consola de Nintendo, que fue la novedad más destacada de la cita de Los Ángeles junto a la materialización de la PSVita, la nueva portátil de Sony.
Para ser sinceros, la presentación de la Wii U tuvo bastante de golpe de efecto más que de realidad palpable, en un momento en que Nintendo ha perdido protagonismo en el mercado; de hecho, tras lo visto, Nintendo cayó un 5,7% en la sesión del miércoles y otro 4,5% en la de ayer (sus acciones cotizan a su precio más bajo desde marzo de 2006, antes de que se lanzara la Wii). No se ha visto más que de lejos la consola en sí, ni se han dado apenas datos técnicos; se sabe que terminará con los déficits de la Wii respecto al rendimiento de sus rivales. La de Nintendo, pese a su éxito, es una máquina con la mitad de potencia de procesador que Xbox 360 y que PlayStation 3, y la única de las tres que no tiene vídeo en alta resolución, y ambas carencias quedarán solventadas. Para dar cuenta de lo esperado del lanzamiento, baste decir que pese a esas carencias van vendidas en todo el mundo cinco veces más Wii (90 millones) que iPad (18 millones).
La imagen una y otra vez presentada de la Wii U es un mando periférico que, de hecho, posiblemente sea opcional, puesto que se mantendrá el actual Wiimote. Es una especie de tablet con pantalla de seis pulgadas y mandos a los lados, que se empleará para ciertos juegos y abre opciones creativas interesantes. Todo hace indicar que la máquina, que saldrá a la venta en la segunda mitad del próximo año, podrá verse plenamente en el Tokio Game Show de septiembre.
Ese ha sido el caso con la nueva portátil de Sony, que definitivamente se llamará PSVita. Se pudo jugar con ella, se conoció su fecha aproximada de lanzamiento para finales de este año y su precio, 249 euros con conexión wifi y 299 con 3G. Su punto fuerte es una pantalla táctil de cinco pulgadas con una excelente resolución y una potencia gráfica inédita en máquinas de este tamaño, buscando marcar la diferencia frente al que parece el enemigo verdadero a batir para las portátiles: los smartphones.
Además de una extensa lista de juegos, Sony presentó también una novedad interesante, una pantalla de 24 pulgadas y 3D específicamente diseñada para ser usada con la PlayStation 3 y que permitirá jugar en distintas pantallas con la misma consola. Por cierto, que la conferencia oficial de Sony se abrió con una petición de disculpas por los problemas del servicio Network que fue muy bien recibida.
El tercer grande de este negocio, Microsoft, tuvo una presentación más continuista, buscando sacar más partido a las posibilidades de su gran novedad del pasado año, Kinect. Sobre todo, destaca la promesa de que el detector de movimiento pueda emplearse para juegos más sofisticados, lo que abrirá el panorama después de un absoluto protagonismo de los títulos para jugadores casuales en el lanzamiento. Además, Kinect también podrá emplearse cada vez más para labores como la de navegar por Xbox Live, que estrenará dashboard.
Para ser sinceros, la presentación de la Wii U tuvo bastante de golpe de efecto más que de realidad palpable, en un momento en que Nintendo ha perdido protagonismo en el mercado; de hecho, tras lo visto, Nintendo cayó un 5,7% en la sesión del miércoles y otro 4,5% en la de ayer (sus acciones cotizan a su precio más bajo desde marzo de 2006, antes de que se lanzara la Wii). No se ha visto más que de lejos la consola en sí, ni se han dado apenas datos técnicos; se sabe que terminará con los déficits de la Wii respecto al rendimiento de sus rivales. La de Nintendo, pese a su éxito, es una máquina con la mitad de potencia de procesador que Xbox 360 y que PlayStation 3, y la única de las tres que no tiene vídeo en alta resolución, y ambas carencias quedarán solventadas. Para dar cuenta de lo esperado del lanzamiento, baste decir que pese a esas carencias van vendidas en todo el mundo cinco veces más Wii (90 millones) que iPad (18 millones).
La imagen una y otra vez presentada de la Wii U es un mando periférico que, de hecho, posiblemente sea opcional, puesto que se mantendrá el actual Wiimote. Es una especie de tablet con pantalla de seis pulgadas y mandos a los lados, que se empleará para ciertos juegos y abre opciones creativas interesantes. Todo hace indicar que la máquina, que saldrá a la venta en la segunda mitad del próximo año, podrá verse plenamente en el Tokio Game Show de septiembre.
Ese ha sido el caso con la nueva portátil de Sony, que definitivamente se llamará PSVita. Se pudo jugar con ella, se conoció su fecha aproximada de lanzamiento para finales de este año y su precio, 249 euros con conexión wifi y 299 con 3G. Su punto fuerte es una pantalla táctil de cinco pulgadas con una excelente resolución y una potencia gráfica inédita en máquinas de este tamaño, buscando marcar la diferencia frente al que parece el enemigo verdadero a batir para las portátiles: los smartphones.
Además de una extensa lista de juegos, Sony presentó también una novedad interesante, una pantalla de 24 pulgadas y 3D específicamente diseñada para ser usada con la PlayStation 3 y que permitirá jugar en distintas pantallas con la misma consola. Por cierto, que la conferencia oficial de Sony se abrió con una petición de disculpas por los problemas del servicio Network que fue muy bien recibida.
El tercer grande de este negocio, Microsoft, tuvo una presentación más continuista, buscando sacar más partido a las posibilidades de su gran novedad del pasado año, Kinect. Sobre todo, destaca la promesa de que el detector de movimiento pueda emplearse para juegos más sofisticados, lo que abrirá el panorama después de un absoluto protagonismo de los títulos para jugadores casuales en el lanzamiento. Además, Kinect también podrá emplearse cada vez más para labores como la de navegar por Xbox Live, que estrenará dashboard.
Siguen al mando las secuelas
MICROSOFT. Los títulos exclusivos para Xbox 360 fueron uno de los puntos fuertes del E3, con el anuncio de esperados títulos como Mass Effect 3, Halo 4 o Forza Motosport 4.NINTENDO 3DS. Llegarán de inmediato las esperadas adaptaciones a la nueva consola de varios clásicos de la casa, como Super Mario o Mario Kart. Entre las novedades absolutas destacó Luigi's Mansion 2, y se aguarda el nuevo Zelda.
ELECTRONIC ARTS. Se mostraron más detalles del esperado juego de rol online basado en el universo Star Wars. El próximo FIFA tendrá versión para Kinect.
UBISOFT. La empresa francesa se encargará del primer videojuego de Tintín y añadirá títulos a sus series Rayman, Assassin's Creed, Driver o Farcry.
Cinco Dias